Escenarios & Sociedad: SOCI-05
IV ARGENTINO DE LITERATURA
"Poner el talento al servicio del mercado no es inocente"
La voz del prestigioso autor de libros para chicos Istvansch fue una de las más críticas de la mesa sobre Literatura infantil, en las que también expusieron Pablo de Santis, Isol y Cristian Turdera.

La cita fue en el Foro Cultural Universitario, donde durante tres días tuvo lugar el IV Argentino de Literatura, organizado por la UNL. Gran parte de las disertaciones de los expositores estuvieron basadas en el concepto de "libros-álbum": una propuesta en la que texto e imagen funcionan de modo inseparable, para construir una historia y en la que, a la vez, la imagen no necesariamente tiene que ver con lo que dice el texto.

"El libro-álbum es un género que dio forma a una nueva disciplina dentro de la literatura", consideró Cristian Turdera.

El ilustrador se propuso pensar respecto de la imagen de lector que el autor construye en su mente a la hora de producir. "Cuando creo imágenes para un libro, el niño que aparece es el que yo tengo en mi imaginario. Entonces, el destinatario será quizá la persona que más se asemeje a ése que traigo conmigo. Ésa es una grata coincidencia, que a veces se produce", explicó.

El ilustrador apostó a "dejar de pensar en términos de entendimiento y pensar más en términos de sensaciones". "Creo que a los lectores hay que darles elementos para generar dudas, reflexiones, conflictos, miedos. A veces se potencian características como si fueran negativas ("esto los va a asustar"): yo creo que no hay por qué tapar esas reacciones tan humanas. En todo caso, apelo a las posibles relecturas que pueda tener ese texto, en las que seguramente el miedo va a dar paso a otras sensaciones".

Adivinador adivina

Pablo De Santis hizo su recorte y optó por hablar sobre "Literatura y adivinación".

"Algunos escritores han jugado con las posibilidades adivinatorias que tiene la novela, como "El hombre del castillo', de Philip Dick; y "El castillo de los destinos cruzados', de Italo Calvino. Philip Dick escribió su novela en un momento en que estaba fascinado con el I Ching, el oráculo chino, y no hacía nada sin consultar sus páginas. Mientras escribía la obra, tiraba las monedas ante cada paso que debía dar cada personaje. Y Calvino escribió imaginando que un grupo de sobrevivientes queda mudo después de pasar por algún peligro, y debe continuar la historia a través de un mazo de cartas. Así los personajes ponen las cartas sobre la mesa y el narrador va interpretando lo que le ha pasado a cada uno", explicó.

"Éste es, en esencia, el juego de la literatura: no hay nada, por lejano que sea, que nos resulte suficientemente ajeno si el texto nos interesa. Los grandes libros siempre parecen haber adivinado nuestros pensamientos secretos. Eso hace, por un lado, más intenso nuestro vínculo con el texto; pero por otro, nos distrae; y en esa compleja relación entre lo personal y la distracción, está el encanto de la lectura

"La lectura es siempre una experiencia, y una de las más extrañas de todas: la experiencia de lo que no se ha vivido", definió.

En su laberinto

Tercera en la sucesión de ponencias, Isol hizo hincapié en "la importancia de incluir a ilustradores en un Argentino de Literatura. Nos asumimos como autores de un texto y generadores de sentido a través de este trabajo", fundamentó.

"El ilustrador debe tener opinión. La posición que uno toma frente a un proyecto, es lo que marca la diferencia", sostuvo.

También puso el lente sobre la figura de los editores, quienes "hace unos años, gracias al trabajo del Foro de Ilustradores, empezaron a valorar nuestro trabajo y a darnos más libertad".

La creadora desmenuzó, power point mediante, el proceso de elaboración de un libro-álbum, desde la concepción de la idea hasta el proyecto finalizado, en un pormenorizado detalle que no omitió el tránsito por los diversos laberintos que surgen a la hora de crear y tomar decisiones.

