Un hombre, ex pareja de la víctima, fue arrestado anoche

Varias amenazas preanunciaron el crimen ocurrido ayer en barrio Sur

Valeria María Caggiano (38) perdió su vida tras recibir no menos de 15 puñaladas. Mantenía una conflictiva relación con una ex pareja. Reiteradas veces había sido blanco de severas amenazas de muerte.

Varias amenazas preanunciaron el crimen ocurrido ayer en barrio Sur

Los investigadores entienden lo ocurrido como un crimen pasional, aunque no descartan otras hipótesis.

Foto: Luis Cetraro

Danilo Chiapello

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“Era una piba bárbara, muy alegre y vivaz. Por eso, la designaron para la atención al público. Estaba siempre de buen humor, a pesar de los problemas que tenía...”. Con estas palabras los compañeros de trabajo recordaron hoy a Valeria María Caggiano (38), aún sin superar el estupor que les provocó la noticia de su asesinato.

Como se sabe, la mujer perdió su vida ayer, a manos de un sujeto que la atacó en momentos que terminaba de dejar su automóvil particular en una cochera de calle 1º de Mayo al 1000, esto es, a escasos metros del Parque del Sur.

Pese a que el escenario del crimen es céntrico, la acción se consumó en la más absoluta soledad. Ocurre que, pasadas las 14 -hora del ataque- en dicho sector caía una intensa lluvia, motivo por el cual la circulación de personas era nula.

Por las malas condiciones del tiempo, también el lavadero de autos que se ubica al lado de la cochera, había cerrado sus puertas.

Todo esto obró a favor del homicida para consumar su acto, quien en su furia criminal, apuñaló a la víctima en tórax, abdomen y hasta en el rostro. La mujer, que dejó de existir tras resultar blanco de no menos de 15 puñaladas en distintas partes del cuerpo, también presentaba heridas de arma blanca en brazos y piernas, lo que supone una última defensa mientras se ejecutaba el ataque.

Una piba bárbara

Los Caggiano vienen de larga data como vecinos de barrio Sur. Valeria residía en uno de los departamentos de los edificios torre de J.J. Paso y 1º de Mayo. Era mamá de una niña, de 10 años.

Hace poco menos de 15 años, había ingresado a trabajar en la Asociación Mutualista de Empleado Públicos (Amep), ubicada en calle Corrientes, entre San Martín y San Jerónimo.

Su buen carácter y simpatía le fueron propicios para que la designaran en la parte de atención al público. Más precisamente en la sección Préstamos, o ayudas económicas.

Sus compañeros de trabajo hoy no podían superar el estupor de la noticia. “Es terrible esto que pasó. Todos estamos shockeados y no podemos entender cómo ocurrió.

Tenía problemas

A la hora de descubrir su perfil, uno de los empleados dijo que “era una piba bárbara. Siempre estaba alegre y de buen humor, pese a que todos sabíamos los problemas que tenía”.

Sobre este punto se supo que Valeria mantenía un severo conflicto con un hombre, el que tiempo atrás había sido su pareja.

Tras la ruptura de esa relación, la mujer comenzó a ser blanco de amenazas. Las advertencias sobre posibles ataques contra su persona tomaron un curso tan peligroso que llevaron a la mujer a realizar la denuncia en la policía. Tres de estas declaraciones también fueron judicializadas.

Arrestado

Tras el sangriento episodio acontecido en la cochera, agentes de la sección Homicidios fueron afectados al asunto.

Y al cabo de una intensa jornada, la novedad más importante se produjo anoche, tras el allanamiento a una vivienda de barrio Chalet, más precisamente en Roque Saénz Peña y J. J. Paso.

En dicho lugar los pesquisas hallaron a un hombre (D. B.), de 46 años, al que se llevaron arrestado de manera preventiva, en averiguación del suceso. Puesto cara a cara con los investigadores el individuo no ofreció resistencia.

A partir de hora, para este sujeto, comienzan a correr los plazos procesales. Los investigadores tienen por delante la delicada misión de definir si queda detenido en calidad de imputado o si -por el contrario- se le otorga la libertad.

En tanto se supo que desde el interior de la casa los uniformados se incautaron de dos armas de fuego. Un revólver, calibre 38 y una pistola Ballester Molina, calibre 45.

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Familiares y allegados de la víctima sufrieron crisis de nervios tras conocer la fatídica noticia.

Foto: Luis Cetraro

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EL DATO

Cartas en la mira

En el lugar del crimen, los investigadores habrían encontrado algunas cartas. Estos escritos estaban en el interior de la cartera de la víctima. Pese al hermetismo que rodea el asunto, el tenor de esas cartas sería de carácter intimidatorio, y por estas horas es analizado por personal abocado a la investigación.

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LA CLAVE

Sería un caso pasional

Desde el inicio se descartó el robo como móvil del ataque y la investigación está enfocada a un crimen pasional, según señaló en el lugar del hecho el juez de Instrucción Rubén Saurín. El magistrado concurrió a la escena del crimen pocos minutos después de que fuera hallado el cadáver y, si bien dijo que en la investigación no iba a “descartar nada”, se inclinaba por el móvil pasional. Otra fuente de la pesquisa dijo que “hay indicios que llevan a lo pasional, como la ferocidad con que fue asesinada la mujer y un par de cartas de amor” encontradas junto a la víctima.