Media sanción con debate repetido
Diputados giró al Senado el presupuesto nacional
La oposición acusó al oficialismo de subestimar recursos para que el presidente maneje los excedentes por decreto. El oficialismo dijo que refleja los "valores virtuosos" del ciclo económico

De la redacción de El Litoral/DyN

La Cámara de Diputados dio ayer media sanción y giró al Senado para su aprobación definitiva el presupuesto nacional para 2008, que prevé un gasto total de 161.486 millones de pesos, un crecimiento del PBI de 4 puntos, una inflación estimada en 7,7 por ciento y el dólar a 3,20 pesos.

A su vez, la propuesta que envió el Poder Ejecutivo al Congreso calcula un incremento del pago de intereses de la deuda del 14,5 por ciento, que incluye deuda renegociada, y un crecimiento de las prestaciones de seguridad social del 16,6 por ciento.

Por otra parte, la iniciativa estima para 2008 una recaudación fiscal para el año próximo de 233 mil millones de pesos que estará a cargo de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip). El proyecto fue aprobado en general con 123 votos a favor y 62 votos en contra, con lo que el oficialismo logró, con ayuda de sus aliados pro-kirchneristas, sancionar parcialmente el presupuesto que tendrá el primer año de gestión de la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner.

En contra del presupuesto votaron los bloques de la UCR, las dos fracciones del ARI, el Peronismo Nacional (ex duhaldistas), el monobloque de Claudio Lozano, el interbloque PRO y el socialismo.

En defensa del proyecto del gobierno, el jefe de la bancada del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, insistió en que el de 2008 "es un presupuesto que obviamente sigue manteniendo para nosotros los valores virtuosos de este ciclo económico" y "permite pensar que el año que viene va a ser un año con una performance social y económica contundente".

Las críticas de la oposición se centraron en la presunta subestimación de recursos que vienen reiterando los presupuestos de la gestión de Néstor Kirchner y el "manejo discrecional" atribuido a la Jefatura de Gabinete por la delegación de facultades que el año pasado consiguió aprobar en el Congreso el oficialismo.

El jefe del bloque radical, Fernando Chironi, recordó que la Argentina "ha vivido tiempos en los que los éxitos electorales se han transformado en exitismo y no quisimos escucharnos", por lo que consideró que "un sistema institucional más balanceado" podría "ponernos a salvo de errores cometidos en el pasado".

A su vez, Eduardo Macaluse (ARI-Autónomo), subrayó que "mientras hay 30 mil millones de pesos en subsidios a los sectores empresarios más concentrados el sistema tributario regresivo que impuso Domingo Cavallo sigue intacto y no se avizoran mejoras sustanciales en las remuneraciones de, fundamentalmente, los trabajadores del sector público".

Adrián Pérez, referente de la Coalición Cívica de Elisa Carrió, también marcó diferencias con el presupuesto al sostener que "sigue el manejo poco transparente de los fondos públicos" e insistió que, como años anteriores, "vuelve a ser una ficción porque se mantienen los superpoderes del jefe de Gabinete para reasignar partidas".

Imposición oficial

La réplica del oficialismo estuvo a cargo de Rossi, que al cerrar el debate apuntó que en todo 2006 el gobierno sólo emitió diez Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) y en lo que va de 2007 lleva dictados siete.

"Entonces la verdad que eso que parecía que significaba un nuevo avasallamiento del Poder Ejecutivo sobre el Parlamento parecería que ha venido funcionado bastante bien", destacó.

En cuanto a los llamados "superpoderes" otorgados a la Jefatura de Gabinete, Rossi recordó que la iniciativa "se discutió en este Congreso" por lo que consideró que "si cada vez que traemos un presupuesto la excusa para no votarlo va a ser la modificación de la ley de Administración Financiera no parece una actitud democrática".

En el tratamiento en particular de la iniciativa -que demandó apenas 2 horas y 10 minutos- el presidente de la Comisión de Presupuesto, Carlos Snopek (FPV), no aceptó la mayoría de las modificaciones propuestas por la oposición. El tratamiento en general del presupuesto se había iniciado el miércoles a la noche y la sesión pasó a cuarto intermedio hasta las 10.30 de ayer, cuando fue seguida por poco más de cinco horas de debate hasta que la Cámara dio media sanción al proyecto.

Millones a discreción

El jefe del bloque Peronista Nacional, Jorge Sarghini, estimó en 18 mil millones de pesos la subestimación del presupuesto, "un 10 por ciento por encima del cálculo de recursos". El presidente del interbloque PRO, Federico Pinedo, remarcó que "si el presupuesto es una autorización de límite del gasto, los superpoderes y los DNU significan que el gobierno gasta independiente de la voluntad del Congreso", por lo que reiteró que "si este gobierno hace lo que le parece, entonces sencillamente no hay presupuesto".

En cifras

  • %s$ 169.462,8 millones

    son los recursos totales de la Administración Nacional.

  • $ 161.486,5 millones son los gastos previstos para el ejercicio

  • $ 27.045,6 millones es el superávit previsto para el resultado primario

  • $ 7.976,3 millones es el superávit del resultado financiero

  • $ 233.502,4 millones la recaudación total del sector público nacional

  • $ 142.432,5 millones son los gastos corrientes

  • $ 19.053 millones son los gastos de capital de la administración nacional

  • $ 57.828,6 millones son los gastos de la Seguridad Social (ANSES: $ 1.821,2 millones)

  • $ 19.069,3 millones son los intereses de la deuda pública

  • Crisis de magnitud

    El episodio originado por las hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos constituye la crisis financiera más importante de los últimos diez años, afirmó el presidente del Banco Central (BCRA), Martín Redrado.

    Durante una disertación en la Academia Nacional de Ciencias Económicas, además de sostener que esta crisis "ha venido para quedarse", el funcionario reconoció que uno de los mayores problemas es que no hay forma aún de medir la magnitud de la crisis.

    Esto se debe a que no se trata solamente de bancos en riesgo por dar préstamos a personas de baja calidad crediticia, sino que estos préstamos se securitizaron y vendieron en el mercado de capitales varias veces. Además, quienes compraban las carteras de crédito las usaban como garantía para apalancarse y tomar financiamiento, argumentó.

    Según Redrado "estamos frente a una crisis de información, ya que nadie sabe cuántas veces se han transferido esos riesgos ni dónde están ubicados, quedando anestesiado el mercado crediticio".

    Afirmó luego que "la restricción de liquidez también ha generado incertidumbre acerca del verdadero valor de estos activos" ya que hubo "ventas indiscriminadas de activos de mayor riesgo como aquellos de mercados emergentes y una parálisis total en el crédito a corto plazo en los países desarrollados".

    De todos modos, el titular del BCRA dijo que la economía real argentina se mantuvo al margen de esta crisis, defendiendo la política monetaria y financiera aplicada. En particular destacó la estrategia de acumulación de reservas, que logró acotar la volatilidad.