Deportes: DEPO-29
La esperanza de recambio de los argentinos ya es una realidad
En la historia, para siempre
El tandilense Juan Martín Del Potro ganó ayer su cuarta final consecutiva en el circuito máximo del deporte blanco mundial y logró así insertarse eternamente en los anales, a fuerza de magníficos resultados. Llegará al US Open como el segundo más ganador en la temporada.

De la redacción de El Litoral

Como si fuera un deja vu tenístico, las fotos de todos los diarios del país vuelven a mostrar esa cara particular de Juan Martín Del Potro, el pibe nacido en la localidad de Tandil que muestra una mezcla de ingenuidad y serenidad impropia en personas que aún no han llegado a los 20 años de vida.

El pibe cuyo padre fue un jugador de rugby y su madre, profesora. El mismo que logró su primer título del ATP Tour el domingo 13 de julio en Stuttgart, luego de vencer en la final a un top 15 como el francés Richard Gasquet, y que poco más de un mes después levanta el trofeo máximo en Washington, como el cuarto consecutivo y en diferentes superficies.

A esta altura, poco importan los nombres que se crucen, pero por una cuestión informativa es dable destacar que ayer derrotó al serbio Viktor Troicki (en su primera final en el circuito) por 6-3 y 6-3. Tampoco adquiere demasiada trascendencia admitir que "Juanma" (como le dicen sus familiares) no jugó bien. Y es porque se metió definitivamente en la historia grande del tenis argentino, con un coletazo a nivel mundial.

Entre los grandes

La victoria que obtuvo Del Potro ayer lo terminó de posicionar con los más altos exponentes argentinos de este deporte. Con su impresionante racha de 19 victorias consecutivas, que le reportaron los 4 títulos en fila, se colocó tercero entre los tenistas albicelestes que lograron rachas tremendamente positivas a nivel mundial.

En primer lugar se encuentra el enorme Guillermo Vilas, que reúne 46 triunfos ininterrumpidos en 1977, un récord mundial que aún no ha podido ser quebrado, ni siquiera por los grandes del momento, Rafa Nadal y Roger Federer. En ese lapso, "Willy" se adjudicó 7 trofeos. Sin embargo, igualó la primera gran racha de Vilas, lograda entre noviembre de 1974 y mayo del año siguiente.

Detrás de él, y por delante del "Enano" tandilense, se ubica José Luis Clerc, que en 1981 logró 28 festejos al hilo, con 4 consagraciones. Asimismo, Delpo dejó atrás a Guillermo Coria, otro grande de nuestro tenis, que en 2003 logró 15 gritos sin interrupciones con 3 copas como recompensa. Además, Juan Martín quedó ubicado desde hoy en el puesto 17, el mejor de su corta pero prolífica carrera.

Feliz

"Estoy feliz, muy contento por ganar otro torneo más, por ganar otra final más y por seguir con esta racha de partidos que me vienen bárbaro para llegar de la mejor manera al US Open", lanzó como primera impresión el juvenil argentino. Al ser consultado por su estado de ánimo en el partido, Del Potro reconoció sentirse "nervioso y cansado, porque hacía mucho calor". Además reconoció que "no jugué muy bien pero volví a ganar". Por último destacó que, a pesar de tener una molestia en uno de sus pies, la opción es participar en todos los certámenes posibles. "Quiero jugar todos los torneos que pueda. Me siento con mucha confianza", advirtió.

En relación con el partido, reconoció que "es difícil jugar contra rivales que llaman al fisioterapeuta y después sacan a 200 kilómetros por hora y corren para todos lados", evaluó el flamante campeón, que ostenta la segunda mejor racha consecutiva de triunfos en la temporada, detrás del nuevo número uno del mundo, el español Rafael Nadal (suma 32).

"En las finales el que juega con inteligencia gana. Hoy (por ayer) jugué más con la cabeza que con mi tenis. Me concentré para seguir haciendo lo mismo que me llevó a estar en este presente. Igualmente debo admitir que nunca imaginé este momento; mis expectativas pasaban por hacer buenos torneos", concluyó con increíble humildad quien ya se ganó, y para siempre, un lugar privilegiado en la rica historia de nuestro tenis.

Rafael Nadal es el nuevo número 1 del mundo

El tenista español Rafael Nadal se convirtió hoy en el número 1 del mundo, despojando de ese sitio de privilegio al suizo Roger Federer, en un hecho histórico luego de que el helvético dominara el circuito internacional del deporte blanco por 4 años y medio.Y Nadal lo consigue en su mejor momento y con todos los merecimientos posibles.

En lo que va de la temporada 2008, Rafa obtuvo 8 títulos de los cuales dos fueron de Grand Slam (Roland Garros y Wimbledon, algo que no se lograba desde la época de Bjorn Borg) y en ambos derrotó en la final a Roger Federer. Para completar la faena, se quedó con la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Beijing. Es, lejos, el que más copas ganó, seguido por Juan Martín Del Potro, con 4. Además, es el más ganador del año con un récord inigualable de 70-8.

Ahora, el zurdo manacorense viajará a los Estados Unidos para defender su flamante posición en el escalafón en el US Open, el cuarto y último certamen del Grand Slam 2008, en el cual Federer defenderá el título logrado el año pasado.

Todo el mundo del tenis se rinde ante Rafa. Cada declaración de cualquiera de sus colegas incluye la palabra merecido (o algún derivado de la familia), aún la de Federer, que dijo estar tranquilo porque la cima del deporte blanco mundial está ahora en manos de quien mejor juega en la actualidad. Y no hay dudas, Rafa lo merecía.