La nueva edición presenta novedades en su formato y contenidos.
Con un concierto del bandoneonista Leopoldo Federico en el teatro Avenida quedó inaugurado anoche el X Festival de Tango, que este año presenta novedades en su formato y contenidos a partir de la impronta de su nuevo director, el músico, compositor y productor Gustavo Mozzi.
"El Festival exigía un rediseño no sólo porque se cumplen 10 años desde su creación sino porque el tango mismo está viviendo un momento muy especial", contó a Télam Gustavo Mozzi, días antes del inicio del encuentro.
"Estamos en un momento en que conviven con naturalidad figuras históricas que participaron de las décadas de oro, gente que se formó en los 40 ó 50 y forjaron el sonido del tango con músicos de entre 20 y 40 años", remarcó el músico que fue productor artístico del disco y el filme "Café de los maestros".
El festival organizado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, comprenderá cerca de 100 conciertos con entrada libre y gratuita realizados en teatros y centros culturales y se continuará con el Campeonato Mundial de Baile de Tango, que se extenderá del 24 de agosto al 1º de setiembre.
Además de la apertura de Federico, en formatos de dúo, trío y orquesta, Rubén Juárez será el encargado de cerrar el encuentro musical en un concierto dedicado a Córdoba y que contará con la participación del cuartetero Carlos "la Mona" Jiménez.
Presencia de figuras
En la grilla del Festival, están previstas figuras como las de Juan José Mosalini y Juan Carlos Cáceres, que llegan de Europa; Jairo interpretando un repertorio de Ferrer y Piazzolla; el trío de Rodolfo Mederos, Pedro Chemes y Jana Purita; los uruguayos Pinocho Routín y Nciolas Ibarburu, realizando un homenaje a Alberto Mastra, y Nicolás Ledesma con su orquesta, entre otras.
Por un lado, se presentará una recreación de la Orquesta Típica Candombe que tuvo Sebastián Piana entre 1938 y 1942 y que contaba con una cuerda de candombe, que con letras de Homero Manzi y Cátulo Castillo fue como una nueva mirada sobre la milonga.
"Esa asociación Piana-Manzi-Castillo con los tambores rediseñan la milonga que hasta entonces estaba más vinculada con lo payadoril en formato canción, además de proponer una temática negra, no siempre presente en el tango", remarcó Mozzi.
El mismo trabajo de reescritura, a partir de grabaciones se hizo con el Aníbal Troilo de 1938 a 1941, cuyas partituras no existían y que proponen un Troilo muy distinto en su sonoridad y su rítmica al posterior.
El tercer trabajo en este sentido fue con obras que Astor Piazzolla escribió entre 1955 y 1957 para orquesta de cuerdas, recuperadas por Nicolás Guerschberg y que va a interpretar la Camerata Bariloche con Marcelo Nisinman en bandoneón.
También se realizó el programa "Quereme Así Piantao", a través del cual se estrenarán cinco tangos con letras de internos del Frente de Artistas del Hospital Borda.
Con epicentros en el teatro Avenida, el IFT, la Academia Nacional del Tango y el Torquato Tasso, el festival se extenderá también a centros culturales barriales, bares notables y el local de la antigua tienda Harrods, que funcionará en continuado desde el mediodía hasta entrada la noche, con conciertos, muestras y proyecciones.
De la redacción de El Litoral