La Asamblea Legislativa cubrió cargos en la Defensoría del Pueblo y el Tribunal de Cuentas
Órganos de Control: aprobaron pliegos de 2 diputados del PJ
Una tormenta política sacudió al PJ, que cuidó de no llevar su discusión interna al recinto. Fueron aprobados los pliegos de los justicialistas Liliana Meotto y de Mario Esquivel. No hubo dictamen para el de Sergio Mas Varela, de origen radical. Los partidos del Frente Progresista tuvieron la misma lectura crítica frente a sendas designaciones, pero mientras unos votaron en contra, otros se abstuvieron.

Luis Rodrigo

Fue un momento incómodo. Un completo silencio oficial siguió a la pregunta que formuló Aldo Strada: "¿Puede la mayoría explicar por qué hay dictamen para los dos pliegos de los diputados del justicialismo y no sobre el del Dr. Mas Varela?", que no pertenece a esa fuerza política, lanzó el diputado del ARI.

Si hubiera sido en TV, según sus estridentes cánones, el solitario cric-cric de un grillo habría ocupado ese insoportable vacío.

La filosa pregunta sintetizó horas de debate; cortó en dos el aire de la sesión de ayer de la Asamblea Legislativa, y provocó que el jefe de bloque de la bancada del PJ de la Cámara Baja, Mario Lacava, tomara nota del problema. Ya fuera del recinto, a los periodistas les contestó: "Hay que preguntarle al diputado Jorge Lagna, porque así lo resolvió el bloque del PJ. Él es quien tiene que contestar. Es todo lo que tengo que decir", expresó el obeidista.

Le siguieron unas críticas declaraciones del reutemannista Lagna, miembro de la Comisión de Acuerdos por el justicialismo. "En el caso de Mas Varela -dijo- vamos a seguir discutiéndolo entre nosotros. Esta es una actividad compleja, es una cuestión compleja cuando hay que llegar a un acuerdo...¿No?. Esta es una actitud, que tienen los poderes Legislativo y el Ejecutivo, cada uno en sus atribuciones, respecto de los nombramientos de magistrados y de miembros del Tribunal. Queremos seguir debatiendo para llegar a un consenso: vamos a ver si la semana que viene lo logramos en el bloque", abundó.

Dos de tres

De los tres pliegos que remitió el Ejecutivo a senadores y diputados, dos obtuvieron tratamiento y aprobación, y un tercero no logró dictamen. Según ayer se encargó de anunciar la vicegobernadora María Eugenia Bielsa será convocada la Asamblea para su tratamiento, la semana próxima, junto a otros 25 pliegos de candidatos a jueces.

La oposición -a propósito de semejante número- no se privó de hablar de una "catarata" de designaciones, y del "nombramiento de amigos".

Liliana Meotto fue respaldada por 36 votos favorables del PJ, uno en contra (del diputado Cura), y se contaron 20 abstenciones (de los bloques del Frente Progresista).

Distinta fue la suerte de Mario Esquivel: 34 compañeros justicialistas votaron por la afirmativa (dos menos que en el caso anterior); 7 en contra (Cura más los legisladores del ARI y el PDP); y hubo 13 abstenciones del PS y la UCR (los radicales no frentistas prefirieron no ir a la sesión).

Tal como lo había anticipado, el peronista Jorge Cura sostuvo su impugnación por incompatibilidad para ambos compañeros de bloque. Y pidió que un documento con los fundamentos de su voto negativo se agregue al diario de sesiones.

El pliego de Sergio Mas Varela, un abogado y contador, afiliado radical (de origen usandizaguista) que comparte su cátedra en la UNR con el ministro de Hacienda, Walter Agosto, no logró pasar por la Comisión de Acuerdos.

Debate de fondo

La distribución de los últimos cargos disponibles antes de la salida del poder ha desatado una crisis interna en el peronismo, que se refleja en la Legislatura.

Esta pelea fuera del recinto opacó el interesante debate de fondo que rodeó la aprobación de los pliegos de Meotto y Esquivel.

La discusión de diputados y senadores giró -como antes con los pliegos de Erbetta y Basso- sobre la cuestión de la oportunidad: el oficialismo en retirada insistió en su tesis, amparada en el concepto de legalidad, de que su mandato no ha terminado; y la oposición, bajo el criterio de la legitimidad, sostuvo otra vez que -carente la ciudadanía de la posibilidad de reproche electoral- no deberían tratarse asuntos de fondo, a días de un cambio de signo político en el gobierno.

También fue desde el punto de vista doctrinario interesante el tema de las compatibilidades. La pregunta es ¿le caben a un legislador las mismas atribuciones funcionales que a un integrante del Ejecutivo a la hora de evaluar si ha administrado el Estado?.

No es una cuestión menor, porque los dos pliegos ayer aprobados son de diputados en pleno ejercicio de sus mandatos. Para la oposición (y el justicialista Cura), es incompatible haber tomado decisiones sobre el destino de los recursos de la provincia al legislar (y más aún al entregar subsidios) y en cuestión de días convertirse en contralor de cómo se manejan los dineros públicos.

Por otra parte, volvió a hablarse sobre el método con que se hacen las designaciones. El PJ advirtió que la modalidad es la prevista en la Constitución y que dentro de los límites que ésta impone (porque le ha dejado las manos libres al gobernador para proponer los pliegos que le parezcan), sucesivas autolimitaciones han permitido un proceso más participativo. Para la oposición -que ya ensaya su discurso en favor de la reforma- se trata de cambiar el texto constitucional, de legislar e imitar -por ejemplo- a la ciudad de Buenos Aires que goza de audiencias públicas y plazos más extensos para facilitar el debate.