Región: REG-18
Una oferta que amenaza el futuro
Por Miguel Jairala (*)

Este ha sido un año complicado por motivos de público conocimiento. A partir del mes de julio todo lo que significa producción de carne está en un período de crisis que tal vez no es tan notorio: el efecto de la sequía combinada con cierta desinversión han producido una liquidación de hembras muy importante y hace que la oferta de carne se esté dando en volúmenes importantes tanto para mercados internos como internacionales.

Esta aparente oferta normal encierra una amenaza a futuro que es la liquidación de hembras que generará una menor producción de terneros mañana y por ende menor cantidad de carne en el futuro.

En lo que a abastecimiento de mercados externos se refiere estamos operando en un sistema bastante restrictivo que implica un encaje del 75% que debe destinarse al mercado interno por cada operación de exportación que se quiera realizar. De esta forma se están concentrando las exportaciones en algunos mercados: lo que es alto valor para la Unión Europea y lo que es media res para el mercado ruso; y la Argentina está perdiendo presencia en mercados muy importantes que había logrado conseguir y consolidar luego de los problemas de 2001/ 2002, como Chile, Israel, los mercados del norte de África, etc.

Con relación a Rusia hay un parate de hecho en lo que es el comercio porque los importadores rusos están saturados de carne y no tienen más espacio para cargar contenedores. Lo mismo les pasa a operadores brasileños y uruguayos.

La merma en la demanda de alimentos seguramente es consecuencia de los problemas de la crisis financiera que sufren los países centrales y esto se traslada a los grandes motores de crecimiento de este siglo como son China e India, que ven reducida la demanda de sus productos industrializados desde los países centrales y, por lo tanto, tienen menor poder de compra de alimentos. Esta crisis seguramente va a traer una baja en los precios de los commodities, no solo los alimenticios sino también los energéticos por un desaceleramiento del crecimiento mundial.

El dólar ha venido bajando en términos relativos durante todos estos años, y la tendencia es a que se fortalezca a partir de una predisposición de mayor ahorro en la economía estadounidense por un fenómeno de tasas de interés altas.

El objetivo hoy del IPCVA es generar competitividad en este momento en el que no se pueden promocionar exportaciones porque estamos sujetos a un cupo autorizado por el gobierno nacional. Buscamos hacer a ese cupo lo más valioso posible, exportarlo a los mejores mercados.

(*) Economista del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna