-¿Cuál fue la idea de los cambios?-Yo sentía que nos sobraba un hombre atrás y quise ponerlo a Lucas Acosta en el mediocampo para que el equipo tuviera más juego y no cayera en tirar pelotazos ni en que River nos contragolpeara, porque en el primer tiempo hubo algún indicios de contra por parte de ellos. Entonces, buscamos asociarnos, pero no lo conseguimos. Y, justamente en un contraataque, que salió de un lateral que era para nosotros, nos metieron el primero; y después, el segundo vino de una falta a Reynoso. Pero, igualmente, son incidencias que no nos favorecieron. Esto sigue y termina dentro de 21 días. Lo vengo diciendo inclusive cuando ganamos, que esto va hasta el final. Tenemos que levantar en lo anímico a los jugadores y prepararnos para jugar lo mejor posible el próximo cotejo. -¿Te parece que la creación fue lo más flojo de Colón?-Puede ser, pero creo que al encuentro lo perdimos en las áreas. De las que tuvimos, que fueron cuatro o cinco, metimos una sola, mientras que ellos llegaron dos y las metieron a ambas. Entonces, por ahí pasó la diferencia del partido. Después podemos revisar la gestación, aunque ellos tampoco generaron mucho. Pero repito: once contra once, fuimos un equipo; y once contra diez, no le encontramos la vuelta al partido. Nos contragolpearon y convirtieron en las dos ocasiones que tuvieron. -¿Faltaron variantes, "Turco"?-No, pasa que el tema de los delanteros se dio así, porque Carignano está lesionado, Morales viene de una gripe, Cardetti está suspendido y sentía que Encina, Lucas Acosta o González me podían dar más que Enría, por eso no pusimos delanteros en el banco. Al hincha de Colón le digo que se quede tranquilo, que Colón se va quedar en Primera sin jugar la Promoción. -Dio la sensación de que River se llevó la victoria por los errores de Colón...-Con San Lorenzo, nos pasó lo mismo. Ellos tienen jugadores que, si les das una, no te perdonan. Aparte, Ortega salió iluminado en el segundo tiempo, hizo una jugada y cambió el partido. Nosotros no tuvimos las ideas para tratar de vulnerar la última línea de River. Se agruparon atrás, trataron de defenderse y les salió bien. Esto es fútbol y, como siempre digo, un gol puede cambiar todo. No pudimos meter las dos de Gandín en el primer tiempo y River convirtió las dos que generó. Ya está, tenemos que mirar para adelante.

-En un momento, lo llamaste a Chitzoff, pero finalmente ingresó Encina. Y las posiciones variaron mucho en el fondo; además, se produjo la lesión de . ¿Qué intentaste con esos cambios y qué estructura táctica buscaste para el segundo tiempo?

-La idea era jugar con Rivarola de lateral izquierdo y, primero, Píccoli de lateral derecho, con Garcé y Reynoso de centrales. Al hacer el otro cambio, ya lo dejé arriba a Encina, medio suelto, porque River tenía siete u ocho tipos detrás de la mitad de la cancha. Entonces, Garcé y Reynoso quedaron mano a mano en el fondo, pero no hubo problemas, a excepción del segundo gol, que fue una clara falta al lado de la línea. Nosotros teníamos la obligación de salir a buscar el partido, pero nuestro problema mayor fue el manejo de la pelota y sacarnos un hombre de encima; ahí nos faltó.