El paciente de 7 años, mañana vuelve a la escuela en Laguna Paiva

Realizaron la primera cirugía a corazón abierto en el Alassia

Profesionales del Hospital de Niños, del Garrahan y el Cullen formaron un equipo para operar cardiopatías complejas, en pacientes pediátricos. La primera intervención se realizó el pasado 15 de abril.

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El Dr. Martín Irazuzta integra el equipo de especialistas de la nueva sección del Alassia.

Foto: Néstor Gallegos

Mariana Rivera

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Hace tres años, una gripe fuerte, con mucho catarro y tos dio una señal de alerta a la pediatra que atendía a Elio Centurión, un nene de Laguna Paiva, que entonces tenía 4 años. A partir de ese momento, la médica le sugirió a sus padres hacer una consulta con el cardiólogo.

Marcela y Carlos, los papás de Elio, a la semana estaban viendo al especialista. El diagnostico: una comunicación interauricular, es decir, un orificio dentro del corazón que comunica la aurícula derecha con la izquierda. Era una cardiopatía que Elio tenía desde que nació, es decir, congénita, que había operar a corazón abierto.

“No era que le iba a poder pasar algo muy grave, pero había que cerrarla porque podía llegar a tener problemas cuando fuera más grande”, recordó Marcela Luna de Centurión, quien es beneficiaria de un plan social de 150 pesos y su marido es albañil.

De inmediato lo derivaron al hospital Garrahan de Buenos Aires, donde debió anotarse en una lista de chicos que están esperando para ser operados por esa misma patología, con todo lo que eso significa para una familia: desarraigo, tener dinero para llevar, angustias, entre otras cuestiones.

Sin embargo, Elio no debió ser atendido en aquel hospital pediátrico de Buenos Aires. Fue el primer niño intervenido quirúrgicamente en el Hospital de Niños Dr. Orlando Alassia de nuestra ciudad, a partir de la puesta en funcionamiento de la Sección Cirugía Cardiovascular Infantil de ese establecimiento de salud, aunque el proyecto de su creación ya tenía cinco años.

La intervención quirúrgica se realizó exitosamente el miércoles 15 de abril, en el quirófano del Alassia, y estuvo a cargo de un equipo de profesionales médicos y especialistas de los hospitales Alassia, Garrahan y Cullen (Ver El equipo quirúrgico).

El Dr. Martín Irazuzta, en diálogo con El Litoral, explicó que “Elio fue dado de alta al quinto día. Previamente, tenía que tener algunos cuidados y medicación, pero debía ir a cirugía porque no se trataba de una cardiopatía que iba a solucionarse con el tiempo. Luego de la cirugía, vino a control para que le sacáramos los puntos, y tiene que volver al mes para hacer el control cardiológico. La ecografía posquirúrgica dio que el orificio quedó bien cerrado. Después tendrá que realizarse una cirugía correctiva; su corazón volverá a su estado normal y hará una vida normal”.

De vuelta a la escuela

Mañana, Elio vuelve a clases con sus compañeritos del segundo grado de la Escuela Nº 532 Juan Bautista Alberdi de Laguna Paiva. Su mamá, satisfecha y agradecida, dijo que su hijo “está muy bien, aunque sigue en reposo. Le sacaron los puntos de la herida, que si la ves te parece que se hubiera raspado; no parece que fuera una cicatriz de una cirugía de corazón abierto”.

También contó que “no tiene ninguna medicación y sólo debe comer con poca sal. Todavía no tiene el alta del cardiólogo así que no puede salir a andar en bicicleta, a correr o a hacer otra actividad física. Los primeros días había que ayudarlo para incorporarse de la cama, pero ahora ya no. Ayer, por ejemplo, salió corriendo porque la hermana (Agostina, de 5 años) quería jugar a la carrera. A pesar de que está bien, quiero que lleve una vida tranquila, hasta que le dé el alta el cardiólogo. Por eso, sólo dibuja, juega al tetris y adelanta las cosas de la escuela”.

“Elio fue el puntapié inicial de un servicio que va a prestigiar al hospital y a la provincia, ya que tenemos un proyecto concreto y trataremos de hacer casi todas las cirugías que se presenten y derivar la menor cantidad de pacientes posible”, adelantó el Dr. Irazuzta.

En este punto, aclaró que “la Sección de Cirugía Cardiovascular Infantil del Alassia comenzó a funcionar cuando el gobierno nos dio el okey para comenzar a operar al primer chiquito, pero venimos manejando este proyecto desde hace cinco años, aunque por distintos motivos no se daba. Los pacientes eran derivados a Buenos Aires, al hospital Garrahan. Nosotros sólo hacíamos las denominadas cirugías a corazón cerrado, pero ésta que hicimos fue a corazón abierto, más compleja”.

