Fue creada una agrupación que lleva el nombre de uno de los grandes del fútbol argentino y de Colón. Su presidente es Oscar Yódice. Estuvieron presentes ex jugadores de las últimas cuatro décadas.
Enrique Cruz (h)
Hubo emociones, anécdotas, algunos lagrimones en los muchos sabaleros que se acercaron para darle el apoyo a un hombre que hizo tanto por Colón y que generó, pese al corto tiempo que estuvo en Santa Fe, tanto amor de parte de la gente. Es que José Luis Saldaño, o "Poroto", directamente, es un hombre que será imposible de olvidar por parte de los hinchas colonistas. Sobre todo por los que disfrutaron de un equipo inolvidable, aquél de 1975, de la mano del Gitano Juárez.
Y fue lindo ver juntos al "Bambi" Aráoz, el "Gringo" Mariano, a Ramón Mántaras y a Edgar Fernández, por ejemplo. ¿Alguna vez les tocó jugar juntos?, fue la pregunta que surgió de inmediato. "íPor supuesto!", resonó rápidamente la respuesta del "Gringo" Mariano, un ex de perfil bajo, que en aquel equipo de 1975 se transformó en el recambio de dos monstruos que empezaban a alejarse del club para transformarse en una dupla espectacular: Villaverde-Trossero.
"¿No vistes cuando nos sacamos la foto?, ípobre fotógrafo!, le pedimos que se ponga canilleras, por las dudas...", decía el "Gringo", un verdadero "perro de presa" en aquellos tiempos, quien se lamentaba de no haberlo visto a "Cococho", ausente con aviso por haber viajado a Gualeguaychú. Y cuando le preguntamos a los cuatro por el funcionamiento de aquella defensa en un mediocampo que, por ejemplo, a veces tuvo como integrantes a Mazo, Álvarez y Carlitos López, el "Gringo" no dudó: "Bueno, algo le debe haber pasado al chaqueño Zimmermann, porque generalmente el que tenía que aguantarse el peso de la marca era él. Pero "Cococho' Alvarez fue un jugador espectacular. Para mí estuvo entre los cuatro o cinco mejores mediocampistas de esos tiempos. Si jugaba de 5, recuperaba y jugaba; si jugaba de 10, creaba; y si lo ponían de 8, recuperaba, corría y jugaba. Era completo. Un fuera de serie".
De todas las décadas
El más viejito -aunque se mantiene bárbaro, como siempre- era Jorge Omar Sanitá, el gran capitán de los 60. Y él fue el encargado de hablar, después de que "Poroto" Saldaño, visiblemente emocionado, haya mirado a los ojos y reconocido en cada uno de los presentes el valor que tenía no sólo el hecho de estar allí, junto a él, sino también de lo que significaron para Colón.
De la primera época, o de los más viejitos, hay que sumarlo a "Motoneta" López. Y después, los muchachos de los 70, donde un "juvenil" Ernesto Rubén Aráoz no dejaba de elogiar también a Edgar Fernández. "Che, a éste no le pasa el tiempo, qué bárbaro", decían todos al verlo al "Negro", un "3" de aquéllos.
También estuvieron los de la década del 80, no tan prolífica en éxitos pero sí en la aparición de buenos jugadores. Por ejemplo, ¿quién no recuerda a la "Vaquita" Mercado?, ¿o a Alberto Manuel Bustingorria, aquel marcador de punta que le pegaba con un "caño" a la pelota?, ¿o al "Loco" Solís, el wing izquierdo que formó un trío en la "B" con Pesoa y Chena en el ataque?... Y ahí estaba la mamá del "Zurdito" Verdirame, diciendo presente en nombre de su hijo. O, más acá en el tiempo, alguien que surgido de las inferiores de la institución, protagonizó uno de los goles más importantes de todos los tiempos. Me refiero a "Chupete" Marini y aquel bombazo que clavó en Tucumán y que le dio a Colón medio pasaje a Primera en 1995.
Ayudar a Colón
La idea de la agrupación es la de juntarse semanalmente, darle una mano al club y pugnar por el reconocimiento permanente hacia aquellos ex jugadores que hicieron posible el crecimiento deportivo sabalero.
El de ayer fue el puntapié inicial. El nombre es convocante, porque en el corazón de los hinchas sabaleros, el apellido Saldaño es sinónimo de tiempos felices, goles gloriosos y partidos inolvidables.
Sus amigos estuvieron a su lado. Y no serán pocos los que se acercarán para decir presente. Porque "Poroto" se lo merece.
