La jornada del martes fue positiva para los argentinos

Esfuerzo superior. Leo estuvo a la altura de las circunstancias. Jugó un partidazo y derrotó al decimosexto tenista del ranking.

Foto: Agencia AFP.

 

Redacción El Litoral

[email protected]

Finalmente, no sólo Del Potro festejó un triunfo en la jornada de martes. Es que tras el cierre de nuestra edición de ayer, se produjeron otras tres victorias albicelestes, todas de muy buena factura.

Juan Mónaco se impuso al chipriota Marcos Baghdatis (que está intentando volver a los primeros planos del tenis mundial) con parciales de 6-2, 6-3 y 6-4, en tanto que Máximo González hizo lo propio con el estadounidense Mardy Fish, con números finales de 6-3, 1-6, 6-4 y 7-6 (4).

Sin embargo, el resultado más sorpresivo es sin dudas el que logró el correntino Leonardo Mayer, de 22 años recién cumplidos, que derrotó en sets corridos al norteamericano James Blake (decimoquinto favorito) por 7-6 (6), 7-5 y 6-2. Por último, Brian Dabul fue el único derrotado, que cayó ante el ruso Sergey Stakhovsky con parciales de 4-6, 7-5, 7-6 (2) y 6-3.

Lo que quedó

Juan Martín Del Potro quedó muy conforme tras su debut, que resolvió en cómodos sets corridos. “Me siento muy bien, vengo haciendo buenos torneos y estoy perfectamente adaptado al polvo de ladrillo. Igual hay mucho por mejorar. Respondí en los momentos clave, mi servicio fue bueno, especialmente el primero”, destacó sobre su actuación.

“La idea es mejorar mi juego en polvo, tratar de subir más a la red, volear mejor. Ir a buscar los puntos, es algo que hay que hacer para estar entre los mejores”, puntualizó, antes de cerrar su conferencia, comentando que le regaló una camiseta de Boca al suizo Roger Federer.

Bien por “Machi”

El triunfo de Máximo González fue tan espectacular como sorpresivo. Tras consumarlo, el tandilense declaró que “fue un partido difícil en un cuadro muy difícil y por suerte gané. Voy creciendo y tomando confianza a este nivel. Aquí hay que salir a jugar de igual a igual”, destacó, para luego recordar que éste “es mi triunfo de mayor nivel. El año pasado le gané a Karlovic, pero así, a este nivel, es mi mayor triunfo”, confirmó. El próximo rival será el italiano Andreas Seppi.

Por último, Mónaco señaló que estar en este certamen “me motiva”, y que no le da trascendencia al hematoma que presenta su muñeca y que le produce bastantes dolores. “Me preocupará después del torneo”, agregó Mónaco, quien señaló que ha trabajado para evitar los “altibajos y los baches mentales” y confesó que cree que está llegando a su mejor tenis.

Un León

Leonardo Mayer es un chico sencillo. Lo primero que soltó tras su enorme victoria ante James Blake fue que “no cambio Champs Elysées por la costanera de Corrientes”.

“Me propuse jugar y disfrutar, traté de que la gente o el estadio no me achicaran. Digamos que soy un jugador de fondo, con un buen saque y que me gusta atacar mucho. Y creo que lo hice a la perfección”, dijo Leo.

Y va por más. No se achica, ni loco. “Ahora me toca enfrentar a Tommy Haas y te juro que quiero jugarle ya mismo. Le gané a Blake, así que imaginate...”, cerró el Yacaré.

Perdió la única esperanza africana

Chanelle Scheepers, la única esperanza africana en Roland Garros, dejó sin representación a ese continente tras perder en primera ronda frente a la rusa Elena Dementieva, cuarta cabeza de serie del torneo, por 6-4 y 6-3.

Una hora y 23 minutos duró el tenis africano individual en el Grand Slam de París, el tiempo que la sudafricana, 149 del mundo, tardó en rendirse frente a la cuarta mejor tenista del planeta y finalista en este mismo torneo en 2004.

La oriunda de Harrismith, una pequeña localidad cercana a Johannesburgo, lo intentará el año que viene, comentó en una conversación con periodistas en la que explicó que tuvo que emigrar a Houston (Estados Unidos) hace ahora cinco años, cuando contaba veinte primaveras, para luchar por entrar en el tenis profesional.

“El dinero es un problema”, lamentó esta jugadora blanca que reconoció que el problema de África es la “falta de estructuras para entrenar, viajar...”. Cuando era junior había buenos tenistas —recordó Scheepers— quien aseguró que “si alguno de esos jugadores tuvieran la mitad de oportunidades que otros”, probablemente habría más africanos sobre la tierra batida de Roland Garros.

Lejos quedan los tiempos en que otros africanos brillaban en París, como cuando el marroquí Hicham Arazi alcanzó los cuartos de final en 1997 (cuando cayó contra el español Sergi Bruguera), y en 1998 (cuando cedió ante el francés Cédric Pioline).

También en 1997, la sudafricana Amanda Coetzer alcanzó la semifinal del Abierto galo, hazaña que ya había conseguido en 1968 su compatriota Annette Du Plooy. Pero Scheepers no es optimista de cara al futuro, a pesar de que su país vaya a albergar el próximo Mundial de Fútbol. “Impulsará el fútbol, el rugby y quizá el cricket, pero no el tenis”, aseguró la tenista, que viaja una o dos veces al año a Sudáfrica, pero que no compite en ese país desde hace siete años.

/// EL DATO

Números de hoy.

A continuación se detallan algunos resultados de la jornada, hasta el cierre de nuestra edición: Dinara Safina (1, Rusia) a Vitalia Diatchenko (Rusia) 6-1 y 6-1; Na Li (25, China) a Timea Bacsinszky (Suiza) 6-1 y 6-4; Victoria Azarenka (9, Belarús) a Kristina Barrois (Alemania) 7-6 (1) y 7-5; Andy Murray (3, Escocia) a Potito Starace (Italia) 6-3, 2-6, 7-5 y 6-4; Fernando González (12, Chile) a Rui Machado (Portugal) 6-3, 6-2 y 6-3; Nicolás Almagro (31, España) a Ernests Gulbis (Latvia) 6-7 (4), 7-6 (1), 6-3 y 6-2.