Caso Laracca

La familia de Mario no tiene respuestas

Diecisiete meses después del crimen del comerciante, su esposa volvió a Tribunales para saber en qué estado se encuentra la causa. No hay detenidos.

De la Redacción de El Litoral

Una vez más, la viuda de Mario Laracca se dirigió a Tribunales en busca de respuestas por la muerte de su marido, ocurrida hace más de 17 meses. El caso no tiene detenidos y ni la Justicia, ni la Policía tienen pistas firmes de quiénes serían los autores del crimen, consumado a pleno día, delante de otros vecinos, y en un lugar de la ciudad que desde entonces fue ganando en inseguridad, según confirman los comerciantes de la zona.

Valeria Migliano, madre de un chico de 5 años, visitó una vez más el despacho del juez de Instrucción Primera, Pedro Guevara, para implorar justicia por la muerte de su marido. El encuentro, concretado la semana pasada, fue una nueva frustración para la mujer, que no escucha el eco de sus reclamos.

Mario Laracca tenía 32 años cuando fue asesinado el domingo 17 de junio de 2007, fecha que coincidió con la del Día del Padre. No le robaron, sino que los delincuentes que acababan de asaltar una carnicería lo ejecutaron sin miramientos de un disparo en la cabeza. Su cuerpo quedó tendido en la esquina que forman las avenidas López y Planes y Fray Cayetano Rodríguez, a metros del negocio de venta de herrajes que lleva su nombre.

Reconocimientos

Para la época en que ocurrió el hecho, el juzgado en el que quedó asentada la causa estaba vacante y Guevara era por entonces fiscal. Entonces las suplencias esporádicas hicieron que varios jueces de Instrucción fueran rotando para atender los casos que entraban, entre ellos el crimen de Laracca.

A este problema de índole administrativo institucional, se suma la falta de colaboración de los testigos y de las víctimas del robo ocurrido previamente, dado que ninguna de las personas citadas pudo o se animó a reconocer a los delincuentes cada vez que se los convocó.

Migliano recibe llamadas anónimas en las que le acercan datos, que a su vez retransmite al juzgado, para que averigüen sobre su veracidad. El juez de Instrucción, Pedro Guevara, a su vez instruye a la policía para que confirme o descarte las versiones, pero hasta el momento las pistas fueron siempre falsas alarmas, según fuentes cercanas al caso.

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El 17 de junio de 2007 dos delincuentes que asaltaron una carnicería ejecutaron a Laracca de un disparo en la cabeza.

Foto: Archivo El Litoral