Economía: ECON-01
Dijo que el rechazo al plan no es "el fin de los esfuerzos"
Bush: "Estamos en emergencia"
El presidente volvió a hablar esta mañana, por cuarta vez en una semana. Dijo que si el Congreso no aprueba el paquete de rescate "las consecuencias serán cada día peores". El jueves volverá a tratarse el tema en la Cámara de Representantes.

El presidente estadounidense George W. Bush declaró este martes que el rechazo de la Cámara de Representantes al plan de rescate financiero no es "el fin" de los esfuerzos para la aprobación del proyecto, sin el cual las consecuencias "serán cada día peores".

"La realidad es que estamos en una situación de urgencia, y las consecuencias serán cada día peores si no tomamos medidas", advirtió el mandatario en una declaración pública en la Casa Blanca.

"Pero les prometo a los ciudadanos (estadounidenses) y a los ciudadanos del mundo que éste no es el fin del proceso legislativo", agregó.

"Mi administración seguirá trabajando estrechamente con los dirigentes de los dos partidos" en el Congreso, afirmó.

El plan de rescate de 700.000 millones de dólares fue rechazado el lunes por 228 votos contra 205 en la Cámara de Representantes. Unos dos tercios de los representantes republicanos votaron en contra.

Por su parte, el secretario del Tesoro norteamericano, Henry Paulson, advirtió a los legisladores que deben actuar rápidamente para impedir que el pánico siga afectando a los mercados.

"Debemos hacer algo. Esto es demasiado importante para dejar que fracase", dijo Paulson, arquitecto del audaz plan para absorber hasta 700.000 millones de dólares de deudas hipotecarias incobrables de los bancos, tras una ola de espectaculares colapsos bancarios desatados por la crisis "subprime".

Argumentos

Pese a que la estabilidad del sistema financiero mundial está en juego, la decisión de los representantes estadounidenses pareció guiarse por la cercanía de la elección presidencial para reflejar lo que piensan muchos contribuyentes: que el ciudadano de a pie no debe pagar por los errores de Wall Street.

A tan sólo cinco semanas de la elección del 4 de noviembre, "evidentemente algunos de estos tipos prefieren perder una economía que una elección", dijo el representante demócrata David Obey (Wisconsin), en referencia a sus colegas republicanos que se opusieron al rescate.

En Europa, en tanto, se temen nuevas víctimas en el sector bancario.

El banco Dexia debió ser rescatado el martes por Bélgica, Francia y Luxemburgo, al que le inyectarán 6.400 millones de euros (9.194 millones de dólares).

Bélgica, Holanda y Luxemburgo ya debieron salvar al gigantesco banco y asegurador Fortis el domingo, inyectándole 11.200 millones de euros. El banco británico Bradford & Bingley fue rescatado con una nacionalización parcial y una venta parcial al banco español Santander.

En Alemania, el gobierno garantizó un rescate del banco Hypo Real Estate a manos de un consorcio de bancos privados por 35.000 millones de euros, mientras Islandia asumió el control del Glitnir, el tercer banco del país.

Los rescates hundieron los títulos bancarios el lunes, incluidos los de Dexia, Commerzbank, ING y el Royal Bank of Scotland.

Los bancos centrales volvieron a inyectar enormes sumas de dinero para calmar la sed de liquidez.

El Banco Central Europeo (BCE) renovó sus créditos de 30.000 millones de dólares (20.800 millones de euros) a un día y el Banco de Japón inyectó tres billones de yenes (28.800 millones de dólares).

"Que EE.UU. asuma se responsabilidad"

La Comisión Europea mostró hoy su "decepción" por el rechazo parlamentario del plan de rescate diseñado por Washington para afrontar la crisis financiera y dejó en claro que Estados Unidos debe "asumir su responsabilidad".

El portavoz jefe del Ejecutivo comunitario, Johannes Leitenberger, hizo hincapié en que las turbulencias que atraviesan los mercados mundiales se originaron en EE.UU., por lo que este país tiene una "responsabilidad especial" en su resolución.

Bruselas confía en un rápido acuerdo, que permita comenzar a aplicar el plan de rescate, señaló Leitenberger, quien subrayó que de ello depende el destino no sólo de EE.UU. sino de todo el mundo.

El portavoz destacó que las autoridades europeas están asumiendo su responsabilidad, con acciones, en algunos casos concertadas, para apoyar al sector financiero y mostrando compromiso con la cooperación a nivel internacional.

Aludió, en ese contexto, a la operación de rescate anunciada esta mañana para asistir al banco franco-belga Dexia y a la decisión del gobierno irlandés de garantizar durante los dos próximos años todos los depósitos de los seis bancos del país.

