El plenario de secretarios generales de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales resolvió disponer un paro de actividades de 24 horas para el próximo jueves 24 de abril. La medida de fuerza tendrá como característica la realización de concentraciones en distintas rutas de la provincia.
Como se ha venido informando, desde hace varias semanas se suceden encuentros entre Festram y los representantes de los intendentes, en el marco de las negociaciones paritarias, pero hasta el momento las partes no han arribado a un acuerdo.
En caso de no obtener respuesta satisfactoria, el plan de lucha de Festram continuará con un paro de 48 horas durante los días 29 y 30 de este mes, con una concentración de todos los sindicatos del sector frente a la Municipalidad de Rosario. Asimismo, se profundizará la medida con un paro de 72 horas durante los días 6, 7 y 8 de mayo, con una movilización de todos los trabajadores municipales a Casa de Gobierno.
Según Festram, lo resuelto responde a la falta de acuerdo en el marco de la paritaria. Los 42 sindicatos reunidos en el plenario consideraron que ni los montos de incrementos ni las fechas de pago propuestas satisfacen el reclamo de los trabajadores, dejando al sector con una política salarial discriminatoria en relación con los empleados públicos nacionales y provinciales.
Postura del municipio
Desde el municipio local, el secretario de Gobierno e integrante de la comisión paritaria, José Corral, comentó que "los representantes de Municipios y Comunas solicitamos un cuarto intermedio. Ojalá que esta decisión de Festram de tomar medidas de fuerza recién el jueves de la próxima semana sea una apuesta a que en este tiempo pueda alcanzarse un acuerdo. Los representantes de los Municipios y Comunas hemos ratificado, una y otra vez, que el ámbito para alcanzar algún acuerdo es la paritaria. Esto requiere que las partes reconozcan las necesidades de las otras partes y que tengan posturas que no sean inflexibles".
Para el funcionario "el conflicto no le conviene a los vecinos porque son los principales afectados; no le conviene a los municipios porque se ven en la imposibilidad de prestar servicio y pierden legitimidad ante la población, y no le conviene tampoco a los trabajadores, porque debilita la jerarquía que tiene que tener el trabajo municipal y, eventualmente, están sometidos a la discusión sobre si se pagan o no los días de huelga".