El técnico tatengue, después del empate con Quilmes...

Matías Arrúa entró bien y fue una buena alternativa a la hora de manejar la pelota.

Foto: Gentileza El Sol de Quilmes

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Buenos Aires)

Varios dirigentes esperaban la salida de los jugadores, con el micro estacionado casi en el mismo acceso a los vestuarios de la cancha de Quilmes. Había satisfacción. O mejor dicho, cierto alivio en el rostro de César Donna y Augusto Borlle, quienes, acompañados por Marcelo Gorosito, aguardaban el momento del regreso.

Ariel Catinot comenzó la charla post-partido explicando el motivo de la salida de Walter Yacob. “Me pidió el cambio porque tenía una contractura en el aductor. Si él quería seguir jugando, yo no lo iba a sacar porque la idea era no tocar el equipo, mucho menos en el fondo. Entonces, como no tenía defensores en el banco, empecé a mover las piezas para jugar con tres y ganar en presencia en el mediocampo”, dijo el técnico tatengue, que al cabo del primer tiempo “acompañó” en su salida de la cancha a Alexis Fernández, pues también fue expulsado por Giannini en un episodio muy particular.

—Te estás anotando varios debuts en tu haber Titi...

—Esa es la idea, la de probar a los chicos del club para ver quiénes están aptos para jugar en el campeonato que viene. Hoy supimos resolver una situación difícil, que fue el primer gol al minuto de juego. Los muchachos me dijeron que fue offside, yo no lo sé porque no vi bien la maniobra. Y después, se pusieron 2-1 cuando ya no teníamos a Alexis en la cancha, y también supimos de qué manera emparejarlo.

—Matemáticamente no agrega nada, pero tiene un valor anímico importante lo que se consiguió, ¿no te parece?

—Por supuesto, por todo lo que vivimos durante la semana y dentro mismo del partido. Nos hicieron un gol al minuto, nos echaron un jugador al final del primer tiempo y levantamos dos resultados adversos. Pero venimos creciendo partido tras partido...

—Es cierto, hay una mejoría futbolística que se advierte Ariel...

—Lo vemos nosotros y lo ve la gente también. Lástima que no nos acompañen mejores resultados. Pero el fútbol es así. Los partidos no se merecen, se ganan, y los puntos no se merecen, se tienen o no se tienen. Estábamos respondiendo bien en defensa, pero hoy nos hicieron dos goles. En contrapartida, metimos dos goles, cosa que hacía mucho que no hacíamos.

—Ahora sí, hablemos del árbitro: ¿qué pasó? ¿Por qué te echó?

—Cuando terminó el primer tiempo me equivoco, lo espero y le digo que me parecía que se estaba equivocando faltándome el respeto, porque yo soy un laburante igual que él, por más que me llame Catinot y que todavía no sea nadie como entrenador. Entonces, él me dijo que me quedara en el vestuario y yo le contesté que está bien, pero que él se tenía que quedar en el vestuario conmigo. Ahí reaccionó de mala manera y yo le tiré agua en la cara, pero no lo insulté en ningún momento.

—¿Te arrepentís por lo que hiciste?

—Sí, porque es un mal ejemplo. Es la primera vez que me “saco” y lo hice porque me dio la impresión de que los fallos divididos eran todos para ellos y que no medía con la misma vara las infracciones.

—¿Y la expulsión de Alexis Fernández?

—Nos dio a todos la sensación de que no era para tanto, con una amarilla se arreglaba.

Se cruza Fontana ante un rival mientras que Acosta observa la maniobra. El volante tatengue se fue acalambrado.

Foto: Gentileza El Sol de Quilmes

—Hablame de Broin y Amerisse, los nuevos debuts...

—Es el momento de ponerlos. Cuando se acalambró Rodrigo Acosta decidí ponerlo a Broin porque el único que podía jugar de “5” era Zapata. Y luego lo puse a Amerisse, porque necesitaba a alguien que bajase pelotas en el área. Federico Broin tiene mucha dinámica para el ida y vuelta, pero hay que trabajar un poco más con él en la vuelta, porque se pasa de revoluciones.

—Hace un par de semanas, decías en Tucumán que no te candidateabas como entrenador para la temporada que viene. ¿Seguís diciendo lo mismo?

—Sí, claro, sigo diciendo lo mismo. Lo único que te puedo agregar es que quiero ser una posibilidad más para los dirigentes, otra alternativa. O sea, quiero que los dirigentes piensen en mí y me tengan en cuenta por más que luego elijan a otro. A mí, esto que estoy experimentando me sirve muchísimo, pero lo más contento es que le estamos siendo útil al club, porque lo veo en la gente y sé que los dirigentes están trabajando con más tranquilidad.

