Fue a la altura de San Nicolás...
Hinchas de Vélez rompieron vidrios de un micro sabalero
Iba repleto de socios y pudieron seguir viaje a Buenos Aires para ver el partido.
Prediger mete el salto para ganarle de cabeza a un rival. El 5 sabalero recién tuvo algo de preponderancia en el segundo tiempo, aunque lejos de su nivel.
Foto: Télam
Enrique Cruz (h)
(Enviado Especial a Buenos Aires)
Un hecho lamentable ocurrió durante el viaje de un grupo de socios sabaleros, ya que fueron agredidos por hinchas de Vélez, a la altura de San Nicolás. Concretamente, el micro en el que se trasladaba la delegación de hinchas de Colón se encontró con otro de simpatizantes de Vélez, que viajaban a San Miguel de Tucumán para alentar al equipo de Gareca en el partido de esta tarde ante San Martín, produciéndose una lamentable agresión a piedrazos que rompió varios vidrios del micro lleno de santafesinos. “Fue un hecho que nos preocupó muchísimo, pero, afortunadamente, no hubo que lamentar heridos y los socios de Colón que viajaban en el colectivo pudieron seguir hasta Buenos Aires”, comentó a El Litoral el vicepresidente primero sabalero, Rubén Moncagatta, uno de los dirigentes que acompañó al plantel junto con el presidente Germán Lerche, el tesorero Carlos Marín, Pedrito Eusebio, Osvaldo Pradolini, Juan Carlos Chemes y la infaltable presencia de Roberto Aduriz, un activo colaborador sabalero en Capital Federal.
Contacto con Calandria
Si bien todos los esfuerzos apuntan a este campeonato y a conseguir el objetivo básico de pasar la barrera de los 50 puntos e intentar, si es posible, una clasificación para la Sudamericana (lo cual sería un “regalo” para los hinchas rojinegros que sólo pretendían no sufrir como ocurrió el año pasado), ya se está pensando en la próxima temporada y, así como se admitió que hubo un contacto de la dirigencia de Boca —puntualmente de Carlos Bianchi— por Sebastián Prediger, también Colón piensa en posibles refuerzos.
“Nosotros necesitamos tres o cuatro jugadores, a lo sumo, que sean número puesto. Nada más”, deslizó, a manera de pensamiento en voz alta, un dirigente sabalero. Por ejemplo, se sabe que uno de los jugadores que cuenta con el visto bueno del técnico es Federico Nieto, delantero de Huracán.
Otro sobre los que Colón puso sus ojos es Pablo Calandria, actualmente en Gimnasia de Jujuy y jugando como suplente. Cuenta con 27 años, es jujeño, arrancó su carrera profesional en Huracán y con pocos partidos se fue a jugar a Europa, donde militó en Francia y en España hasta el año pasado.
Habrá que resolver algunas cuestiones vinculadas a jugadores del actual plantel. Por ejemplo, Oyola está a préstamo (su pase pertenece a Independiente) y Nicolás Torres, también (había intenciones de mantenerlo). Habrá que resolver, asimismo, lo de Ferrero, aunque Colón tiene la opción de comprarlo o de prolongar el préstamo.
Banco de pibes
A excepción de Salustiano Candia, el resto de los integrantes del banco de Colón eran pibes surgidos de las inferiores del club. Se produjo el debut de Facundo Bertoglio (enganche, de 18 años) y, además, estuvieron entre los suplentes Marcos Díaz, Lucas Acosta, Facundo Sánchez, Leandro Ledesma y Alfredo Ramírez.
“Bertoglio es el jugador distinto que tiene Colón en sus inferiores. El tema pasa por acertar el momento de hacerlo debutar”, había dicho el “Turco” Mohamed durante la semana. Ese momento se produjo anoche, en un marco poco propicio para el pibe: su equipo perdía, Argentinos cerraba los espacios de mitad de cancha hacia atrás y sus compañeros no le podían dar mucha ayuda porque Colón estaba jugando un mal partido.
Sin embargo, se nota que tiene buen manejo de pelota, transitó mucho por el sector derecho y la pidió siempre. Son síntomas inequívocos de que se trata de un jugador promisorio y al que se deberá seguir de cerca.
Recuperado
Esteban Fuertes le dio un susto al “Turco” en una de las últimas prácticas. Sintió una fuerte contractura en el recto de una de sus piernas y fue duda para el encuentro de anoche.
De todos modos, el Bichi se recuperó y su dolencia física no se notó. Estuvo muy cerca del gol (el centro de Mena le quedó alto y no supo conectar convenientemente para meterla en el arco), pero terminó perdiendo ante la solidez aérea de Scotti y Sabia.