También recordó que el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en su calidad de presidente de la UE, ha convocado un encuentro internacional en otoño, al que asistirán los líderes del G8 Älos siete países más industrializados y RusiaÄ y otros representantes internacionales para pactar una respuesta a la crisis financiera.

Además, para preparar esa cumbre, organizará en los próximos días en París una reunión con los países europeos representados en el G8 ÄAlemania, Francia, Italia y Reino UnidoÄ y los presidentes del BCE, Jean-Claude Trichet, la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y el Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.

"No hay voluntad alguna de restricción", precisó el portavoz, al ser preguntado por los invitados a ambas reuniones.

El objetivo es trabajar de manera conjunta y con eficacia, explicó Leitenberger, quien agregó que los 27 tendrán otra ocasión para fijar una posición común sobre los problemas en los mercados en el Consejo Europeo que los reunirá en Bruselas los próximos 15 y 16 de octubre.

Pérdidas

El valor bursátil de las empresas cotizadas en la Bolsa de Nueva York descendió el "lunes negro" en más de 1,2 billones de dólares, casi el doble del presupuesto del plan diseñado por Washington para acudir al rescate del sector financiero. Desde que se puso en marcha en 1980, es la primera vez que ese índice refleja un descenso en un sólo día que equivalga a más de un billón de dólares. Además, y según datos de ese índice citados por el responsable de finanzas de The New York Times en su blog, la pérdida en los últimos doce meses asciende a 4,2 billones de dólares.

Urgente

La jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, pidió hoy que el plan de rescate financiero impulsado por el gobierno de Estados Unidos sea aprobado esta semana, porque "es necesario para restaurar la confianza en los mercados. El gobierno espera y yo espero que el plan de rescate de Estados Unidos sea aprobado esta semana, porque es necesario para restaurar la confianza en los mercados", dijo Merkel.

Una larga recesión

El Premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz prevé una larga recesión en Estados Unidos y la victoria del demócrata Barack Obama en la elección presidencial de noviembre, según declaró en una entrevista publicada este martes por el diario italiano La Stampa.

"Veremos al índice Dow Jones de la bolsa neoyorquina en una caída libre mayor de la que podemos imaginar. Habrá quiebras estridentes de instituciones financieras. La economía estadounidense se dirige hacia una larga recesión", auguró el economista norteamericano.

"Estamos en medio de una de las peores crisis del siglo y hasta que no hayamos tocado fondo no podremos salir a flote", agregó Stiglitz, ex asesor económico del presidente estadounidense demócrata Bill Clinton y ex vicepresidente del Banco Mundial (BM).

Ante semejante panorama, "pienso que no hay dudas sobre el resultado de las elecciones de noviembre", prosiguió.

"El próximo presidente de Estados Unidos será Barack Obama. En una situación de este tipo, no hay ninguna posibilidad de que los estadounidenses lleven a la Casa Blanca al partido del presidente saliente", explicó.

Se estancó la economía británica

El Producto Interior Bruto del Reino Unido no registró en el segundo trimestre ningún crecimiento respecto a los tres primeros meses del año, lo que confirma el estancamiento de la economía británica, según los datos publicados hoy por la Oficina Nacional de Estadística.

La economía británica continúa su contracción, ya que creció un 0,8 en el segundo y tercer trimestres de 2007; un 0,5 por ciento, en el cuarto, y un 0,3 por ciento en los primeros tres meses de 2008.

El estancamiento intertrimestral aumenta los temores a que el Reino Unido entre finalmente en recesión (dos trimestres consecutivos con crecimiento negativo).

En su último informe trimestral sobre inflación, el Banco de Inglaterra predijo a principios de agosto que la tasa interanual de crecimiento del PBI se situará a finales de este año y comienzos del próximo en torno a cero, como consecuencia de un deterioro del mercado laboral, un endurecimiento de las condiciones crediticias y una caída mayor de lo previsto en el mercado inmobiliario. Asimismo, no descartó que la economía británica pueda decrecer y entrar en recesión, como ya lo hizo Irlanda.

Por otro lado, hoy se conoció que la balanza por cuenta corriente del Reino Unido -que mide los intercambios con el exterior por transacción de mercancías, servicios, rentas y transferencias- sumó un déficit de 10.987 millones de libras (13.806 millones de euros) en el segundo trimestre, lo que supone un 3 por ciento del PIB. El déficit del primer trimestre había sido de 5.500 millones de libras (6.912 millones de euros), un 1,5 por ciento del PBI.