Nadie queda exento de sufrir inconvenientes

Repetidos problemas por los trabajos en veredas de empresas de servicios

Es un clásico santafesino: una cuadrilla hace una perforación y corta el suministro de otra empresa prestadora. Aquí, un repaso por los inconvenientes de esta complicada convivencia.

De la redacción de El Litoral

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En la memoria de muchos santafesinos quedará aquel fin de año de 1994, cuando la salida de servicio del cable OF de la EPE generó una verdadera crisis energética desde el 20 de noviembre hasta su reactivación el 23 de diciembre (a las 18.40, según consigna el archivo de El Litoral). En el medio hubo una verdadera saga con la búsqueda de la perforación y una trama de acusaciones (se habló de boicot, en el marco por la discusión sobre la privatización de la empresa) mientras los abanicos sustituían a los inertes ventiladores y acondicionadores de aire en un verano particularmente tórrido.

Sin llegar a ese extremo, cortes no previstos dejan a la ciudadanía a oscuras y con calor, y no debido a la saturación del consumo. ¿La causa? Daños en la red causados por terceros, que también afectan en ocasiones al gas, al agua y al teléfono: sin ir más lejos, días atrás una perforación de Cablevisión bajo las veredas de Pedro Vittori afectó la red de Telecom y dejó sin telefonía a buena parte de la ciudad.

Las fallas ocasionadas por terceros son una constante, generalmente personal o contratistas que responden a su vez a otras empresas de servicios; de todos modos, en muchos casos es un particular quien al reformar su porción de la acera afecta el suministro de alguna de estas redes. Esto constituye un problema que hasta ahora las empresas han logrado paliar, pero no solucionar.

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Un ejemplo cercano: desde mediados de mes muchos abonados de Telecom vivieron la tortura de quedarse sin servicio debido a un cable arrancado con motivo de trabajos realizados por una empresa de TV por cable.

Foto: Archivo El Litoral/Alejandro Villar

Inconvenientes de Assa

Según los datos brindados por la empresa Aguas Santafesinas, en los últimos años, fueron varios los inconvenientes que sufrió el servicio a causa de daños accidentales por obras de otras empresas. En abril de 2006, por ejemplo, la ejecución de un desagüe pluvial contratado por el municipio provocó la rotura de la cañería distribuidora, de 150 milímetros de diámetro, en Suipacha y avenida Perón.

El episodio con más consecuencias de 2008 fue cuando se producía, con una tunelera, el tendido de fibra óptica por General López casi San Jerónimo a fines de noviembre. La conexión afectada fue un refuerzo de la red de 250 milímetros de diámetro que si bien no dejó sin servicio a los usuarios de la zona, sí generó baja presión.

Los problemas más habituales son originados por trabajos de pavimentación o confección de cordón cuneta que causan la rotura de las instalaciones domiciliarias.

En junio de 2007, la limpieza de cunetas, a cargo del municipio, tuvo como consecuencia la roturas de varias cañerías distribuidoras de 75 y 100 mm en los barrios San José y San Martín. Para agosto del año pasado, una empresa contratada por la Municipalidad para hacer una obra pluvial provocó roturas de caños distribuidores de 75 mm en calle Alvear y Pasaje Grilli; en el mismo mes otra empresa que realizaba cordón cuneta rompió las conexiones de agua en Dorrego al 4500 y en Colodrero al 1100. En septiembre trabajadores contratados por la Municipalidad que realizaban tareas de limpieza en cunetas en Teniente Loza al 9700 rompieron el caño distribuidor de agua. Octubre de 2007 tuvo varios episodios: trabajos de la Empresa Provincial de la Energía provocaron inconvenientes en el acueducto sur en la zona de avenida Alem y Necochea. En la misma época, el tendido de la red de gas hizo que Assa tuviera que reponer cañería distribuidora en Santiago de Chile al 5800 y los trabajos de ejecución de una cámara pluvial afectaron la red de agua en avenida Almirante Brown y Padre Genesio.

En mayo de este año, los trabajos de mejoramiento de las calles interiores del puerto significaron varias roturas en la red, por lo que Assa luego debió reemplazar cañerías. En agosto una empresa que hacía trabajos para la EPE afectó caños de 100 milímetros y de cloacas de 150 milímetros en Mariano Comas al 2400. Al mes siguiente, los trabajos en una obra de desagüe pluvial generaron inconvenientes en la conexión de agua en Entre Ríos al 3900.

En Litoral Gas

En Litoral Gas llevan un registro mensual de los daños por terceros; la cantidad de los mismos impide hacer un desarrollo discriminado de casos, aunque desde la empresa se reconoce que participan distintos contratistas, otras empresas de servicios y particulares. Si bien quienes deben realizar excavaciones reciben indicaciones de altura y recorrido de las tuberías, éstas son sistemáticamente perforadas.

Lo que sí parece haber es un aumento progresivo, ya que en 2006 hubo 61 casos registrados (en las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé), en 2007 fuero 67 y en el año que termina (sin contar diciembre) ya van 83 casos. El pico máximo en el último trienio fue en noviembre de 2007, con 15 denuncias, y el mínimo fue en abril del mismo año, con ningún caso registrado. Sin embargo, un año después, en abril de 2008, la suma alcanzó a 14, la segunda más alta del período contabilizado.

Diciembre de 2006 (con siete) y marzo de 2006 y 2008 (ambos con nueve) desmienten que los meses del verano sean más tranquilos para las cuadrillas de reparación.

Casos de la EPE

Para la Empresa Provincial de la Energía, los problemas más importantes en este año fueron tres sobre los tendidos subterráneos de media tensión -13,2 kV- que unen los centros de distribución Calchines y Rosario. Ambas distribuidoras están ubicadas en la zona del puerto de Santa Fe y los inconvenientes se registraron en el período de obras que se hicieron en el lugar.

Además, por el colapso del conducto de cloacas en la zona de San Martín y bulevar Pellegrini, quedó inhabilitada por un tiempo una cámara subterránea de transformación de energía.

 

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EL DATO

Telecom

Desde la empresa de telefonía informaron a El Litoral que la sucursal Santa Fe no dispone de datos discriminados para la ciudad, ya que todos los registros se derivan directamente a Buenos Aires. Por tal motivo, se desconoce la cantidad de daños recibidos en las líneas a cargo de otras empresas y de particulares.