Deportes: DEPO-01
El empate sabalero no sirve de mucho
PUDO GANAR Y PUDO PERDER
No hubo caso. Tito Ramírez otra vez jugó un flojo partido, no la pudo embocar y recibió la quinta amarilla. El Rulo Romero se equivocó más de lo que acertó. Foto: Mercedes Pardo

Los aplausos del final retribuyeron la entrega de un Colón opaco futbolísticamente, que contó con situaciones para ganarle a Gimnasia y Esgrima La Plata, como también habrá que admitir que al partido lo pudo perder. El encuentro fue disputado pero plagado de errores por parte de los dos. El saldo lamentable se produjo al final, en la desconcentración de la gente, momento en el que se produjeron enfrentamientos entre hinchas y la policía, destrozos en negocios adyacentes al estadio y en coches particulares. El debut del Turco Mohamed -muy aplaudido por la gente- no fue el deseado. Ahora, Colón se prepara para jugar el sábado ante Independiente como visitante.

"Es sólo una cuestión de actitud...", canta Fito Páez cuando le piden que recuerde algún tema de "Abre". Bien pudo haber sido la música que les puso el "Turco" Mohamed a los jugadores en el vestuario, antes de Gimnasia. Porque, si algo cambió Colón en los pocos días que empezó a hablar "turco", es, justamente, su actitud. Y en esto mucho tiene que ver el curandero de turno porque, a esta altura, los hinchas sabaleros se ponen más en manos de la creencia popular que de la medicina. Es que, en realidad, hace rato que Colón está "empachado" y nadie da en la tecla. Aparecen los que recomiendan, clínicamente, dieta líquida. Del otro lado, está "la señora que causa dolor porque te tira el "cuerito' de la espalda" y "la más buena, que aparece con la cintita". Colón probó con todo y con todos. Con los médicos y los curanderos. Y sigue ahí, "empachado" de males, aunque raquítico de fútbol y pobre de promedio, anclado con sus tres cansadas carabelas en la zona de Promoción.

Si algo le faltaba al enfermo, para colmo, era que encima le armaran revuelo en la pieza de al lado. Es que, antes, los sanjuaninos se aprovecharon de Racing, ganaron y tiraron la frase más dolorosa de los últimos 13 años: "La c... de su madre, ganaron los sanjuaninos. Si llegamos a perder, quedamos en descenso directo con Olimpo".

Así, con la presión por las nubes, Colón salió a poner la cara con la mochila de cinco partidos sin ganar, dos derrotas seguidas en Santa Fe y una multitud al borde de dos ataques de nervios juntos. Sin embargo, más allá de un primer tiempo que dolió a la vista tanto como el promedio, Colón se la jugó para buscar los tres puntos en el complemento, despilfarró un par de goles, se le paró el corazón con un testazo de Escobar al caño de Blázquez y, por lo menos, no perdió. Es poco, para lo mucho que se necesita mejorar... Es muchísimo, para lo poco que pudo trabajar el nuevo cuerpo técnico de Mohamed.

Cuando Pezzota marcó el final, más allá de que el hincha siempre quiere ganar y sólo quiere ganar, salieron aplausos que estaban guardados en una caja de ahorro. Es que, si es por correr, Colón anoche habría sido campeón del mundo. Debe ser cierto lo que dicen los jugadores... esa historia de que ellos siempre ponen. Tienen todo el derecho de gritarlo a los cuatro vientos. El mismo derecho que tiene uno para decirles que, en eso de poner, anoche se notó más que nunca de la cancha hacia afuera y por eso Colón se fue aplaudido.

El "inflador" de Mohamed

Colón, como si fuera Boca en La Bombonera buscando ganar un partido para salir campeón, terminó jugando a puro riesgo. Se la jugó Mohamed: Colón quedó con tres defensores atrás y tres delanteros arriba. Le salió bastante bien porque, más allá del cabezazo de Escobar en el metal bajo y la tapada de Blázquez a Alonso, el equipo rojinegro no sufrió atrás como lo venía haciendo. Y, si no lo ganó, fue porque el venezolano no ajustó la mira, el caño le dijo no a Gandín y porque al "Cari-gol" todavía le falta. En realidad, a Carignano le falta mucho para llegar a lo ideal, pero muy poco para estar en igualdad de condiciones con respecto a otros para pelear el puesto. Si Colón lo hubiera ganado, ningún "tripero" habría hablado de injusticia. Pero, como pasa siempre cuando vienen las malas, además de todas las cosas importantes que le faltan al equipo, tampoco tiene suerte como para ligar algo de arriba.

Tampoco le salió mal al "Turco" la posición inédita de Chitzzof, que siempre jugó de lateral, como doble cinco. Porque el ex Tiro Federal, que anduvo boleado el primer tiempo, se paró mejor en el complemento y hasta se animó a atacar. Ahora, de cara a Independiente, Mohamed podrá contar para el mediocampo con jugadores como Falcón y Encina. Y hasta analizar la posibilidad de poner al "Pirulo" Rivarola como lateral volante por izquierda, en una posición que el ex Central conoce y no le debe resultar extraña. Particularmente, más allá de que al equipo lo arma Mohamed, me parece que dos de estos tres deberían ser titulares seguros. Esos volantes podrán darle, en condiciones normales, mejor manejo y tenencia de la bola que anoche. Y poder sacarlo al "Rengo" Díaz de esas lagunas solitarias en las cuales queda extraviado el poco fútbol del equipo.