Papelitos de colores

La última disertación fue la de Istvansch, autodefinido como "el apocalíptico de la mesa". Editores, ilustradores, escritores y críticos fueron duramente cuestionados por el autor, bajo el título: "Libros-álbum y papelitos de colores: una advertencia sobre la banalización del género".

Istvansch sostuvo que uno de los principales problemas que afronta el género es que "la ausencia de crítica en los medios no ayuda a contrarrestar la aparición de papelitos de colores que se presentan bajo el rótulo de libros-álbum".

"La crítica de libros infantiles nunca se ha comprometido: sólo se publica lo bueno. Creo que hay una gran escasez de voces valientes; como si, por otra parte, fuera necesaria una gran valentía para afrontar la voz enojada de algún autor ofendido", apuntó.

Por otra parte, observó la actitud de los autores, "que no aceptan reseñas desaprobatorias aunque estén perfectamente fundamentadas".

"La del libro-álbum fue una apuesta valiente. Ahora, con el género ya instalado, las grandes editoriales publican "lo-que-sea-pero-que-parezca-álbum'", subrayó.

"Entonces, lo interesante es meterse en las grietas que el mercado deja. El autor es quien marca el camino, no los gerentes de marketing. Y hay que tener en claro que poner el talento al servicio del mercado, no es una actitud inocente".

Perfiles

Istvansch. Nació en San Jorge en 1968. Es ilustrador, diseñador y escritor. Publicó más de 50 libros en Argentina, México, Francia y España. Recibió distinciones en nuestro país, Colombia y Francia, y fue candidato por Argentina al premio Hans Christian Andersen, en dos oportunidades.

Actualmente es director de la colección Libros-álbum del Eclipse de Ediciones del Eclipse. Es fundador y miembro del Foro de Ilustradores Argentinos. Algunos de sus libros (como autor integral): Ideas claras de Julito enamorado, Leyenda ugandesa, Federica aburrida, Quiero ganar este concurso, Historia para leer después de jugar todo el día, Zoológico, Trabajo de autor, Refrains sans freins y El hombre más peludo del mundo.

Isol. Nació en 1972 en Buenos Aires. Trabaja como ilustradora para prensa y autora de libros-álbum para niños.Su primer libro (Vida de perros) fue publicado en 1997, tras recibir una Mención de Honor en un concurso organizado por el Fondo de Cultura Económica de México. A partir de allí, continuó publicando libros en el país y el exterior, como autora integral, a la vez que ilustró textos de escritores como Jorge Luján y Paul Auster.Entre las distinciones recibidas, se destaca una Mención Especial en el Premio Hans Christian Andersen 2006. Pablo De Santis. Nació en Buenos Aires en 1963. Su primera novela, El palacio de la noche, apareció en 1987. Luego publicó Desde el ojo del pez, La sombra del dinosaurio, Pesadilla para hackers, La traducción, Filosofía y Letras y El teatro de la memoria, entre otros libros, en su mayoría destinados a adolescentes.Fue jefe de redacción de la revista Fierro. Dirige las colecciones La movida y Obsesiones, destinadas a lectores adolescentes, y Enedé, que reúne los clásicos de la historieta argentina. El año pasado ganó el primer premio de Narrativa Iberoamericana en el prestigioso certamen Planeta Casa de América, por su novela El enigma de París.Cristian Turdera. Nació en Buenos en 1973. Es ilustrador y diseñador gráfico, ilustra libros y publica en diferentes medios periodísticos de Argentina y el exterior. Además, dicta talleres de ilustración y es Jefe de Arte del sello Pequeño Editor.Algunos libros publicados: Un día animal; Reina Mab, el Hada de las pesadillas; Pototo, tres veces monstruo; Cuando llega la noche; El tordo músico y otros cuentos; Médico a palos; Pájaro de nueve colores; Canción decidida; Su primera zanahoria; Pulgarcita; Loro quiere hablar idiomas; ¿Quién me quita lo talado?; Las mil y una del garbanzo peligroso.Entre los premios recibidos, fue seleccionado para representar a Argentina en la muestra Bologna 2008; y distinguido en exposiciones realizadas en Italia, Bolivia y Brasil.

Natalia Pandolfo