Los restos del cabo Carlos Nahuel de Antueno, asesinado en un tiroteo con delincuentes que cometieron un asalto en el barrio porteño de Palermo, fueron inhumados en el panteón de la Policía Federal del cementerio de Chacarita. Más temprano, el policía fue velado en la cochería Napolitano, desde donde partió el cortejo fúnebre integrado por familiares, amigos y compañeros de la fuerza. En un acto que se realizó en el panteón de la Chacarita, el jefe de la Policía Federal, Néstor Valleca, lamentó el crimen de De Antueno. "Por supuesto que nosotros no santificamos esta profesión para morir", afirmó. Por otra parte, aseguró que los investigadores del caso tienen identificado al autor material del homicidio. El cabo De Antueno tenía 34 años, un hijo de 8 y se desempeñaba en el Cuerpo de Policía Montada de la Federal. El jueves recibió dos disparos que le provocaron la muerte, cuando intentó frustrar un asalto a un local comercial.