Huracán se quedó con el clásico
Alimenta su sueño de campeón
Redacción de El Litoral
Télam
Huracán, sin jugar en buen nivel, pero con la convicción de los equipos que saben lo que quieren, le ganó de visitante el clásico a San Lorenzo por 1 a 0, en partido jugado en la cancha de Boca Juniors, y alimenta el sueño de consagrarse campeón del torneo Clausura.
El único gol lo anotó el zaguero central Paolo Goltz, a los 38 minutos del primer tiempo, con un preciso cabezazo al palo derecho de Hilario Navarro.
Huracán, con la victoria, llegó a 35 puntos y se convirtió en el único escolta de Vélez, que ostenta 36 unidades. Lanús, que perdió la punta, marcha tercero con 34.
El equipo dirige Angel Cappa, que sólo depende de sí mismo para ser campeón, recibirá en la próxima fecha a Arsenal de Sarandí y en la última visitará a Vélez en el estadio José Amalfitani de Liniers.
Los dos equipos pelean por uno de los dos lugares que quedan para jugar la Copa Sudamericana. Tigre suma 59 puntos, San Lorenzo 57, Huracán 55, y Colón y Estudiantes 54. El primer tiempo tuvo todos los ingredientes de un clásico en el que se jugaban mucho más que tres puntos: mucha marca y poco fútbol.
El equipo que dirige Simeone tuvo algunas distracciones en defensa, como la de los 38 minutos, que derivó en la apertura del marcador.
Un tiro de esquina desde la izquierda de Defederico encontró a Goltz solo dentro del área que con un certero cabezazo al palo derecho de Navarro estableció el 1 a 0.
El tanto del zaguero central (el tercero en el torneo), que marcó un punto de inflexión en el partido, posibilitó un mejor juego de Huracán, pero a la vez hizo reaccionar a San Lorenzo. De hecho el conjunto de Simeone tuvo la posibilidad del empate en una jugada que inició Solari por la derecha, la continuó Silvera dentro del área y finalmente la desperdició Bergessio.
El segundo tiempo tuvo otro ritmo, no mejor juego, pero sí más emociones y fricciones. Los técnicos movieron los bancos para mejorar los rendimientos de sus equipos. Cappa mandó a la cancha a César González por Toranzo (jugó con la cancha cambiada y le costó pararse en el campo de juego) y Alan Sánchez por Pastore y Simeone a Fabián Bordagaray por Juan Manuel Torres, a Jonathan Santana por Solari y a Bruno Fornaroli por Gómez.
San Lorenzo tuvo cerca del empate otra vez, pero el brillante movimiento y posterior remate de Silvera pegó en el palo izquierdo de Monzón. Ahí se sepultaron las ilusiones del conjunto de Boedo.
El cuarto de hora final mostró la garra de San Lorenzo y la displicencia de Huracán. Igualmente el resultado se mantuvo inalterable y la fiesta se desató en Parque de los Patricios.