VOTAN LOS VENEZOLANOS

Nuevo intento de Hugo Chávez por alcanzar la reelección indefinida

La campaña del oficialismo fue arrolladora, frente a las carencias de los opositores. A las seis de la mañana, comenzaron a estallar fuegos artificiales y los chavistas salieron a recoger a los ciudadanos para que voten desde temprano.

De la Redacción de El Litoral

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AFP/EFE

Más de 16 millones de venezolanos comenzaron a votar este domingo en un referéndum en el cual decidirán si aprueban la reelección sin límite de mandatos del presidente y demás cargos de elección popular, una propuesta inédita en medio siglo de democracia de este país.

Si se aprueba esta modificación de cinco artículos de la Carta Magna, el presidente Hugo Chávez podrá optar a un tercer mandato a partir del 2013, pero si es rechazada deberá abandonar el poder al concluir su segundo período.

Alrededor de 33.000 mesas electorales quedaron instaladas en todo el país, para una jornada de votación que comenzó a las 06h00 locales (10H30 GMT) y se extendía hasta las 18H00 locales (22H30 GMT).

Desde horas de la madrugada del domingo, se escucharon fuegos artificiales y repetidas veces sonó la diana militar para convocar a los votantes. Cerca de 140.000 efectivos militares custodian los centros electorales y la policía ha sido acuartelada.

Para los partidarios del presidente Chávez, esta enmienda es vital para consolidar la “revolución bolivariana” y lo que han llamado el “socialismo del siglo XXI”. Chávez expresó reiteradamente su deseo de “estar al frente del timón” al menos hasta 2019, y eventualmente más allá.

Los defensores del Sí en este referéndum sostienen que la propuesta “amplía los derechos del pueblo” al otorgarle “la libertad de elegir” a un buen gobernante cuantas veces lo deseen.

En cambio, sus opositores aseguran que atenta contra el principio de la alternancia, consagrado en la Constitución, y denuncian que la reelección sin límite ya fue rechazada en referéndum en 2007, cuando se sometió a votación una amplia reforma socialista a la Constitución.

Participación clave

Pese a todo, quienes apoyan el No han multiplicado sus llamados a la participación electoral, bajo la premisa de que la movilización de los votantes será clave en el resultado.

En anuncios publicitarios y mitines, sus líderes han recordado a menudo que el voto es secreto y los electores no deben sentirse intimidados. Además, han organizado una red de cobertura casi total de las mesas electorales, con unos 50.000 testigos que guardarán copia de las actas de escrutinio.

La oposición, con una flagrante falta de medios materiales frente a la arrolladora campaña del oficialismo, se vio empujada a unirse y confía en un buen resultado.

Tras la derrota en el referéndum del 2007, el gubernamental Partido Socialista Unido (PSUV) se ha volcado en la campaña en favor de esta enmienda. Cerca de dos millones de personas, conocidas como “patrulleros”, tienen la labor de buscar, lista en mano, a los votantes que en otras ocasiones se han abstenido.

Liderándolos a todos estuvo el propio Chávez, quien el sábado atribuyó su derrota en el referéndum del 2007 a que no estuvo lo suficientemente presente en la campaña.

Esta enmienda “dará al gobierno más fortaleza en lo que estamos haciendo, más perspectiva. Disminuirán incertidumbres políticas y eso es lo que no quiere la oposición: ellos quisieran mantener al país en una incertidumbre”, aseguró el mandatario.

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ADEMÁS

El expulsado no se arrepiente

El eurodiputado español expulsado el viernes de Venezuela después de haber calificado al presidente Hugo Chávez de “dictador” y de criticar al órgano electoral, aseguró a su llegada a Madrid que no lamenta “absolutamente nada” de lo que dijo en Caracas.

Luis Herrero, diputado del Partido Popular (PP, derecha) que integra el bloque del Partido Popular Europeo (PPE), dijo a la prensa española que lo aguardaba en el aeropuerto de Madrid que no retirará “ni una coma” de lo que dijo en Venezuela.

Herrero, que había sido invitado a Caracas por el partido demócrata-cristiano Copei para seguir el referéndum , fue expulsado el viernes de Venezuela tras haber calificado al presidente Chávez de “dictador” y criticado al Consejo Nacional Electoral (CNE), según la cancillería venezolana.

Al hablar a la prensa venezolana, el eurodiputado había pedido a los venezolanos “votar en libertad y que jamás voten dejándose llevar por el miedo que premeditadamente un dictador está tratando de imponer”.

Chávez es “un tipo que no entiende las reglas de la democracia”, afirmó Herrero en Madrid, luego de asegurar que lo que vio y escuchó en Venezuela le pareció “absolutamente impresentable”.

El presidente venezolano confió en que este “lamentable incidente producido de manera intencional por este indigno diputado no empañe para nada las excelentes relaciones que tenemos con el gobierno español”.

El gobierno español protestó ante el embajador venezolano en Madrid, Alfredo Toro Hardy, aunque ambas partes reafirmaron las buenas relaciones bilaterales, según la cancillería española.

“Seis gorilas me llevaron a empellones hasta el interior de un coche blanco sin que mediara ninguna explicación”, indicó Herrero en una columna publicada por el diario El Mundo.

“Les pedí que al menos me dejaran hacer el equipaje, pero sólo obtuve la respuesta de una manaza en el cuello y otra en el brazo izquierdo”, afirmó en estas líneas escritas a bordo del avión que le condujo de Caracas a Sao Paulo, antes de tomar un vuelo a Madrid.

Herrero explica que fue conducido directamente en auto a la pista del aeropuerto, hasta los pies de un avión de la compañía brasileña Varig, sin tener ninguna idea de su destino.

Como no tenía su pasaporte con él, no pudo embarcar de inmediato y esperó una hora en la pista hasta que un mensajero se lo trajo, relató.

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EL DATO

Encuestas en duda

Los sondeos dan una ligera ventaja al Sí, pero en esta ocasión los encuestadores no se atreven a hacer proyecciones pues señalan que se registra un número inusualmente elevado de indecisos. El Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció que podría dar los primeros resultados entre dos y tres horas después del cierre de la votación, pero a la vez advirtió que no hará ningún anuncio hasta que cuente con una tendencia irreversible.