Extorsión: los policías se abstuvieron de declarar

Los ocho policías acusados de extorsionar, privar ilegalmente de la libertad, robar y hacerles pagar una coima en pesos y euros a dos turistas, entre ellos un español, se abstuvieron de declarar ayer en Rosario.

Las indagatorias comenzaron por la mañana a cargo de la jueza de Instrucción, Raquel Cosgaya, quien dispuso luego citar a declarar -a modo informativo- al resto de los integrantes de la Patrulla de Caminos, es decir a una veintena de compañeros de los imputados.

Los acusados que se abstuvieron de declarar se encuentran en situación de disponibilidad e imputados en la causa, aunque continúan en libertad.

Sobre el tema, el fiscal de Cámaras de Rosario, José María Peña, consideró que hay evidencia contundente que involucra a los policías en el hecho denunciado y elementos como para acusar también a los jefes de esos efectivos.

Precisamente, a raíz de este caso denunciado, el pasado viernes por las víctimas ante la fiscal rosarina Cristina Rubiolo, el jefe y subjefe de la Patrulla de Caminos fueron relevados de sus cargos por orden del Ministerio de Gobierno de Santa Fe.

Los turistas Santiago Mercatante, de 32 años, y su primo español Juan Balmont López, de 31, denunciaron que el hecho ocurrió el viernes último, cuando los policías los requisaron en el puesto de peaje de General Lagos, el último de la autopista Bueno Aires-Rosario, antes de ingresar a esta ciudad.

Según los denunciantes, los policías, tras comprobar que los papeles del auto en el que viajaban se hallaban en regla, requirieron facturas de productos para peluquerías que Mercatante llevaba a Rosario por razones de trabajo.

Al no contar con el remito respectivo, comenzaron las extorsiones policiales, que se agravaron cuando uno de los efectivos apareció con unas pastillas tranquilizantes en la mano y les dijo que las había hallado en el auto y que se trataba de "drogas peligrosas", dijeron los denunciantes, quienes aseguraron que fueron amenazados con ir presos.

Según los turistas, los policías les aconsejaron que contrataran un abogado o que, en vez de pagarle a uno les entregaran a ellos el valor de un asesoramiento legal, que pautaron en 10 mil pesos.

Mercatante y Balmont López les entregaron 700 y 250 pesos, respectivamente, pero ese dinero les resultó a los efectivos insuficiente y les exigieron una suma mayor.

Para obtener más dinero, los policías obligaron al turista español a solicitarle a su familia, radicada en Palma de Mallorca, un giro telegráfico urgente a Rosario.

Fue así como el español obtuvo 800 euros que fue a cobrar a un local de Western Union al que lo llevaron los propios policías.

Hasta ese momento, los primos permanecieron tres horas privados ilegalmente de la libertad y, antes de poder retirarse, los policías les robaron toda la mercadería de trabajo que trasladaba Mecatante en el auto, además de una cámara de fotos, un celular, una pulserita, el estéreo del auto y los compacts.

Télam