En el norte santafesino, la gente tenía cada vez más problemas para recibir agua potable. Las lloviznas del martes y miércoles complicaron el tránsito de los camiones cisterna hacia Intiyaco, Golondrina y Cañada Ombú, entre otras localidades.
El problema era que no se trataba de lluvias suficientes para llenar los aljibes y reservas de agua, pero sí para volver intransitable la ruta 3, que es de tierra a partir de Garabato, y el resto de los caminos rurales.
Esta semana, dos ministros del gabinete de Hermes Binner estuvieron recorriendo las zonas más afectadas. El martes, Antonio Ciancio, ministro de Aguas y Servicios Públicos, viajó a distintas localidades del departamento Vera y se reunió con autoridades políticas y entidades que agrupan a los productores.
Ciancio dijo que se instrumentaron centros operativos para hacer más eficiente el tránsito de los camiones cisterna que llevan agua potable para el consumo de la gente y de los animales. "Vinimos al norte para garantizar que el agua que nosotros enviamos y pagamos llegue al destinatario final porque en algunas localidades el agua llega y por alguna razón la gente no la recibe", denunció el ministró.
De todas formas, Ciancio reconoció que estas son medidas paliativas y que la solución de fondo sólo llegará cuando se construyan los acueductos. Los productores además reclamaron planes integrales para el desarrollo sustentable de los bajos y de la cuña boscosa.
El ministro de la Producción, Juan José Bertero, inició el miércoles una recorrida por las regiones más afectadas del norte santafesino. Además, le solicitó a Javier de Urquiza, secretario de Agricultura del Estado nacional, que se convoque la Comisión Nacional de Emergencia Agropecuaria para poder implementar sistemas más eficaces de asistencia a los productores.