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Cuidarse es tarea de todos los días

Con acciones concretas y simples es posible reducir el riesgo cardíaco. Para las mujeres, proteger la salud cardiovascular debe ser una responsabilidad diaria. FUENTE. PRO SALUD NEWS.

No fumar, alimentarse en forma saludable, realizar actividad física y conocer los factores que ponen en peligro al organismo son algunas de las instancias fundamentales para prevenir enfermedades y ganar años y calidad de vida. Para eso es primordial conocer y estar informadas, razón por la cual la Fundación Cardiológica Argentina lleva a cabo durante el mes de marzo una acción para difundir la importancia del cuidado del corazón, las arterias y el cerebro.

“Trabajar sobre la información y hacer hincapié en la importancia de conocer para poder llevar a la práctica acciones preventivas que contribuyan a mejorar la salud, es fundamental porque contando con información podemos cambiar la evolución de las enfermedades”. De esta forma abrió su exposición la doctora Ana Salvati, médica cardióloga y secretaria de la Fundación Cardiológica Argentina (FCA), brazo hacia la comunidad de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), durante la presentación de una iniciativa encabezada por el “grupo Corazón y Mujer” de la mencionada institución, que contando con el apoyo de un reconocido shopping de Capital Federal, eligió el mes de la mujer como punto de partida para acercar a la comunidad y más precisamente al sexo femenino conceptos claves que contribuyan a disminuir la incidencia de las enfermedades cardiovasculares femeninas.

Estas afecciones, que en la Argentina se cobran la vida de una de cada tres mujeres, se ven favorecidas por una serie de conductas nocivas entre las que se cuentan el tabaquismo, el sedentarismo, el sobrepeso y la obesidad, el estrés y sobre todo el desconocimiento.

Informarnos para prevenir

“La información inmediatamente nos conecta con la prevención. Por eso es tan importante que las mujeres -de todas las edades pues uno de los primeros conceptos que tenemos que erradicar es que las enfermedades del corazón son ‘cosas de viejas’- tomen conciencia de que no es normal que un especialista en ginecología, por ejemplo, al ser el médico al que más visitamos, no nos tome la presión arterial. Si entendemos que no sólo hay que llevar al marido al médico, sino además ocuparnos de nosotras, porque las enfermedades cardiovasculares ‘también son cosa de mujeres’, podremos tener adolescentes más sanas que luego mantendrán sus hábitos toda la vida”, consignó la doctora Florencia Rolandi, médica cardióloga, integrante del Grupo Corazón y Mujer de la FCA.

“Para nosotros era fundamental colaborar brindando un espacio en el cual las más de 900 mil personas, la mayoría mujeres, que pasan por mes por el shopping puedan escuchar -y obtener folletería con información en los diversos puestos-, sobre cuáles son las mejores maneras de cuidar el corazón y prevenir enfermedades. Es por eso que también convocamos a marcas como Uma y Vitamina que crearon una línea de remeras especialmente para la ocasión, cuyo valor de compra no sólo es destinado a la FCA sino que además es la ‘puerta de entrada’ a la charla”, postuló Carolina Lascano, gerente de Relaciones Institucionales de APSA Centros Comerciales, en referencia a la iniciativa que se extenderá hasta el 31 de marzo.

Dar el mensaje pero también la solución

“Cuando se planteó la idea de llegar a las mujeres en un ámbito relacionado con el placer y el disfrute como es un shopping, se nos generó la necesidad de brindar un mensaje claro sobre la incidencia de las enfermedades cardiovasculares, pero también dar información sobre cómo poniendo en práctica medidas concretas se puede hallar una solución”, coincidieron las especialistas.

“Hay algunos puntos sobre los cuales es necesario hacer aclaraciones para que se entienda que no pasa por hacer sacrificios sobrehumanos. Por ejemplo, alimentarse sanamente hoy en día es cada vez más fácil porque las opciones se multiplican pero, aún así, eso no quiere decir que no puedan existir ‘permitidos’ o ‘licencias’ que nos brinden placer en un determinado momento. Algo similar ocurre con el ejercicio: no es necesario hacer dos horas por día de spinning sino simplemente adaptarse a la realidad de cada una. Si no hay tiempo para ir al gimnasio, podemos caminar media hora por día, subir las escaleras del trabajo en lugar de tomar el ascensor o ir a buscar a los chicos al colegio a pie”, concluyó la doctora Salvati.