Apuntes de política provincial

La contienda electoral ya comenzó en la provincia

 

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Rubén Giustiniani y Carlos Reutemann, juntos, en una imagen de archivo. En el futuro, ambos tratarán de renovar sus bancas y se encontrarán nuevamente como contrincantes.

Foto: El Litoral

Teresa Pandolfo

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Todo indica que el senador Rubén Giustiniani buscará su reelección para el Congreso. Lo mismo ocurrirá con Carlos Reutemann, en unos comicios que serán cruciales para el futuro de los proyectos políticos del oficialismo y la oposición.

¿Pensaba el primero que su contrincante iba a ser Agustín Rossi y no el ex gobernador? ¿Deben atribuirse a esta posibilidad las duras apreciaciones del doctor Hermes Binner, cuando estando fuera de la provincia dijo que Reutemann perdía en Santa Fe?

Llama la atención que el mandatario haya apelado a “una chicana” en las declaraciones que hizo, compartiendo un campamento juvenil en territorio salteño. Pero toda la prensa coincidió en esos dichos, por lo que no hubo una interpretación aviesa.

Desde hace tiempo, el socialismo viene organizando estos campamentos. Al parecer, éste fue todo un éxito, porque se duplicaron los participantes respecto de iniciativas anteriores. La democracia cristiana en Italia, durante y después de la Segunda Guerra Mundial utilizaba periódicamente esta forma de reunión, para introducir a los jóvenes en la política y enseñarles tolerancia ante la diversidad. Una metodología que incluía lecturas guiadas y cambios de ideas, enseñándose así, responsabilidades ante la cosa pública.

Tiene razón Binner cuando dice que no es tiempo de candidaturas porque existen otras urgencias. Debe gobernar un escenario cada vez más complejo. Pero ocurre que las principales consultoras de opinión del país los están midiendo en imagen y en aceptación, cada vez con mayor frecuencia. A Reutemann y al gobernador, estos encuestadores, ya los consideran “presidenciables”.

El senador figura con una imagen positiva superior al 50 por ciento, en las mediciones con mayor rigor técnico, y triplica la intención de votos de cualquier otro justicialista de la provincia.

Repercusión

Desde la Navidad, las columnas políticas y el arco diplomático no han obviado al senador nacional. Reutemann siempre dividió aguas y ahora otra vez lo hace, incluso dentro de su partido. Felipe Solá, Hilda y Eduardo Duhalde, respondieron críticamente; más benévola fue la Casa Rosada, aunque todos saben que Reutemann no se someterá a nadie, consciente de su protagonismo.

Para la dirigencia intermedia del peronismo ha sido una buena noticia, y como se dijo en “Apuntes...” de la semana pasada, se trata de una ventana que se abría en el panorama del PJ, frente a un kirchnerismo que se cerraba en cada vez menos íntimos.

Para el empresariado ha sido una bocanada de oxígeno, luego de los vaivenes producidos por la falta de equilibrio que se observa en algunos despachos del poder central. Lo festejó la producción, que lo ha tenido como aliado.

No se equivoca el Ing. Héctor Huergo, en su tradicional columna de Clarín Rural de los sábados, cuando habla de una nueva Argentina que se fue formando desde el interior, “que tuvo su bautismo de fuego político en 2008, cuando los del campo le pusieron la mano en el pecho a un gobierno que viene de las antípodas”.

El columnista sostiene que “el lanzamiento de Reutemann como presidenciable se inscribe en esta saga y se suma a la candidatura obvia de Felipe Solá”.

Las especulaciones fueron muchas desde la salida de Reutemann, pero lo que más sorprendió fue el siguiente comentario: “Lole no descarta una alianza con Elisa Carrió”, si ella no logra cerrar el espacio alternativo al kirchnerismo, que está construyendo. La acotación provino de una figura muy allegada al senador, quien completó sus dichos aseverando que “entre los dos había una buena relación”. Esta periodista entiende que esto sólo podría producirse si Reutemann no logra armar un esquema dentro del peronismo y nada indica ahora que así suceda.

Hay un mundo de distancia hasta las elecciones de octubre, en una Argentina que recién comienza a sentir los rigores de la crisis financiera mundial, la cual por otro lado se suma a los errores cometidos por el gobierno nacional. Uno de ellos: los prejuicios contra el campo que le impiden arbitrar medidas concretas y eficientes para fortalecer los sectores básicos de nuestra economía. Mucho tiempo se ha perdido y las consecuencias se suman a las dificultades que fuertemente ya carga el sector industrial.

La provincia

Párrafos más arriba, decíamos que Binner en el gobierno se encuentra con un escenario de convergentes complejidades. Y el socialismo, para retener y/o aumentar su electorado, necesita de resultados concretos en la gestión.

La acción gubernamental no siempre guarda relación con la dialéctica de márketing que ensaya. El diálogo es una herramienta para comenzar un camino de solución, pero no siempre resulta suficiente. Se requieren medidas que se anticipen a los aconteceres -previendo lo que va a ocurrir- porque ya no es tiempo de diagnósticos. Adoptarlas cuando los hechos han sido consumados trae demasiados dolores sociales.

Las actividades culturales aportan belleza y paz, en la mayoría de los casos transitorias, pero no construyen la economía de la provincia y tampoco resuelven las inequidades sociales ni la falta de destino de segmentos poblaciones cada vez más nutridos.

Para los buenos entendedores, las palabras huelgan...