—¿Hablaste con ellos?

—No, esta semana tengo una reunión pendiente con Ponce y por allí lo tengo más claro. Pero quédense tranquilos, porque si me llegan a elegir o me dicen que me tienen en cuenta para el proyecto del torneo que viene, se me va a notar la alegría en la cara y serán los primeros en darse cuenta.

Jorge Torres fue generoso en el despliegue y si bien no desequilibró con su habilidad, marcó un golazo que le dio a Unión el 2-2 definitivo.

Foto: Gentileza El Sol de Quilmes.

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Si hay que elegir una figura en Unión, la elección pasa por Martín Zapata. Corrió como siempre, marcó un gol apareciendo por sorpresa en el área y terminó jugando de “5”.

Foto: Télam

Tres bajas para el viernes

El próximo viernes a las 21, Unión recibirá en su cancha la visita de Defensa y Justicia con tres bajas confirmadas en el equipo.

Alexis Fernández fue expulsado en el partido de ayer, mientras que Yacob y Márquez llegaron a las cinco amarillas y tampoco estarán presentes.

Recordemos que De la Fuente ha sido sancionado por diez fechas y que ayer cumplió la segunda. A propósito, es muy difícil que se pueda rescindir su contrato antes de la culminación del mismo (30 de junio venidero), en función de que ese hecho impediría que el futbolista siga cumpliendo con su sanción. De la Fuente no podrá volver a jugar hasta la quinta fecha del torneo que viene.

Como consecuencia de ello, los dirigentes esperarán la resolución del tema Bottaniz (llegaría pasado mañana a Santa Fe) y el futuro deportivo de la institución, antes de decidir qué se hará con De la Fuente, quien antes de lo ocurrido en Tucumán y la sanción recibida, era uno de los que figuraba en la lista de posibilidades para renovarle el vínculo contractual.

13

expulsiones

ha sufrido Unión en lo que va de la temporada, a un promedio de una cada dos partidos y medio. Ayer, la víctima fue Alexis Fernández en una acción que pareció más riesgosa de lo que fue.

Se cortó. Con el empate de ayer en terreno “cervecero”, Unión cortó una racha de seis derrotas consecutivas jugando en carácter de visitante.

56

días sin ganar

son los que lleva Quilmes, con tres empates (consecutivos y de local) y cinco derrotas. En ese lapso, pasaron tres técnicos: el “Beto” Pascutti, Ricardo Kergaravat y ahora el “Chaucha” Bianco.

Deuda. Los jugadores de Quilmes fueron llegando de a uno al estadio Centenario, aproximadamente dos horas antes del comienzo del partido. Es que el plantel no se concentró porque le deben dos meses y medio de sueldo.

2

debuts

fueron los que ordenó Catinot en el encuentro de la víspera. Uno de ellos fue el de Federico Broin, hijo del profe Fabián, que jugó de volante por derecha. El otro fue el del gigante Nicolás Amerisse, un lungo de 1,92 que jugó de punta.

Poco público. El partido se jugó ante unos 3.500 espectadores, aproximadamente, que parecieron menos en un estadio con tanta capacidad. De lo que no se pudo conseguir información, es de la cantidad de populares vendidas. Ante la CAI, se expendieron sólo 100 boletos.

Raro. El presidente de Unión, Miguel Ponce, señaló que “no voy a parar hasta dilucidar qué fue lo que pasó con el robo a los jugadores. Tuvimos varios encuentros con la policía y le pedí por favor a Arrieta y a Peralta que hicieran la denuncia. Ninguno de los dos accedió. Sorprende la situación porque ellos vivían en un country privado, que tiene seguridad y vigilancia”.

Futuro

de Quilmes

La situación de Quilmes no deja de ser preocupante para su gente. Se comenta el interés de Aníbal Fernández, el ministro de Justicia de la Nación, de tomar las riendas del club. Fernández es un reconocido hincha quilmeño, nacido, precisamente, en esa ciudad del sur bonaerense.

Amistades. A pesar de que estuvo poco tiempo en Unión (sólo cinco partidos en 2003), José María Bianco y sus colaboradores cosecharon amistades en Unión. Se pudo ver al doctor Battaglia y a Sergio Magnín, entre otros, conversar entretenidamente con el técnico quilmeño.