Conciliación obligatoria por 30 días

Siderar frenó inversiones y hay una crisis laboral en San Nicolás

Unos 800 trabajadores contratados para la reconstrucción de un alto horno, y otros 200 metalúrgicos, iban a recibir desde hoy los telegramas. La empresa prevé afectar otros 1.400 puestos de trabajo por la crisis económica.

Siderar frenó inversiones y hay una crisis laboral en San Nicolás

Sobra producción de acero, se paraliza la renovación del segundo horno de Siderar. El “síndrome Somisa” amenaza a San Nicolás.

Foto: Archivo El Litoral

De la redacción de El Litoral

[email protected]

DyN

Una delicada situación socio-laboral afecta a San Nicolás, donde 2.400 trabajadores metalúrgicos y de la construcción de la empresa Siderar podrían perder sus puestos de empleo en los próximos días, como consecuencia de la caída de la actividad en esa planta siderúrgica.

El Ministerio de Trabajo de la Nación puso un paréntesis al conflicto al dictar ayer la conciliación obligatoria, con lo que evitó un primer paso del ajuste empresario que preveía mil despidos en la empresa del grupo Techint.

En diciembre de 2007 y con la presencia del por entonces presidente Néstor Kirchner y de su esposa, la actual mandataria nacional, Paolo Rocca anunció un plan de inversiones que ahora la empresa ha decidido dejar en suspenso por la crisis internacional. La misma que provoca una significativa caída en la demanda de acero para la industria.

Dirigentes de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) aseguraron que la situación en Siderar “no tiene arreglo”, más allá de los intentos del gobierno y de los sindicatos por evitar los despidos.

La firma había adelantado tanto a los metalúrgicos como a dirigentes de la Uocra la decisión de dejar de lado contratos laborales “por falta de trabajo”. Así lo habían expuesto durante un encuentro en la sede del Ministerio de Trabajo que presidió la viceministra, Noemí Rial. Pero la cartera laboral dictó la conciliación obligatoria y en principio frenó por unos días la pérdida de trabajo de unos mil operarios, 800 de los cuales son trabajadores de la construcción contratados para reparar uno de los altos hornos de la empresa que opera en San Nicolás.

La medida rige por 30 días desde la medianoche de ayer y abre nuevas instancias de negociación entre los directivos de Ternium Siderar (el grupo tiene plantas en México y poseía la estatizada Sidor en Venezuela).

Tensas negociaciones

El secretario de prensa de la UOM de San Nicolás, Luis Sánchez, dijo que “desde los gremios estamos ejerciendo fuertes presiones, pero en Techint se mostraron inflexibles y no aceptaron ninguna propuesta alternativa”.

La empresa no aceptó una desafectación gradual de los trabajadores de la construcción, propuesta en la medida en que se fueran terminando los trabajos. La determinación firme de Siderar es la de frenar las inversiones, lo que compromete la fuente de trabajo de quienes desde octubre del año pasado trabajan en la reparación de uno de los dos altos hornos.

El grupo Techint, que controla Ternium Siderar, fundamentó la decisión en la “falta de caja”, para continuar con construcción de un horno de fundición con tecnología de punta para la producción de planchas de acero. En los planes de la empresa, otros 1.400 trabajadores quedarían sin ocupación en una segunda etapa.

El conflicto en Siderar, generó una verdadera crisis socio-laboral en San Nicolás a punto tal que el tema fue tratado en una reunión del Concejo Deliberante local. El secretario de prensa de la UOM-San Nicolás, Luis Sanchez, dijo que muchos de los trabajadores que serán despedidos se encuentran de vacaciones, luego que Siderar dispusiera paralizar la reconstrucción del horno.

 

///

EL DATO

Una planta estratégica

Ternium Siderar es la mayor siderúrgica nacional especialista en la producción de aceros planos. Controlada por el Grupo Techint que lidera Paolo Rocca, surgió tras la fusión de Aceros Paraná (ex Somisa), Propulsora Siderúrgica, Aceros Revestidos y otras empresas de la misma corporación. Es el principal proveedor industrial y de la construcción de la argentina, y su plan de inversiones estaba atado al crecimiento no sólo de la economía local sino de la industria china. La crisis global impactó de lleno en esta planta estratégica.