El Centro de Encuentro y Terapia para Personas con capacidades diferentes de San Carlos Centro (CET) cumplió diez años de vida y los celebró el pasado sábado con la realización de una cena de camaradería que tuvo como escenario a las instalaciones de la Sociedad Rural.
Más de 380 personas participaron en este festejo, ratificando con su presencia el reconocimiento que tiene el CET en el seno de la sociedad sancarlina, que desde un principio apoyó fuertemente todas las iniciativas generadas por los directivos de la entidad.
En una velada en la que se sucedieron distintos y emotivos momentos, los concurrentes del centro regocijaron a los comensales con una breve obra de teatro en clave de comedia. Luego, en otro tramo de la ceremonia, los padres de los concurrentes hicieron entrega de un presente por el cumpleaños de la institución. Consistió en un reloj, que en cierta medida evoca las largas horas de esfuerzo de mucha gente para que el CET tenga hoy significativas proyecciones de crecimiento, que se plasman en nuevas e importantes obras.
Tras la cena, todos los presentes levantaron sus copas y brindaron junto a directivos, concurrentes, y profesionales del CET, con los mejores augurios para el futuro de una institución que orienta sus esfuerzos a trabajar por la integración, con resultados satisfactorios.
Durante la cena fueron presentadas varias obras alusivas a este aniversario creadas por artistas plásticas sancarlinas. Las mismas, que ya fueron expuestas en el Centro de Exposición de Productos Sancarlinos, fueron donadas durante la cena a referentes de distintas entidades de la ciudad, con la finalidad de que sean expuestas en sus locales, para que pueda apreciarlas toda la comunidad.
Además de las autoridades y profesionales del CET, estuvieron presentes el intendente de San Carlos Centro, Omar Príncipe, el presidente comunal de San Carlos Norte, Miguel Gatti, concejales y representantes de entidades intermedias y fuerzas vivas de las tres poblaciones que integran la Colonia.
Objetivos
La labor del CET apunta a mejorar la calidad de vida de los concurrentes, y propender a su autonomía personal y a su integración dentro de la sociedad. Para esto, realiza distintas actividades que tienden a desarrollar sus potencialidades, orientando las prestaciones de acuerdo a sus necesidades, intereses y capacidades.
En definitiva, su rol consiste en proporcionar una alternativa acorde a las necesidades y potencialidades de cada persona, garantizando la igualdad de oportunidades laborares, terapéuticas y de participación social.