Area Metropolitana: AREA-07
Los vecinos buscan progresar a través de la utilización y el reciclado de distintos materiales
El Arenal: un barrio de mentes creativas y manos habilidosas
A través de la organización social OSCNAI, vecinos de barrio El Arenal se sumaron a una serie de talleres que pretenden ser una fuente laboral para mejorar las condiciones de vida. Desde la entidad solicitan la ayuda del gobierno.

Mónica Ritacca[email protected]

Abrigados sacos de señoras convertidos en simpáticos perros de peluche, baldes de dulce de leche transformados en cestos de basura y latas de tomate hechas portalápices son algunas de las ideas que un grupo de hombres y mujeres tuvieron ante sus ganas de progresar. Es que, aseguran, es ello lo que activa la imaginación y permite hacer diseños exclusivos con materiales que muchas veces son tirados a la basura. "Acá reciclamos todo, porque todo nos sirve: desde botellas, que las usamos para hacer veladores, hasta carreteles de hilo, casi vacíos, para coser", manifestó Stella Maris Abraham.

Los ideólogos de estas originales creaciones forman parte de la Organización Social Centro Norte Argentina e Internacional (OSCNAI). Consultado al respecto, su presidente, Norberto Tagliabue, indicó que se trata de "una ONG que trabaja en varios lugares y que busca capacitar personas para que tengan una salida laboral aunque sea temporaria".

Artesanías en cerámica fría y yeso, reciclado de botellas, preparado de comidas, corte y confección, tejido y peluquería son algunos de los talleres y capacitaciones que tienen lugar en el barrio El Arenal de nuestra ciudad, a los cuales se sumó una gran cantidad de vecinos del barrio y de otros cercanos como San Lorenzo, Chalet y Santa Rosa de Lima. Según explicó el presidente de OSCNAI, se trata de "una prueba piloto que, de funcionar, será llevada a cabo en otros barrios periféricos.

"Todo lo que hacemos es a pulmón porque no recibimos ayuda ni del gobierno nacional ni provincial, sólo donaciones y materiales de la gente", refirió Norberto Tagliabue. Y agregó: "El principal objetivo que perseguimos, junto a la gente de la asociación civil El sueño de Gabi, que se sumó a nosotros y formamos una red, es sembrar una semilla en cada barrio para que la gente pueda salir adelante gracias a su trabajo".

Espacio para la contención

La casa de Marisa Medina, en realidad, un patio de pocas dimensiones que es reemplazado por una habitación menor cada vez que llueve, es el espacio físico donde más de 50 personas se reúnen en distintos días y horarios para utilizar como principal herramienta de trabajo sus manos. La vivienda está ubicada sobre pasaje Cervantes, en su intersección con la calle que lleva el mismo nombre.

"Las puertas de mi casa están abiertas a cualquier persona que esté dispuesta a salir adelante. No importa lo que sepa o no hacer, porque todo se aprende. Las nuevas ideas son bien recibidas también", dijo la mujer.

Respecto de cómo venden lo que hacen, Marisa contó que "aprovechan distintas ferias". Sobre cómo reparten las ganancias, explicó: "El que lo hace se lleva un porcentaje a su casa, pero deja una parte para la institución que se emplea en la reposición de materiales".

Gabriela Vega, de la asociación civil El sueño de Gabi que funciona en Santa Rosa de Lima, remarcó, por su parte, que el espacio formado en El Arenal es, a la vez, un lugar contenedor donde se hace un trabajo silencioso. "Hay una gran desatención por parte del gobierno hacia esta gente, que se debe revertir", consideró.

Uno de los proyectos que persiguen desde la red es formar una feria de emprendedores artesanos a fines de que en ella den a conocer sus creaciones y puedan venderlas. En breve, además, incorporarán un taller de panificación.

"Hay muchas ganas de trabajar y de hacer cosas, pero nos falta el respaldo del gobierno. La gente nos ayuda muchísimo con donaciones, pero no alcanzan porque el número de personas interesadas en capacitarse cada vez es mayor", dijo Stella Maris Abraham. Y ejemplificó: "En el taller de costura tenemos una sola máquina de coser, y es prestada".

Por último, los hombres y las mujeres que dialogaron con El Litoral se mostraron esperanzados en que el próximo encuentro sea desde la feria que pretenden montar para exponer y vender las producciones, ya que eso significará que la prueba piloto en El Arenal fue un éxito y podrá ser llevada a cabo en otros barrios. Para tal objetivo, consideraron fundamental la ayuda de las autoridades.

Para colaborar con donaciones de materiales, los interesados pueden comunicarse con Stella Maris Abraham al 458-5148 ó 155-412301.

Milagros e Ignacio, los más necesitados

Milagros tiene 25 años. Padece ceguera irreversible, desnucleación completa y osteogénesis imperfecta. Pero sus problemas de salud no son ningún impedimento para ayudar a hacer canelones en el taller de cocina. Consultada, refirió a El Litoral que le gusta mucho cantar y escribir poemas.

Esta joven es muy querida en el barrio. Por ello, y pese a todas las necesidades que abundan en el lugar, los vecinos remarcaron la necesidad de que sea ayudada. "Milagros vive con su mamá y seis hermanos. Lo que más necesita es una habitación para tener una mejor calidad de vida. Nosotros ya le conseguimos los albañiles... pero están faltando los materiales", dijeron. Y agregaron: "También necesita una alimentación adecuada".

Halagada por su capacidad de escribir poemas, Milagros compartió uno de su autoría con El Litoral. Lo repitió de memoria y sin titubear y contó que fue publicado en su libro "El milagro de Milagros": "Amistad es un rayo de sol, una luz de esperanza que se enciende y no se apaga jamás. Es una estrella fugaz que alumbra tu camino al andar. Es una mano de amor que sin nada a cambio te da su calor. Amistad es un mensaje de Dios. Confía siempre en ti mismo y valora tu amistad. Así llegarás a tener muchos amigos más".

Ignacio, por su parte, tiene dos meses. Es down y también necesita ayuda. "Ignacio lo que más precisa es ayuda en alimentos. Le han prometido tantas cosas...".

Por último, desde OSCNAI manifestaron que el 29 de mayo próximo habrá un festival a beneficio de Milagros e Ignacio en Gutiérrez y Avellaneda. Aunque el evento está en plena organización, anticiparon que la entrada serán víveres secos o ropa.