Empleado de “confianza”

Hay detenidos por el crimen de productor sojero

DyN

Siete hombres fueron detenidos por la Policía nacional del Paraguay, en el marco de las investigaciones por el asesinato en ese país del empresario agrícola argentino Esteban Andreoli, informó el comisario paraguayo Rubén Rosas.

Por el hecho, además de los dos detenidos sospechados de ser los principales responsables del doble homicidio, fueron demoradas otras cinco personas que eran interrogadas por los investigadores, añadió el jefe policial. El empresario agrícola argentino Esteban Andreoli, miembro de una de las familias productoras de soja más poderosas del país, fue encontrado el jueves, asesinado en un campo que manejaba en el departamento de Canindeyú, al norte de Paraguay, en la frontera con Brasil.

En el lugar también fue asesinado uno de los empleados del productor sojero argentino, el ingeniero agrónomo paraguayo Modesto Gamarra Giménez. Giménez, de 51 años, era gerente general de la firma Agropecuaria del Paraná (Agropar), encargada de administrar el establecimiento de Andreoli, ubicado a unos 457 kilómetros al noreste de Asunción.

El jefe policial paraguayo destacó que de los “dos detenidos -de apellido Ayala y Villalba- señalados como principales sospechosos de ser los responsables de ambos asesinatos, uno de ellos era trabajador de la planta y persona de confianza del ingeniero agrónomo paraguayo”.

Degollado

Andreoli, un ingeniero agrónomo de 28 años oriundo del pueblo de Moquehuá, en el partido bonaerense de Chivilcoy, fue encontrado degollado en la habitación de su establecimiento rural Marangatú, situado a unos 180 kilómetros de la ciudad de Salto del Guairá, capital del departamento Canindeyú, y a 500 kilómetros de Asunción.

El fiscal de Salto de Gauriá, Ramón Trinidad Zelaya, a cargo de la investigación, confirmó ayer a DyN que Andreoli presentaba “dos heridas profundas en el cuello que le provocaron la muerte y otras tres en la parte izquierda del tórax” y que se encontraba “boca arriba, maniatado y amordazado”.

Gamarra Jiménez, quien también estaba amordazado, fue encontrado en la sala principal del predio boca abajo, con cortes de arma blanca “en el pecho y la espalda”. Los cadáveres fueron encontrados por otro empleado del campo, el ingeniero agrónomo Edgar Ross.

Andreoli había llegado al campo poco antes del crimen para reunirse y pagarles a los empleados del establecimiento, donde se cultiva soja en 2.400 hectáreas. “El administrador dijo que los empresarios se manejan con cheques, pero creemos que los ladrones pensaron que traía mucho dinero para pagar a los empleados, unos 15 trabajadores”, señaló el fiscal.