Ante más de 45 mil personas

Oasis colmó River

La banda de los hermanos Gallagher revalidó sus títulos ganados en la década pasada y demostró que trasciende a las modas.

De la redacción de El Litoral

Télam

Los británicos de Oasis confirmaron anoche que son una de las mejores bandas del mundo, al brindar un espectacular concierto en su cuarta presentación en la Argentina, ante más de 45 mil personas en el estadio de River Plate.

Apoyados en una lista de canciones poblada de hits y de clásicos, esta banda -que inició la ola del brit pop hacia finales de los ‘90- demostró que para sobrevivir a varias modas sólo hay que componer grandes temas y saber tocarlos.

Y es esta versión siglo XXI de Oasis liderada por los hermanos Liam y Noel Gallagher, a la que se sumaron los talentosos Gem Archer en guitarra, Andy Bell en bajo y el baterista Chris Sharrock, la que le dio el mejor viaje a cada canción.

A eso hay que sumarle que quizás Noel Gallagher sea uno de los mejores compositores de su generación y que Liam es, siempre y cuando esté limpio y de buen humor, un gran vocalista. Y para ratificar pergaminos, a Oasis le bastó con arrancar su show con el fenomenal rocanrol “Rock and Roll Star”, de su primer disco “Definitely Maybe” (1994), considerado a estas alturas un clásico.

El efecto fue tal que la gente que esperaba sentada y con algo de frío comenzó a saltar inmediatamente cuando sonó el riff diseñado por Noel, que luego le dio rienda suelta a su Gibson en el hit “Layla” de “Don’t Believe The Truth” (2006).

Lo nuevo y lo viejo

El nuevo disco “Dig Out Your Soul” tuvo su lugar con el primer corte “The Shock Of The Lightning”, un rocanrol con el sello típico de Oasis, en el que se lució el nuevo baterista Chris Sharrock.

Y precisamente el nuevo dueño de los parches fue el encargado de aporrear su redoblante para “Alcohol y cigarrillos”, del primer álbum.

Pegadito sonó uno de los primeros temas compuestos por Liam, “The Meaning of Soul”, incluido en “Don’t Believe the truth”, en el que las pantallas se convirtieron en un gigantesco mar de diapositivas rojas.

La puesta en escena incluyó también la filmación de un volcán en erupción y los mares de lava que arrojó cuando la banda tocó “To Be Where There’s Life” de su último CD, mientras hermosas fans disfrutaban las canciones.

Noel cantó otra canción del disco nuevo, “Waiting For The Rapture”, que arrancó con unosarreglos de piano y concluyó con muy buenos juegos de guitarra.

Para la hermosa balada “Masterplan”, Noel dijo algunas palabras en castellano, presentó al nuevo baterista y pidió cantarle el feliz cumpleaños al tecladista Jay Darlington. Luego, Gem Archer mostró sus dotes de guitarrista con un exquisito solo en la balada “Songbird”, una de las primeras canciones compuestas por Liam.

Cuando promediaba el show, la banda se despachó con “Morning Glory”, uno de los hits de su segundo disco, que gracias a su poderoso estribillo, le permitió a los británicos llevarse todo puesto en el Monumental.

Oasis colmó River

Liam Gallagher conquistó con sus melodías vocales y su arrogancia, siempre con las manos en la espalda.

Foto: DyN