El capitán argentino confía en sus posibilidades
“Tito” piensa en la final
Modesto Vázquez se entusiasmó al evaluar que, de vencer a República Checa en los cuartos de final de la Copa Davis 2009, se abrirán los caminos para volver a estar en el duelo decisivo.
Redacción El Litoral
El capitán del equipo argentino de Copa Davis, Modesto Vázquez, confió que si sus dirigidos le ganan a la República Checa en julio por la serie de cuartos, Argentina puede volver a disputar la final por la Ensaladera de Plata por segundo año consecutivo, tras el frustrado intento ante España en noviembre pasado.
“Si ganamos esta serie, podemos llegar a la final”, estimó Vázquez, quien admitió que Argentina depende mucho de los dos jugadores top, Juan Martín Del Potro y David Nalbandian, quienes no estuvieron en el 5-0 sobre el débil equipo holandés el último fin de semana.
“Tito” puso casi en pie de igualdad la situación de los checos con los argentinos. “Dependen mucho de Stepanek y Berdych, como nosotros de Del Potro y Nalbandian”, dijo antes de adelantar que ambos tenistas le aseguraron que estarán ante los checos, que seguramente elegirán una superficie rápida bajo techo, en la que le ganaron a los franceses, que contaron con el top ten Gilles Simón y Jo Wilfried Tsonga, número 11 del planeta.
A recomponer
El punto más importante del trabajo de Vázquez de aquí en adelante será la recomposición de la relación de los referentes del tenis nacional, Del Potro y Nalbandian, enfrentados y distanciados desde la serie final de la versión 2008 del tradicional certamen por naciones.
La intención del nuevo capitán es que vuelvan a reunirse antes del choque con República Checa con el objetivo de tirar ambos para adelante. Según el vaticinio de Vázquez, vencer a los checos le allanaría a la Argentina el paso a la final, y podría encontrarse otra vez con España, el gran candidato.
De llegar a semifinales, debería medirse con el ganador de Croacia y Estados Unidos, y en cualquiera de los dos casos jugará de local, seguramente en el Parque Roca. Croacia, más allá del 5-0 sobre Chile, está por debajo del nivel que tiene la dupla argentina de singles.
En tanto, si bien Estados Unidos cuenta con Andy Roddick, 7 del mundo, y James Blake, ambos de cuidado, además de la mejor dupla del planeta (Bob y Mike Bryan), jugará a favor de los locales la superficie de polvo de ladrillo, con lo cual los albicelestes mantendrían su condición de candidatos.
En el hipotético caso de jugar la final, lo hará sí o sí de visitante, gane quien gane en las semifinales de los choques España-Alemania e Israel-Rusia.
Historial
Los antecedentes entre Argentina y República Checa son escasos. De hecho, como país independiente, sólo enfrentó una vez a los albicelestes. Fue en 2005, en el Buenos Aires Lawn Tennis Club, cuando Nalbandian, Coria, Cañas y Calleri lograron un aplastante 5-0 sobre Jiri Novak, Jan Hernych, Tomas Zib y un juvenil Tomas Berdych.
Anteriormente, Argentina había jugado dos veces ante Checoslovaquia, con sendas derrotas. En 1980, en nuestro país, Ivan Lendl, Pavel Slozil y Tomas Smid derrotaron por 3-2 a José Luis Clerc y Guillermo Vilas. Siete años después, en Praga, Karel Novacek, Miloslav Mecir y el mismo Smid le asestaron un 5-0 aplastante a Martín Jaite, Horacio De la Peña y la dupla Frana-Miniussi, capitaneados precisamente por Modesto Vázquez.
Esta oportunidad será la de la revancha estadística, para igualar los números del historial. Si todo se desarrolla como pretende el guía técnico del grupo, con Del Potro y Nalbandian se podrá aspirar a presentar fuerte y seria oposición ante los muy buenos jugadores checos, que seguramente elegirán un escenario parecido al que conformó nuestro seleccionado para recibir a España en la final que, aún no se olvida, se perdió en Mar del Plata.
