Dirigentes kirchneristas le espetaron que su regreso a la UCR "complicaría la relación" con la presidenta y que tiene "un compromiso político" con ella. El vicepresidente les restregó que "conozco mi responsabilidad", pero que "nunca me fui del radicalismo". Preparan una reunión con López Murphy y hablan de un frente anti K.
El vicepresidente Julio Cobos tuvo que salir al cruce de los cuestionamientos del sector kirchnerista, que advirtieron que el radical "complicaría mucho más la relación" con la presidenta Cristina Fernández si vuelve a la UCR con un tono "opositor", porque sería una "contradicción".
"No voy a ocupar ningún cargo partidario, ni seré candidato a nada en el 2009. Voy a respetar el mandato popular, no tengo derecho a otra cosa", afirmó Cobos en un comunicado, "ante versiones periodísticas respecto de una posible postulación" el año próximo.
En medio de las fuertes gestiones en la UCR para que el vicepresidente retorne al radicalismo, el titular previsional del Senado, José Pampuro, aseguró que "hay una contradicción" porque la UCR "busca ser un partido opositor" y esa situación "complicaría mucho más la relación" con la presidenta Fernández, afectada desde el rechazo al proyecto oficial para impulsar las retenciones.
Asimismo, Pampuro le recordó a Cobos que "tiene un compromiso político" desde que fue votado y con ironía señaló que en los últimos tiempos el despacho del vicepresidente fue "un desfile de dirigentes del radicalismo".
Por su parte, el jefe de Gabinete, Sergio Massa, sostuvo que Cobos tiene una "responsabilidad institucional" como vicepresidente de la Nación y que sabe lo que hace si se reúne con referentes de la UCR. "Todos somos grandes y sabemos lo que hacemos", espetó.
A su vez, el diputado Carlos Kunkel -habitual fuerza de choque verbal del kirchnerismo- deslizó que "la vuelta al redil significa prácticas que se creían superadas. Como peronista digo que a Cobos los radicales lo buscan ahora para reivindicarlo cuando está gozando de 15 minutos de gloria".
"Nunca me fui de la UCR"
La estocada oficialista obligó a Cobos a responder. En su comunicado, el vicepresidente aludió directamente a "las críticas" y en ese sentido respondió: "Conozco claramente mi rol y mi responsabilidad, mi esfuerzo está en aportar lo mejor de mi trabajo y de mis ideas a esta gestión".
"He manifestado siempre mi compromiso con el gobierno que integro como vicepresidente hasta el 2011", precisó. Y con respecto a los cuestionamientos por su doble condición de radical y funcionario, el presidente del Senado respondió que cuando se le ofreció la candidatura "no se me puso como requisito que renunciara al partido, con el cual tengo sentido de pertenencia para acompañar a la doctora Cristina Fernández en la fórmula presidencial. Yo era afiliado de la UCR cuando me ofrecieron integrar la fórmula".
Asimismo, Cobos reiteró que no quiere "ser un obstáculo para la unidad partidaria de la UCR, ni de ningún otro partido" y agregó que "las autoridades nacionales del radicalismo están reconsiderando las sanciones disciplinarias impuestas. Ahora, esa reconsideración es una medida que no depende de mí: nunca me fui del radicalismo, no renuncié, ni pedí la desafiliación; es más, apelé cada una de esas medidas. Mi pertenencia partidaria nunca estuvo en discusión", aseveró.
Nuevo ciclo
Tras la reunión del domingo con Raúl Alfonsín, en la que acordaron "trabajar juntos por la unidad del partido", dirigentes radicales como Leopoldo Moreau salieron a hablar de crear "el partido de la cordura" que enfrente al kirchnerismo en 2009, a partir de "la suma de la UCR, el capital político de Julio Cobos y un acuerdo con (el gobernador de Santa Fe) Hermes Binner".
"Creo que las elecciones de 2009 son la antesala de 2011, donde la gente ya va a votar una alternativa a un gobierno, el de los Kirchner, que parece haber terminado un ciclo", afirmó Moreau.
En tanto, el dirigente Ricardo López Murphy -cuyos colaboradores y los de Julio Cobos preparaban una reunión entre ambos "para acercar posiciones"- consideró hoy que debería formarse un "frente cívico, al estilo del que se creó en Catamarca" donde converjan "todos los que no se identifican con el oficialismo", que logre triunfar en las próximas elecciones legislativas.
Consideró que "detrás de los votos en Bariloche y en Santa Rosa", en alusión a los triunfos de la oposición en los comicios municipales de esas dos ciudades, "está esa demanda".
Tribuna
El vicepresidente de la Nación, Julio Cobos, recibió en ausencia una sonora ovación por parte unas 800 personas que se reunieron para celebrar el Día del Abogado, en tanto que la jefa del Estado, Cristina Fernández, cosechó algunos tibios aplausos que fueron opacados por un intenso abucheo. La escena, que puso incómodos a varios representantes del oficialismo que habían acudido a la cena, ocurrió el viernes pasado, en torno a la medianoche, en el Palais Rouge, un coqueto salón de Palermo en el que el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal organizó el festejo.