Cuidado con la pirotecnia. Forman parte de la tradición de las fiestas de fin de año pero, para que acompañen el festejo sin derivar en una tragedia, conviene tener en cuenta algunas recomendaciones sobre todo para el uso de artefactos pirotécnicos, sobre todo en los más chicos.
La pirotecnia forma parte de la oferta comercial para estas fechas pero, si no es utilizada como corresponde, supone un serio riesgo para quien haga uso de la amplia gama de artefactos que existen en el mercado.
Como es habitual para estas celebraciones navideñas, los organismos de salud y emergencias difunden algunas recomendaciones destinadas a prevenir accidentes por el uso inadecuado de estos elementos. En tal sentido, aconsejan que los niños y menores de edad no manipulen elementos de pirotecnia y que, en caso de hacerlo, sea bajo la vigilancia de un adulto.
Además, recomiendan que sean adquiridos los productos autorizados, que deben tener en un lugar visible la constancia de habilitación del Registro Nacional de Armas (Renar).
Por el contrario, los productos de fabricación clandestina deben ser evitados porque, a diferencia de los legales, se fabrican con pólvora blanca compuesta de elementos químicos muy inestables, que pueden detonar con un simple golpe, un roce o el aumento de la temperatura.
De esta manera y para minimizar los riesgos, conviene leer cuidadosamente las instrucciones de uso y no acercar la cara u otra parte del cuerpo a un artículo pirotécnico encendido.
Para tener en cuenta
•Las cañitas voladoras nunca deben encenderse en la mano.
Lesiones auditivas
La pirotecnia también es peligrosa para los animales. El miedo los hace saltar de las terrazas y balcones para alejarse del ruido; y si están atados pueden estrangularse al girar sobre sí mismos.
El ruido de los petardos es de muy corta duración (un centésimo de segundo). Esto provoca lesiones auditivas porque el mecanismo de protección del oído se activa recién a las diez centésimas de segundo.
Otras claves
Los productos de pirotecnia no llevan impresa fecha de vencimiento, pero su duración aproximada es de tres o cuatro años, siempre que se conserven almacenados en un lugar seco, lejos de fuentes de calor.
Las estrellitas y bengalitas para chicos también entrañan un riesgo. Las chispas pueden prender fuego la ropa y causar heridas en los ojos.
Cuando un producto no explota, jamás debe tocarse, aunque parezca que la mecha está apagada.
La pirotecnia menos riesgosa es la que privilegia el color y la luz sobre el ruido de estruendo. Los productos sonoros son más peligrosos por su poder detonante.
El ruido de pirotecnia afecta el oído. Uno de sus efectos es la percepción de zumbidos luego de la detonación, que va disminuyendo pero no desaparece totalmente. Los niños están más expuestos porque su sistema auditivo es más vulnerable.
Los lugares del cuerpo que resultan más afectados en caso de accidentes son manos, ojos, pies y región inguinal.
Almacenamiento y venta
También en sucesivas oportunidades, autoridades policiales insistieron en las exigencias que rigen para el almacenamiento y venta de estos artículos. Así, recuerdan que está terminantemente prohibida la venta de artículos pirotécnicos de cualquier tipo a menores de edad, como también existencia y comercialización de todo tipo de elementos o artículos de pirotecnia en establecimientos que no se encuentren habilitados para ese fin.
Los comercios habilitados deben observar que el acopio del material explosivo no sea en lugares donde coexistan combustibles, sustancias inflamables o ácidas.
Por otra parte, los artículos de pirotecnia deben estar almacenados en cajones de madera con un espesor mínimo de 8 mm, con cara externa cepillada, fuera del alcance del público y en lugar apartado del acceso al local.
En las vidrieras de los locales se deben exhibir muestras inertes del producto pirotécnico. Y los espacios comerciales deberán contar con extinguidores contra incendio en proporción a la carga explosiva almacenada.
Recomendaciones
El cuidadode las mascotas
Cada año la Asociación de Defensa de los Derechos del Animal (A.D.Der.A) insiste con una serie de recomendaciones para evitar que los festejos de fin de año resulten en una experiencia desagradable para las mascotas.
Conviene tener en cuenta que el aparato auditivo de los animales es mucho más vulnerable con respecto a los ruidos. Por eso es que, para autoprotegerse, escapan y -en consecuencia- se pierden, accidentan o lesionan.
Para evitarlo, la entidad recomienda colocar a los animales de compañía (perros y gatos) collares identificatorios que faciliten su reubicación. Además, aconseja dejarlos adentro de la vivienda y en lugares seguros donde no puedan escapar a la vía pública y se sientan protegidos, si es posible con alguna música o radio que pueda tranquilizarlos. No conviene depositarlos en terrazas o patios. También se puede consultar a un veterinario de confianza para el uso de sedantes u otra medida de prevención.
Conocer
Productos ilegales
Hay una serie de detalles que permiten identificar a un producto pirotécnico ilegal y evitar su utilización:
