Hubo buenos precios que dejaron satisfechos a compradores y vendedores. La subasta fue el eje sobresaliente del remate, que estuvo a cargo del martillero Miguel Romano, de la Cooperativa Guillermo Lehmann. Previamente, se entregaron distinciones a los mejores lotes de terneros presentados en el festival.
De la Redacción de El Litoral
Todavía quedan los ecos del especial fin de semana que vivió el noroeste santafesino con la realización del Festival Provincial del Ternero, que anualmente organiza el Club Sportivo de Villa Minetti.
Todo se inició en la mañana del viernes pasado, con el auspicio del Ministerio de la Producción, en el auditorio de la escuela agrotécnica Nº 300, donde se realizó una conferencia-taller que estuvo a cargo de Carlos Scabuzzo, funcionario de la cartera mencionada, quien estuvo acompañado por Eduardo Burba, periodista agropecuario.
Posteriormente, en el predio del festival se llevó a cabo el almuerzo de expositores, del que también participaron autoridades provinciales, regionales y locales. Luego, se desarrolló el acto oficial inaugural, que contó con la presencia del secretario de Agricultura de la provincia, CPN Carlos Sartor; el senador provincial, Ing. Hugo Terré, presidentes comunales, y representantes de entidades intermedias.
A su turno, en sendos discursos, tanto Sartor como Terré fueron contundentes al manifestar los inconvenientes que planteó al sector la confrontación con el gobierno nacional, conflicto que felizmente se destrabó con el rechazo en el Senado del proyecto oficial.
El baile de la juventud cerró la primera jornada y, el sábado por la mañana, casi dos centenares de jinetes desfilaron por las calles del pueblo y culminaron su recorrido en el predio del festival, donde se brindó un espectáculo de destrezas criollas.
Por la noche, el festival folclórico reunió a un numeroso y entusiasta público que, hasta la madrugada del domingo, aplaudió a los grupos y solistas que ocuparon el escenario. La excelente participación de la escuela de danzas Juana Azurduy no sólo fue ovacionada por la gente de pie, sino que también se llevó los mejores elogios.
El domingo, la jerarquía característica de la jineteada logró reunir alrededor de 5 mil personas, que disfrutaron de un gran espectáculo, donde tropillas, jinetes, animadores y payadores habitualmente protagonistas del festival de Jesús María le dieron a la fiesta un brillo muy especial.