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La exploración de petróleo, construcción de una fábrica de lubricantes, y créditos para aumentar la importación de alimentos y producir níquel, fueron los principales acuerdos suscriptos entre Cuba y Brasil.
El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, firmó ayer en Cuba acuerdos para la exploración de petróleo en aguas del Golfo de México, aumentar los créditos, la cooperación e inversión, y se reunió luego con su amigo Fidel Castro.
Lula, en visita de un día a La Habana, refrendó diez convenios con el gobernante provisional de Cuba, Raúl Castro, tras una reunión de una hora en el Palacio de la Revolución, en compañía de los jerarcas de las petroleras estatales, cancilleres y ministros de Comercio, Salud, Educación.
Lula se entrevistó con el convaleciente líder cubano Fidel Castro, quien cedió el poder a su hermano Raúl desde que enfermó hace 17 meses, y con quien tiene diferencias en torno de la producción de etanol, tema que, según informes brasileños, no fue tratado en la visita.
La exploración de petróleo, la construcción de una fábrica de lubricantes, y millonarios créditos para aumentar la importación de alimentos y modernizar una planta de níquel en Moa, provincia oriental de Holguín, fueron los principales acuerdos suscriptos.
"Estamos empezando los análisis sísmicos, para después empezar la actividad de perforación. Por el momento estamos terminando la adquisición de datos sísmicos, estudiándolos", dijo a la prensa el presidente de la petrolera brasileña Petrobras, José Sérgio Gabrielli.
Tras los estudios, en seis meses se definirán en cuáles de los 35 bloques disponibles en aguas cubanas del Golfo de México -de un total de 59-, invertirá Petrobras, dijo el presidente de la empresa Cuba Petróleo (Cupet), Fidel Rivero.
"Tienen especialistas y alta tecnología, son líderes mundiales en perforación de aguas profundas", comentó Rivero, quien precisó que en los restantes 24 trabajan compañías de España, Canadá, Malasia, Venezuela, India, Vietnam y Noruega bajo contrato de riesgo.
Sin éxito
Petrobras exploró sin éxito petróleo en Cuba entre 1998 y 2001 en aguas someras en un pozo en Ciego de Avila (centro), pero "por primera vez deciden participar en el Golfo de México" y ahora construirán una empresa mixta en la isla para levantar una fábrica de lubricantes que en 120 días deberá "estar conceptualizada", añadió.
"Fue todo un éxito, ahora nos queda trabajar mucho para seguir avanzando", declaró por su parte a la prensa la ministra de la Industria Básica de Cuba, Yadira García.
Lula aprobó millonarios créditos -no precisados oficialmente- para la compra de alimentos, ampliación y modernización de la planta de Moa, así como equipamientos para la piscicultura.
Ambos países acordaron otros préstamos para proyectos en hotelería, farmacia, biotecnología, infraestructura vial, industria azucarera y transporte. Según la prensa brasileña, el financiamiento estaría entre 600 y 800 millones de dólares.
En biotecnología, se acordó un contrato de licencia de patentes y transferencia de información técnica sobre el fármaco recombinante Interferón Alfa-2B, precisó el ministro de Salud de Brasil, José Gomes.
Añadió que ambos países sostienen un diálogo "muy positivo" para avanzar en acuerdos entre universidad y validación de títulos de médicos brasileños graduados en Cuba, hasta ahora 143.
Brasil, segundo socio comercial de Cuba en Latinoamérica y cuarto del continente tras Venezuela, Canadá y Estados Unidos, tiene importantes inversiones en la isla, una amplia cooperación en salud, y un intercambio que creció de 117 millones de dólares en 2002 a 453 en 2006, 429 millones en ventas brasileñas.
Con Fidel
En tanto, Lula da Silva finalizó su visita oficial a Cuba tras un encuentro con su colega Fidel Castro, al que vio "con una lucidez increíble" y una salud "impecable" y listo para asumir su papel político en la isla.
"Pienso que Fidel está listo para asumir el papel político que él tiene en Cuba y asumir el papel político que tiene en la historia del mundo globalizado y de la humanidad", dijo a la prensa el presidente brasileño en el aeropuerto internacional de La Habana, donde fue despedido por Raúl Castro.
Fidel Castro y Lula, que tenía "interés personal" en realizar esta visita a Cuba, mantienen una larga amistad desde la época en la que el hoy presidente de Brasil era un destacado líder sindicalista.
Lula dijo que su entrevista con Fidel Castro se extendió por dos horas y media.
"De las cuales, él habló dos horas y yo sólo media, pero tratamos todos los temas", relató un distendido Lula ante las risas de los periodistas.
Cambio de sexo
El gobierno cubano está a punto de aprobar una resolución que da luz verde a las cirugías de cambio de sexo en la isla, donde existen 28 transexuales diagnosticados entre 100 casos en estudio, dijo la sexóloga Mariela Castro, hija del presidente interino Raúl Castro.
La resolución del Ministerio de Salud (Minsap) "está prácticamente aprobada", aunque no todos los casos diagnosticados "quieren operarse", declaró a la prensa Mariela Castro, quien dirige desde 1989 el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex).
AFP
