Marcelo Mosset vuelve a jugar el sábado
“Reconozco mi error y trataré de enmendarlo lo antes posible”
Fue el último. El capitán Marcelo Mosset saluda a la hinchada tatengue que estuvo en Jujuy, para ver la final por el ascenso. Luego su control antidoping daba positivo, dejándolo fuera de las canchas por cinco meses.
Foto: Archivo El Litoral
Alberto Sánchez
Pasaron cinco meses desde que Marcelo Mosset pisara por última vez un campo de juego como protagonista de un partido oficial debido a la sanción por doping positivo tras el cotejo de vuelta de promoción por un ascenso a Primera División disputado en Jujuy ante Gimnasia y Esgrima.
Hoy, a días de cumplir la misma, el “Tato” fue confirmado por Fernando Quiroz como marcador central por Lucas Alessandria, que está desgarrado. Sabiendo esto, el jugador expresó: “Estoy bien, tranquilo, tratando de manejar la ansiedad y esperando el día del partido para hacer bien las cosas. Por ahora, lo estoy manejando bien, pero la verdad es que por ahí uno se pone a pensar y se pone más ansioso por las ganas de volver a vestir la camiseta y poder entrar nuevamente a la cancha”.
Mosset intentó explicar el hecho de reaparecer apenas terminó la sanción: “En estos meses, traté de hacer las cosas de la mejor manera y cuando se acercaba el momento de mi disponibilidad para que el técnico pueda contar conmigo, intensifiqué mi trabajo. Más que nada traté de pensar en estar física y futbolísticamente bien, y con el grupo ni hablar, porque con los muchachos convivo día a día”.
—¿Cómo viviste estos cinco meses fuera del fútbol?
—Pasé por muchos y diferentes momentos, pero siempre con el apoyo de mi familia, de los compañeros, de la dirigencia, del gremio, y con mi manera de ser, tratando de pensar en lo que viene y encontrando una salida para todo, logré hallar la fuerza y traté de salir de una situación difícil de la mejor manera posible. Se hace difícil porque el jugador siempre quiere jugar y competir cada fin de semana, pero lo acepté y desde el momento en que lo hice traté de colaborar con el grupo y con el club, que se portaron muy bien conmigo.
Revertir el pasado
En la charla mantenida al final de la práctica matutina, el defensor dijo hallar en determinadas personas, el empuje necesario para superar momentos difíciles: “No soy de piedra, pero yo trato de estar bien con las personas que tengo a mano, con los que me quieren, para mí fue fundamental contar con ellos en todo este tiempo, saber realmente quiénes son esas personas a las que elijo para el resto de mi vida, porque en los momentos más complicados es cuando te das cuenta de quiénes están a tu lado de verdad”.
“Más allá del error que cometí, no me juzgaron como persona, por eso les estoy agradecido y traté, en todo este tiempo, de responderles como jugador y como persona, por eso quiero enmendar lo antes posible la falta que cometí. Cuando el entrenador te da toda la confianza, es normal que el jugador trate de demostrar que no se equivocó. Además, la batalla más dura de todo ser humano es la que entabla con uno mismo”, agregó.
—¿Hubieses preferido volver al equipo jugando como local?
—La verdad es que trato de estar bien con las personas que están a mi lado, me hubiese gustado y me pone más ansioso la posibilidad de entrar a la cancha de Unión. Como reaccionará la gente no lo sé, algunos lo harán de una manera y otros de otra, pero yo sé lo que tengo que hacer, que es salir a dejar la vida en cada pelota, si la gente que hasta ahora tiene prejuicios conmigo me ve con esa actitud, seguramente los podré revertir.
—¿Te preocupa lo que la gente piense de vos?
—Sé que hay muchos prejuicios, pero lo único que digo es que reconozco mi error y trataré de enmendarlo lo antes posible. En lo único que pienso es en mirar para adelante, responderle a todas las personas que confiaron en mí. Seguramente, habrá quienes me puedan reprochar algo, en lo personal quizás algún familiar o alguna amistad, y en lo futbolístico, algún hincha, pero yo en lo único que pienso es en cambiar todo eso.