Educación: EDUC-01
Con sus alumnos salen a juntar basura para mantener el paisaje limpio
Una maestra de Tilcara llega con su historia a la CNN
 Niños de la Escuela 7 de Tilcara, incentivados por la maestra Carmen, recogen basura -en bolsas que cuelgan a llamas- para mantener intacto el impresionante paisaje jujeño. Foto: Télam

Carmen Salva fue rescatada por la famosa señal televisiva para proyectar su trabajo tesonero en el marco de la campaña Héroes, que se propuso identificar alrededor del mundo a aquellas personas desconocidas que llevan adelante acciones extraordinarias.

Télam

Una maestra de la localidad jujeña de Tilcara, que desde hace diez años moviliza a niños y adolescentes en torno al cuidado del medio ambiente, es la protagonista de un programa que muestra héroes anónimos de todo el mundo que se difunde por la CNN y que se verá hoy en la señal en español.

Carmen Salva tiene 49 años, trabaja como maestra de sexto grado en la Escuela 7 Domingo Faustino Sarmiento, de Tilcara, y desde hace diez años sale junto a un grupo de alumnos y padres a juntar la basura dispersa por el pueblo para reciclarla.

A esas salidas, que se hacen los fines de semana, van entre 60 y 100 niños, adolescentes y adultos que se suman a la iniciativa. En Tilcara son famosas y se las conoce como "limpiezas rastrillo".

El grupo que lidera Carmen se llama Esperanza de Vida y tras la recolección, se encarga de clasificar la basura y enviarla a una planta de reciclado.

"El grupo nació en 1997, gracias a mis chicos de cuarto y quinto grado, los que me abrieron los ojos a la necesidad de cuidar la naturaleza, de pasar de las palabras a los hechos y de comprometernos de verdad con la vida", dijo la docente, asombrada por la repercusión que adquirió su tarea.

Según Carmen, "todo comenzó a partir de un concurso, en el que, para ganar una computadora, debíamos juntar botellas de plástico y latitas de cerveza. ¿Cómo vamos a hacer para sólo juntar las botellas?", le plantearon los chicos, al ver la cantidad de basura que quedaba tirada.

"A partir ese momento sentí que el pedido de los niños era más que razonable porque, después de asesorarme, descubrí que lo que llamamos basura se puede convertir en un verdadero recurso sustentable", argumentó.

Esperanza de Vida tiene unos 80 integrantes que se van renovando cada año con las nuevas camadas de niños pero cuenta también con algunos de los precursores de la idea, que hoy ya son adultos y siguen aportando.

"Pasamos por los comercios y retiramos los residuos, los clasificamos y luego vendemos el plástico de alta y baja densidad, el vidrio, el cartón, diarios y las latitas de aluminio", explicó.

Además, la docente señaló que Esperanza de Vida se ocupa de la forestación de las zonas más dañadas que "no pudieron escapar a la desmedida ambición de los hombres que buscan mejor rentabilidad y destruyen bosques, por ejemplo, para darle lugar a la soja".

Transgresora

Para Carmen Salva que su historia sea transmitida hoy, a las 20, por la CNN, una de las cadenas de noticias de mayor cobertura, es una gran alegría, aunque sobre esto también tiene algo para decir: "Nadie es profeta en su tierra", dando cuenta de que todo este tiempo hizo un trabajo silencioso que no salió de su geografía.

El programa de la CNN forma parte de la campaña Héroes, que se propuso identificar alrededor del mundo a aquellas personas desconocidas que llevan adelante acciones extraordinarias, para lo que se realizó una convocatoria a través de la cual recibió más de 7.000 nominaciones on line desde 93 países diferentes.

Con un sueldo de bolsillo de $1.200 pesos, al que llega gracias a sus 20 años de antigüedad en la docencia, Carmen cuenta que viajó con sus alumnos hace un tiempo a Villazón, localidad boliviana ubicada en la frontera con Jujuy para llevar 700 árboles, con el objetivo de aportar especies para forestar esa zona.

"El Ministerio de Educación no me permitía cruzar la frontera como docente a cargo de alumnos. Cuando se enteraron ya habíamos vuelto. Organizamos el viaje con los padres, con quienes viajé como una más, pero la actividad se hizo", contó la maestra, que desafió las normas.

Salva no espera a que le den permiso. "Si es necesario, seré más transgresora que Moria Casán. Pero no voy a dejar de hacer las cosas que considero imprescindibles, como cuidar el medio ambiente".