Por último, comentó que “no faltaba nada en el hospital para formar este equipo; había equipamiento y tecnología especial. Sólo faltaba la decisión política con el apoyo económico para comprar los insumos que se utilizan por cada cirugía, que son caros, y poner en contacto a todo el grupo, ya que trabajamos con los servicios de Cardiología Infantil, Terapia Intensiva y Neonatología”.

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EL DATO

El equipo quirúrgico

Los profesionales que integran la Sección Cardiología Infantil del hospital Alassia son: Martín Irazuzta (cardiocirujano del Alassia), Hernán Molina (cardiocirujano del Cullen), Javier Cornelis (cardiocirujano del Garrahan), Francisco Micheli (anestesista de Paraná), Rodolfo Pacce (recuperador cardiovascular del Alassia), Hugo Cardozo (perfucionista del Garrahan) y Alberto Molina (cardiólogo del Alassia).

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ADEMÁS

Postergaciones, temores y agradecimientos

La mamá de Elio recordó que “el Dr. Martín Irazuzta me dijo que iban a hacer todo lo posible para hacer la cirugía en el hospital de Niños de Santa Fe pero que todo dependía de dinero. Había estado juntando la plata para viajar a Buenos Aires y el año pasado me llamó el Dr. Irazuzta diciéndome que la operación se iba a hacer en Santa Fe”.

El primer turno para la cirugía era el 28 de noviembre de 2008, pero Elio tenía fiebre y estaba resfriado, motivo por el cual debió postergarse. Después se pasó para el 20 de diciembre pero también estaba con problemas de salud y “como asumió que tenía que operarse después de que el Dr. Irazuzta nos citó para contarnos todo lo que le iban a hacer en la operación, empezó a ponerse un poco mal”, admitió la mamá.

A fines de febrero, el profesional anunció que a fines de febrero o principios de marzo se iba a concretar la operación, aunque luego se pasó la fecha para los primeros días de abril. Sin embargo, recién se realizó el 15 de abril.

“Yo ya estaba con una incertidumbre porque quería que esto pasara de una vez por todas y el último día laboral antes de Semana Santa me llamaron de Hematología del hospital de Niños diciéndome que tenía que llevar los 12 dadores de sangre para Elio el 13 de abril, ya que el 15 de abril iba a ser la operación”, recordó. Después recibió un llamado del profesional para citarla el martes 14, ya que al día siguiente era la intervención quirúrgica.

A las 8 entró al quirófano y salió a las 11. “Estaba todo dormido, fue horrible verlo. Fue una experiencia horrible lo que vivimos con el papá. Fueron unas horas espantosas para nosotros. Entró bien, corriendo y saltando, lleno de vida, y después lo vimos con esos aparatos, te duele un poco el alma”.

Estuvo en terapia intensiva hasta el día siguiente, “muy dolorido pero fue saliendo gracias a los médicos y las enfermeras. Fue excelente la atención, tanto de los médicos como de las mucamas, los camilleros, de todos. Me vine muy conforme. Fue inexplicable la atención que les dieron, no sólo a mi hijo sino a todos los chicos”, dijo agradecida.

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EN NÚMEROS

4 a 12

niños

de cada 1.000 recién nacidos tienen una cardiopatía congénita.

30%

de estos recién nacidos

poseen esta cardiopatía congénita como parte de un síndrome.

30%

de los enfermos

debe ser operado durante el primer año de vida, alcanzando una buena recuperación. Ésta depende de la severidad de la cardiopatía, de un diagnóstico temprano, de una eficaz y oportuna derivación, de un calificado tratamiento quirúrgico y de un soporte pre y posoperatorio acorde con la calidad de su tratamiento.

50%

de las muertes perinatales

son causadas por cardiopatías congénitas, atribuibles a malformaciones.

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ADEMÁS

Otros casos

El Dr. Martín Irazuzta aseguró que “ya tenemos una lista de más de 10 pacientes para operar pero serán más porque hay muchos en las listas de cirugías programadas del Garrahan que van a venir para acá. Para esta patología que operamos, en el Garrahan están dando turnos para el 2011 y 2012 y se priorizan las urgencias”.

Sin embargo, aclaró que -en una primera etapa- se operarán las cardiopatías con baja complejidad, que incluyen varias patologías y chicos un poco más grandes; y luego las de mediana complejidad, que incorpora a los neonatos, los recién nacidos que no pueden esperar para ser operados. “Pensamos que en un año o menos podríamos estar incorporando otras patologías para comenzar a operar para que se vayan aceitando los otros servicios. Hay que preparar a todo el personal porque se trata de una subespecialidad que requiere otros conocimientos”. Mencionó que “trajimos gente especializada de afuera para la parte de quirófano, enfermería y terapia para capacitar a todo el personal. En un momento, los profesionales del Garrahan no vendrán más porque nuestro equipo ya estará capacitado”.