Actitud primero, defensa después

Si es cierto que los planteles se arman de atrás hacia adelante, se podría decir que los equipos en crisis se reconstruyen desde atrás hacia atrás. Por eso, todas las miradas bajaban desconfiadas hasta la línea de tres del "Turco" y recordaban la experiencia nefasta de la misma línea contra Tigre, cuando estaba Astrada, también de local. A la luz de lo que se vio anoche, hay que decir que la línea de tres funcionó a la perfección, con un rendimiento inversamente proporcional al escaso tiempo de trabajo que tuvo Mohamed: llegó el lunes y jugó el viernes. Es que Garcé aplicó el manual del líbero, el paraguayo Aguilar podaba todo lo que pasaba cerca -pelota o rival, daba lo mismo- y Goux emocionaba a todos con el mejor partido de la temporada.

Se podrá decir que enfrente atacaba Gimnasia, que hace 11 fechas no gana fuera de la Plata, que sus números son tan flojitos como los de Colón, que esto y que lo otro. Y puede haber parte de razón. Pero también es cierto que, como estaba Colón antes, cualquier equipo le hacía un gol y anoche Blázquez no fue a buscar adentro como otras tantas veces.

A todas luces, lo otro más importante que dejó el 0-0, que marketineramente no vende nada hacia afuera, es que Colón, además de haber modificado su postura anímica para pelear cada pelota, pudo cerrar su arco. Y, de paso, que ese objetivo se haya conseguido con la línea de tres que planteó el "Turco" Mohamed, un entrenador que considera que ese jugador que le falta atrás debe sobrar en el medio para presionar y atacar. En definitiva, para arriesgar.

"Si no nos hacen goles, vamos a ganar, porque alguna vamos a embocar", había disparado el flamante DT, que anoche salió mejor empilchado que Simeone y fue ovacionado por todo el Cementerio de los Elefantes cuando llegó al banco de suplentes de Colón. Y acaso ahí, más allá de la evidente falta de fútbol en el medio y la ausencia de mecanismos de juego, estuvo la falla del plan "M": a Mohamed le faltó gol por las razones ya explicadas. Seguramente, él, que jugaba de "9" y la embocaba seguido, entenderá mejor que nadie de estas falencias en la "18" de enfrente.

Desabastecimiento de fútbol

Hace rato que a Colón le falta fútbol en las góndolas. Es más, le falta desde antes de los piquetes. Estoy seguro de que Mohamed priorizará, con sus convicciones, juntar en el mediocampo a jugadores de buen pie: Falcón, Encina y Rivarola -en ese orden- tienen posibilidades concretas de ganarse un lugar de cara a Independiente.

Aun en medio de esta crisis, Colón se animó a armar algunas poquitas jugadas que hace tiempo no se veían. Como cuando la tocaron varios, hubo un taco y Capurro reventó la base del caño. No se puede creer que, más allá de sus limitaciones, Colón siga teniendo jugadores en tan bajo nivel. Si la razón es la ansiedad o la falta de confianza, Mohamed puede tener la receta. Porque sólo Mohamed creía que Goux podía jugar bien en una línea de tres y Chitzzof no hacer papelones de doble cinco, donde nunca había estado.

Siempre partiendo de la base de que el "Turco" Mohamed es técnico y no mago. Por lo menos anoche, para frenar las derrotas y modificar la devaluada actitud, hubo mucho de Mohamed con su inflador anímico para el poco fútbol que tiene Colón.

COLÓN 0 - GIMNASIA (LP) 0

Colón: Sebastián Blázquez; Pablo Aguilar, Ariel Garcé, Marcelo Goux; Miguel Angel Sebastián Romero, Alejandro Capurro, Diego Chitzoff, Hugo Iriarte; Rodrigo Díaz; Darío Gandín y Rubén Darío Ramírez.

Director técnico: Antonio Mohamed.

Gimnasia de La Plata: Carlos Kletnicki; Cristian Piarrou, Jorge San Esteban, Renato Civelli, Federico Domínguez; Ignacio Piatti, Mauricio Yedro, Matías Escobar; Diego Villar; Juan Cuevas y Diego Alonso.

Director técnico: Guillermo Sanguinetti.

Goles: no hubo.

Cambios: en el segundo tiempo, a los 11, César González (C) por Iriarte; a los 19, Juan Neira (G) por Cuevas; a los 21, Martín Cardetti (C) por Díaz y César Carignano (C) por Ramírez; a los 38, Luis Quinteros (G) por Alonso; y a los 44, Roberto Salvatierra (G) por Villar.

Arbitro: Sergio Pezzotta.

Cancha: Colón.

Con Independiente

El próximo partido de Colón será el sábado que viene, a las 21.30, visitando a Independiente en la cancha de Racing. No podrá jugar Ramírez (5 amarillas), puede volver Rivarola y tanto Falcón como Encina estarán a disposición de Mohamed. Un dolor menos de cabeza: en Independiente, no jugaría "Totono" Grisales, que volvió del amistoso con Colombia acusando una lesión en el antepié derecho y quedó descartado para jugar mañana ante Huracán.

Darío Pignata