Sucesos: SUCE-02
Por la muerte de Brian Altamirano
Esperan los peritajes de Gendarmería Nacional
La Justicia aguarda una serie de estudios que le permitan dilucidar con qué arma mataron al chico de 15 años, que apareció a un costado del hipódromo con un balazo en la espalda. A un mes del hecho su familia celebró una misa en su nombre.

A un mes del asesinato de Brian Altamirano, la mamá del chico llegó hasta El Litoral para reclamar por el esclarecimiento del caso que involucra seriamente a un policía, preso desde entonces. Mientras tanto, en la Justicia aguardan el resultado de los peritajes enviados a Rosario para que los realice Gendarmería Nacional.

Verónica Villarino, madre del joven de 15 años que apareció muerto en avenida Blas Parera y Estado de Israel el 13 de septiembre pasado, se preguntó qué ocurrirá con el autor de la muerte de su hijo. El paso del tiempo la hace sospechar acerca del devenir del caso, no obstante tiene la palabra del juez de la causa de que la investigación llegará a buen puerto.

El juez de Instrucción Quinta, Darío Sánchez, recibió a los Altamirano en Tribunales, a los pocos días del homicidio y les explicó que mandaría a hacer una serie de análisis -entre ellos del proyectil que acabó con la vida de Brian- y que los resultados tardarían un poco.

Por tratarse de peritajes que realiza una fuerza por fuera del Poder Judicial de la provincia, el magistrado debió pedir autorización a la Corte para hacerlas y el trámite llegó algunos días. Sin embargo, fuentes de la investigación confían en que los estudios requeridos estarán listos para la semana próxima y no descartan realizar medidas de prueba complementarias una vez reunida cierta información.

Intento de robo

En cuanto al hecho suscitado durante la madrugada del sábado 13 de septiembre, la versión más fuerte habla de un intento de robo al taller mecánico de un vecino del policía, que habría salido a la calle para evitar el atraco. Los Altamirano no niegan que esto sea cierto, aunque en el barrio circulan rumores de que otra habría sido el motivo que nadie quiere ventilar frente a la autoridad.

El policía de barrio Cabal declaró unos días después de quedar detenido y reconoció haber realizado un disparo, pero dijo no advertir si hirió a alguien. Su abogado Martín Risso Patrón explicó que su cliente "reconoció que hizo un tiro disuasivo, hacia el zanjón que está en frente del pasillo" de su casa.

Lo llamativo del caso fue que el cadáver de Brian Altamirano apareció a un costado del hipódromo, pero recién una hora más tarde de que el personal del comando radioléctrico recorriera la zona luego de un llamado de la familia del policía.

Los Altamirano viven en Estrada al 6500, en el límite del barrio Piquete Las Flores y Villa Hipódromo. Brian era el segundo de 5 hermanos y murió a causa de un disparo en el tórax, con orificio de salida.

Esta mañana su madre reconoció que el día del crimen hacía por lo menos una semana que no lo veía, y que se había ido a vivir con unos tíos, de los que no tiene las mejores referencias. Verónica lamentó no haber podido hacer algo a tiempo por su hijo, que esa noche habría salido con otro menor de edad, bajo el efecto de ciertas drogas, posiblemente suministradas en su círculo íntimo.

Misa.

Transcurrido un mes de la muerte violenta de Brian David Altamirano sus familiares celebraron una misa en su nombre. La ceremonia se celebró ayer a las 19, en la Iglesia Nuestra Señora del Tránsito "para rogar por tu eterno descanso", recordaron sus deudos en un aviso fúnebre de El Litoral, que llevaba la firma de padres, hermanos, tíos, primos y abuelos.