Mientras gana tiempo con el Indec

Señales de Boudou que apuntan a

mercados y organismos financieros

Habló de canjear o recomprar la deuda, en especial la que se actualiza con inflación. Dejó una puerta abierta para ir al FMI sin condicionamientos y para arreglar con el Club de París.

De la redacción de El Litoral

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DyN/Télam

Los bonos de la deuda en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires continuaron ayer sorprendiendo al mercado movidos ahora por la decisión del gobierno de impulsar un canje o recompra de deuda. El Par en pesos escaló 6,33 por ciento a 30,20, mientras que el Discount en la misma moneda creció 5,98.

Por su parte, el Boden 2014 trepó 4,22 por ciento y el Bogar 2018 repuntó 4,47. A la hora de indagar cuáles títulos resultan los más atractivos del momento, los expertos señalan que las opciones estuvieron repartidas tanto en pesos como en dólares.

El mercado respondió así a las declaraciones del ministro de Economía, Amado Boudou, sobre la posibilidad de que el Estado compre la deuda emitida en bonos que se actualizan con el índice de inflación. El gobierno nacional parece marchar hacia el fin de los números dibujados en el Indec, pero busca ganar tiempo antes de sincerar las cifras que encarecerían su deuda.

Boudou reconoció que no está definido si realizará una recompra o un canje, porque precisó que “hay distintos títulos y son diferentes los tenedores también”. Por otra parte dijo que siempre está en evaluación un acuerdo con el Club de París para cancelar la deuda de 6.700 millones de dólares, y también afirmó que no se descarta un acercamiento al Fondo Monetario Internacional (FMI), pero lo condicionó a la no realización de planes de ajuste a cambio de financiamiento, como sucedió durante los ‘90.

“Muchas veces para otorgar financiamiento se han impuesto planes de ajuste, que ya sabemos cómo terminaron. Fueron desastrosos para la Argentina”, subrayó Boudou, quien afirmó: “No decimos que no vamos a ir al Fondo, pero en esas condiciones no”.

Destacó que la idea es “llevar al Fondo la voz de muchos países que están embarcados en posiciones similares, para ser escuchados como parte de esa organización”. En ese sentido, señaló que “existen países que llegaron a acuerdos con el Club de París, sin la intervención del Fondo”, y estimó que “es un camino que vale la pena explorar”.

Dólar controlado

Por otra parte, Boudou volvió a descartar cambios fuertes en la política cambiaria del gobierno. Dijo que el dólar “no es de un sector, sino de toda la sociedad”, en respuesta a sectores exportadores que piden encarecer el tipo de cambio, lo que perjudicaría el consumo interno.

“Sabemos que hay un tipo de cambio que es preferido por un sector, pero perjudicaría a otro, y el trabajo del gobierno es tratar de beneficiar a todos”, enfatizó el ministro.

En cuanto al aumento de controles para la compra de dólares, señaló que “es un seguimiento fiscal para ver cómo una persona que no tiene ingresos puede comprar esa cantidad de dólares”.

“No tiene nada que ver con controles en el mercado de cambio. Lo único que se va a hacer es el seguimiento de la posición fiscal de las personas que llevan la compra de dólares como se hace con cualquier cuestión fiscal”, remarcó Boudou.

/// EL DATO

Reconocimiento

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner admitió como “válida” la crítica que algunos realizan por “no haberlo hecho antes” los cambios en el Indec. Durante un acto en la Casa Rosada aclaró que se han superado tiempos de “crispación” y que es “el momento adecuado para dotar de absoluta transparencia al sistema” estadístico nacional. “Me siento una presidenta de cuentas claras”, subrayó.

Una confianza condicionada

Los analistas financieros admiten que los cambios en el Indec podrían ofrecer buenos resultados, pero advierten que el camino está diseñado para ganar tiempo mientras la Casa Rosada recupera la deuda que se actualiza con la inflación. Sin embargo, al igual que en varios sectores, el crédito abierto a la normalización está aún condicionado por lo que debe demostrar la gestión del nuevo ministro.

Los industriales nucleados en la Unión Industrial Argentina (UIA) admitieron que si los cambios en el Indec son de orden “cosmético” sería una “desilusión” para el sector. Así lo reconoció el presidente de la entidad, Héctor Méndez.

“Si se convierten en cosmética sería una desilusión. Después de tanto tiempo que venimos bregando toda la sociedad por esta historia del Indec, que alguien se siente a hablar y acepte que las estadísticas no son las que deberían ser, y esa persona sea nada menos que el ministro de Economía, es toda una señal”, dijo el empresario.

Abraham Gak, economista del Plan Fénix, advirtió que “el Indec debería funcionar con autarquía” pero admitió que “estamos en un comienzo y habrá que esperar para darse cuenta si hay un cambio significativo. La función fundamental que va a tener el comité (o consejo académico), será evaluar cómo funciona”.