Planteo para integrar la OIT
Fernández pidió la inclusión del tema laboral en el G-20
El ministro argentino de Economía dijo, ante el comité financiero del FMI, que la flexibilización laboral y la baja de salarios sólo profundizarán la crisis.
De la redacción de El Litoral
Télam
El ministro de Economía, Carlos Fernández, pidió la “participación” de la OIT en las reuniones del G20 y por la “cooperación y coordinación genuina” de la comunidad internacional para superar la crisis.
A su vez, volvió a fustigar contra las mediciones del FMI, pidiendo una “significante disminución” de las condicionalidades del organismo y aseguró que la Argentina “esta en mejor posición” para afrontar esta crisis.
Los dichos del titular de Hacienda fueron dados al disertar ante el Comité Financiero del Fondo Monetario Internacional como parte de las actividades que los ministros internacionales desarrollan en las reuniones semestrales que el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) llevan adelante conjuntamente.
“Nuestro desenvolvimiento macroeconómico construido entre 2003 y 2008 ubicó a la Argentina en una mejor posición para afrontar esta tormenta, proveyendo espacio para desplegar políticas fiscales y monetarias activas”, mencionó el ministro Fernández.
Describiendo la “reducción de la deuda externa pública” -hoy equivalente al 39% del PBI, comparado con el 140% que marcaba en 2003-, el “rol clave” del Banco Central en “contener el impacto de la crisis”, un sistema bancario “bien capitalizado” y la aplicación de paquetes de estímulos, Fernández comentó sobre la situación argentina ante la crisis.
El Ministro presentó el pedido que la presidenta Fernández de Kirchner planteara de incluir a la OIT en las discusiones del G20, sosteniendo que las “reformas estructurales dedicadas a promover la flexibilidad laboral y reducir los salarios, sólo profundizará más la crisis” por lo que la OIT “debe observar su impacto en niveles de desempleo y estar posibilitada de participar en el contexto del G20”.
Menos presiones
Por otro lado, al referirse al rol del FMI en la crisis, Fernández volvió a pedir por una “significante disminución” de las condicionalidades impuestas por el organismo y por la “provisión de asistencia financiera amplia y flexible conmensurada con las necesidades de los miembros”, reconociendo que en “respuesta a su compromiso, el Fondo introdujo una línea de crédito flexible” para facilitar el acceso a los préstamos.
Así como también reiteró la discrepancia argentina en las mediciones que el FMI realiza de las economías nacionales, siendo que las “la políticas macroeconómicas de los países deben ser juzgadas por sus resultados, medidas por su propio impacto de crecimiento, empleo, reducción de la pobreza y estabilidad externa”.
Respecto del G20, se refirió a la necesidad de “fortalecer mayor coordinación macroeconómica y financiera para asegurar un posterior ajuste de tasas de intercambio”, un “mejor rebalanceo de la demanda global” y la “seguridad de amplios y flexibles flujos de financiamientos para países en desarrollo, consistente con la naturaleza exógena de la presente crisis”.
En esa misma línea, el Ministro de Economía expuso la necesidad de “reanudar” las rondas de Doha “debiéndose centrar en las necesidades de los países en desarrollo” para así “arreglar audazmente las asimetrías en el sistema comercial internacional, bajo nuevas reglas que promuevan el crecimiento en todo el mundo”.
