Efectos de la política ganadera
Informe de CRA advierte por una menor producción de carne
Sobre la base de datos oficiales de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario, la entidad ruralista explica que la faena de animales livianos y hembras promete un escenario restringido a futuro.

Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) dio a conocer un informe por el cual alerta que "la política ganadera vigente durante los dos últimos años condujo a una menor producción de carne". Advierte la entidad que "estamos comiendo el futuro de la ganadería".

Según el estudio presentado por la entidad -en base a números publicados por la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA)-, la disminución se prueba mediante la transferencia en el engorde del novillo pesado hacia categorías más livianas (que aumentó en el porcentaje final de faena de machos) y en el incremento de la faena de hembras con posibilidades de ser futuras madres, lo que pone en peligro el proceso de reposición.

Los directivos de la entidad coincidieron en señalar que "esta nueva modalidad de faena acarreará, sin dudas, dificultades para el abastecimiento en el futuro debido a una agudización en la falta de carne, causada por la menor presencia en la faena del novillo pesado y la merma en la reposición de vientres (fábricas de terneros) y, en definitiva, de carnes".

"A través de este trabajo se pretende demostrar cómo la política llevada a cabo por el gobierno nacional en lo que hace a la ganadería está provocando una reducción en la producción de carnes", dice el documento.

Señala que con el propósito de fortalecer el mercado interno, al utilizar diversas e improvisadas herramientas para incentivar la producción cárnica destinada a satisfacer el consumo en el país, el gobierno "logró un efecto totalmente opuesto: desalentar la producción del novillo pesado y perjudicar al sector de cría".

Números que cantan

Tomando como base la faena de 2005, año en el que empezó la intervención gubernamental al mercado cárnico, se expone que a menor cantidad de novillos pesados se producen menos kilos de carne. En 2006 se faenaron 958.725 animales machos más que en el 2005.

"Si el stock ganadero se mantuvo, si obtuvimos la misma cantidad de terneros (15 millones de terneros, de los cuales el 50 % son machos; 6,5 millones descontada la reposición de reproductores y mortandad), ¿Cuál es la causa del aumento de machos en la faena?; sin dudas, la causa fue la reducción en el tiempo de engorde (por intervenciones en las exportaciones, subsidios por hacer el novillo liviano y expectativas negativas sobre el futuro del sector), por lo que agregamos en un año animales que tendrían que salir al año siguiente".

Añade el informe como causa "la reducción en el tiempo de engorde; recordemos que para un novillito se necesitan de 3 a 5 meses y para un novillo pesado de 18 a 24 meses". Eso se refleja "en el aumento de la faena de novillitos en el 2006 de más de 1.2 millones de animales, comparada con la de 2005".

Por último, expone que "la transferencia del novillo pesado al liviano se manifiesta en los años siguientes, cuando se produce un faltante de 500 mil novillos pesados para exportación en el 2007, con una proyección de otros 500 mil en 2008, lo que se traduce en una reducción de un millón de novillos pesados de exportación, si comparamos con cifras del 2005".

El consumo interno

De acuerdo al informe de CRA, "se observa un aumento de la carne disponible para el consumo interno a expensas de un mayor número de animales para la faena".

Expone que "si el análisis se hace según la producción de carne disponible, se produce un punto de inflexión en el 2007 y en el 2008 se producirán 110 mil toneladas de carne menos, a pesar de una mayor cantidad de animales faenados".

Expone que "esta nueva modalidad de engorde -de muy corto plazo, al depender de la zafra del ternero, desde marzo a junio de cada año- provoca la disponibilidad del animal terminado para el consumo interno en el segundo semestre del año. (A partir de los 90 días de marzo -cabeza del destete- hasta los últimos meses del año)". Añade que a menos terneros se obtienen menos kilogramos de carne.

Liquidación de vientres

El análisis de la evolución en la faena de vaquillonas y terneras durante los dos últimos años "no hace más que demostrar que la política del gobierno provoca un incremento en la faena de las categorías de hembras que podrían ser futuras madres", sostiene CRA. "Esta liquidación de las futuras madres no cubre la reposición de vientres, lo que implica la futura disminución de la oferta de carne, impidiendo mantener el actual nivel de consumo per cápita".

De la redacción de El Litoral