Al margen de la crónica

El “nuevo” Parque Garay

La ciudad de Santa Fe está fragmentada socialmente y las grandes desigualdades de los últimos años no han hecho más que profundizar esas grietas. La tarea de articular la sociedad debe ser una de las principales de los gobernantes y para ello deben utilizar una serie de políticas a su alcance, propendiendo al bien común y al bienestar.

En estas horas, el municipio presenta un renovado Parque Garay que ha sido rejuvenecido con un proceso de chapa y pintura interesante. Uno de los espacios verdes más grandes de la ciudad, pensado hace más de 75 años, sufrió un estado de deterioro y abandono desde hace una década. En el medio, la inundación del 2003 lo dejó con más de un metro de agua durante varios días y todas las consecuencias en el deterioro urbano.

Limpieza de los lagos y canales, baches tapados, canteros demarcados, barreras eliminadas y calles con apertura al oeste, poda de plantas, cambios de luminarias, colocación de cestos en toda su extensión y hasta un nuevo trazado para el velódromo son las principales novedades que se pueden apreciar. Quedan cosas por hacer como dotar de playones a las escuelas de la zona que realizan las horas de actividad física en el lugar y dotarlos de vestuarios y canillas para los alumnos.

La inversión municipal fue importante en recursos económicos y humanos. Ahora llega la hora del cuidado del espacio, tarea que debe ser de toda la ciudadanía y en primer lugar de los vecinos que lo han tomado como un basurero para depositar todo lo que sobraba en sus domicilios.

La ubicación privilegiada hace que el paseo sea el puente entre el centro y el oeste de la ciudad y es el lugar que puede servir de encuentro a dos sectores sociales y a dos formas diferentes de vivir. La puesta en escena sirve, ahora habrá que esperar la respuesta de los vecinos para hacer el Parque un lugar de encuentro.