En barrio Constituyentes

Violento asalto en casa de una procuradora

Ocurrió este mediodía. Los delincuentes simularon ser empleados de una empresa de correo privada. Redujeron a la dueña de casa, un niño de 12 años y a la empleada doméstica. Se llevaron dinero y algunos objetos de valor

Violento asalto en casa de una procuradora

Agentes del Comando Radioeléctrico llegaron hasta el lugar y encontraron a las víctimas en medio de un shock emocional.

Foto: Danilo Chiapello

 

Danilo Chiapello

[email protected]

Dos delincuentes jugados dieron hoy un certero golpe en un domicilio de barrio Constituyentes donde, tras reducir y amenazar a sus moradores, sustrajeron dinero y algunos objetos de valor.

Todo ocurrió minutos antes del mediodía en una vivienda de San Lorenzo al 2800, un departamento interno al que se accede por un pasillo, en el que se domicilia la profesional asaltada.

Dos hombres llamaron por el portero eléctrico. Eran de unos 30 a 35 años. Pelo corto y muy bien vestidos. “Eran de ese tipo de persona a la que le abrís la puerta sin ningún tipo de desconfianza”, relató hoy Marta en diálogo con este diario.

Quien fue al encuentro de los desconocidos fue la empleada doméstica, una joven de unos 20 años. Como carta de presentación ambos sujetos dijeron ser del Correo Andreani y que tenían que hacer una entrega. Sin embargo apenas recorrieron unos pocos metros por el extenso pasillo se desató la odisea.

Los rufianes sacaron a relucir armas de fuego y a los empujones llevaron a la empleada. Con una patada abrieron la puerta del departamento, dejando en claro que los buenos modales no eran su fuerte precisamente.

Así sorprendieron a la dueña de casa y a su hijo, de 12 años. “No te muevas y decí dónde está la guita”, fue la orden impartida por los malvivientes.

En tal instancia Marta comenzó a gritar, lo que le agregó una cuota extra de dramatismo al hecho. Fue entonces que los cacos tomaron por los brazos a la mujer y también, por la fuerza, la condujeron hasta el baño de la casa donde la encerraron bajo llave.

Poco después igual suerte corrieron el menor y la empleada doméstica, que terminaron en la misma dependencia.

Entre los muchas cosas que padecieron una de las peores fue escuchar las terroríficas advertencias de los delincuentes. “Quedáte quieta porque te quemo al pibe”, recordaba hoy Marta en medio de lágrimas

Lo que siguió fue la requisa de toda la casa. Dieron vuelta todo el mobiliario y no quedó cajón alguno por revolver. Su tarea le significó hacerse de un botín compuesto por unos 500 pesos, además de un DVD, cuatro teléfonos celulares y una plancha.

Tras reiterar las amenazas los delincuentes se dieron a la fuga. Para esta altura quien se llevó otra sorpresa fue una hermana de la víctima, Alicia, quien prácticamente se chocó con los delincuentes en el ingreso al pasillo.

“Vi que dos hombres salían presurosos pero jamás me imaginé que podían ser ladrones”, relató hoy en medio de la angustia por lo vivido por sus familiares.

 
2_dc.jpg

Una hermana de la víctima se cruzó con los delincuentes en el pasillo de ingreso, justo cuando éstos emprendían la retirada.

Foto: Danilo Chiapello