Mayoristas y minoristas se disputan un producto caro e insuficiente

La escasez de gas en garrafas

desata pujas en la distribución

En los hogares sin red de gas natural el problema se repite cada invierno. Minoristas regionales amenazan con bloquear una planta petrolera distribuidora en Puerto General San Martín, en el sur. Reclaman que entreguen el fluido a los fraccionadores.

De la redacción de El Litoral

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La franja de hogares que paga puntualmente su factura de energía eléctrica y no tiene acceso a la red de gas natural sufre todos los años el mismo problema: cuanto más frío, más dificultades para contar con garrafas o cilindros de gas licuado de petróleo.

Las familias que dependen del gas envasado para calefaccionar sus viviendas o disfrutar del agua caliente quedan expuestas a los vaivenes del mercado: cuando cae la barra de mercurio del termómetro sube la demanda en forma exponencial, pero la oferta no la cubre y el precio trepa.

La escasez ha dejado a distribuidores minoristas de “tubos” y garrafas sin las cantidades necesarias para atender a sus clientes. El Litoral conversó con varios de ellos y la respuesta de esos comercios relativamente chicos fue similar: pintaron un panorama de preocupación y hasta de desesperación.

Los distribuidores de gas envasado son el último eslabón de una cadena de comercialización que comienza con los mayoristas y termina con la ventanilla de atención al público, al que finalmente llegan las quejas. “Los clientes creen que no les queremos vender y que especulamos con guardarnos garrafas para después venderlas más caras... La verdad es que el mayorista no nos da lo que le queremos comprar...”, dijo esta mañana un comerciante minorista.

“Todo el año esperamos el invierno para trabajar bien, y resulta que ahora el mayorista no nos vende lo que el cliente nos reclama. Ando con una combi cerrada, sin el logo, para distribuir las pocas garrafas que me llegan, porque si me ven otros clientes a los que no puedo atender me dicen de todo...”, confesó otro minorista de una localidad pequeña, marginada del servicio de gas natural por redes.

“Del problema del gas envasado no habla nadie... Todo el mundo se queja por el aumento del gas natural, pero de las garrafas nadie dice nada. Este problema comenzó hace ya más de 20 días, yo les pedía 20 unidades y me querían vender 10... Tuve que ponerme firme y amenazar con no comprarles nunca más a los mayoristas si no me vendían lo que sé que la gente va a necesitar”, comentó a El Litoral el titular de un comercio pequeño, de pueblo, que provee de casi todo lo elemental a un distrito del interior del departamento La Capital.

La situación es distinta para los mayoristas o los minoristas asociados con las grandes cadenas de comercialización que operan en todo el país. En esos negocios hay gas envasado y sostienen que el faltante se debe a que los comercios minoristas carecen del número de envases necesarios, un argumento que desmiente cada verano (cuando las ventas de mayoristas a minoristas no requieren los pesados envases).

Puja y piquetes

Distribuidores de gas envasado regionales -que atienden a minoristas- protestaban esta mañana en Puerto General San Martín, donde se encuentra una planta petrolera.

Los manifestantes reclaman que las industrias petroleras entreguen el gas licuado a los fraccionadores, para evitar el desabastecimiento a los usuarios y la baja de su actividad comercial.

Los distribuidores de garrafas se manifestaron en la planta de Totalgaz, en la localidad ubicada al norte de Rosario.

“Hace dos días que estamos teniendo problemas y no podemos cargar”, dijo un representante de los distribuidores a medios de la ciudad del sur. Los manifestantes amenazan con pasar de la protesta al piquete y el corte de rutas.

Cortes a 300 industrias

El diario El Cronista Comercial informa en su edición de hoy que por la ola de frío hubo nuevas restricciones en el servicio de provisión de gas por redes a las industrias.

La decisión de asegurar el combustible a los hogares, que aumentaron hasta 50% su consumo habitual debido a las bajas temperaturas, significó que más de 300 industrias sufrieran cortes ayer.

Para las empresas que tienen contratos de suministro denominados “interrumpibles”, el corte fue total. Se trata de los clientes que prefieren pagar un precio menor a cambio de aceptar hasta 60 días de cortes al año y ayer tuvieron apenas un 70% del gas que necesitan para llevar adelante sus procesos productivos, sostiene el diario capitalino.

Las empresas comenzaron a enviar las notificaciones de cortes a principios de la semana, “la más complicada en lo que va del año en materia de cortes”. Sin embargo, “comparadas con las crisis de 2006 y 2007, las restricciones son mucho menores”, dice El Cronista citando como fuente a una distribuidora nacional.

La escasez de gas en garrafas desata pujas en la distribución

Con el descenso del termómetro crecen las chances de que haya más desabastecimiento. Ya lo sufren los pequeños comercios y los pueblos más alejados.

Foto: Archivo/Télam

/// EL DATO

El GLP

El gas licuado de petróleo o GLP se obtiene del proceso de refinación del petróleo y de Plantas Recuperadoras de Gas Natural. Puede ser butano, propano o una mezcla de ambos. El gas es inodoro e incoloro. Para su comercialización -por obvias razones de seguridad- se le agrega un odorizante que le confiere olor pestilente para poder identificarlo. El propano comercial es una mezcla de propano, propileno y otros compuestos minoritarios (etano, butano, etc.). Puede tener hasta un máximo de 30% de butano. El butano comercial es una mezcla de butano, butilenos y otros compuestos minoritarios (propano, pentanos, etc.). Puede tener un máximo de 50% de propano.

4 millones

de hogares

utilizan en la Argentina el gas envasado de garrafas de 10 ó 15 kg, o los “tubos” (cilindros) de 45.