El ministro responde
Farías aseguró que la provincia no
adeuda ayuda social a San Javier
De la Redacción de El Litoral
El ministro de Desarrollo Social de la provincia, Pablo Farías, negó enfáticamente que el gobierno le adeude algún tipo de partida destinada a copa de leche o comedores comunitarios a Cáritas San Javier.
“Es imposible que le debamos algo cuando no tenemos ningún convenio ni compromiso con esta institución”, dijo Farías, saliendo al cruce de declaraciones que el párroco de esa ciudad costera, Sergio Capoccetti, formulara al diario El Litoral de Santa Fe.
“La información que tenemos es que los comedores y copas de leche que funcionan bajo la órbita de Cáritas San Javier estarían siendo atendidas con aportes que les otorga Cáritas Arquidiocesana, dependiente del Arzobispado de Santa Fe”, precisó el ministro.
“Las demoras en los envíos se deberían a la falta de rendiciones de la institución de San Javier a Cáritas Central, a quien el Ministerio de Desarrollo Social hace llegar en tiempo y forma los fondos convenidos”, concluyó Farías.
Como se recordará ayer, el cura párroco de San Javier Sergio Capoccetti a través de una carta arremetió contra el gobierno provincial al hacer público que estaba atrasado en las partidas para copa de leche y comedores de Cáritas.
El sacerdote señaló que la semana pasada recibieron la partida de dinero que el Poder Ejecutivo provincial les envía para atender las copas de leche y comedores de Cáritas.
“Este es un convenio antiguo. Acción Social con alguno de sus programas nos envía un aporte que debemos traducir en servir una merienda o un plato de comida según corresponda”, continúa diciendo.
Por cada niño y por cada día que se le da este servicio, la provincia aporta 0,50 (cincuenta centavos) para la copa de leche, y 1,20 (un peso veinte) para el comedor.
“Esta miseria no sería nada si el aporte llegaría con puntualidad. El último aporte que hemos recibido corresponde al mes de octubre del año pasado, y es el tercero que recibimos este año”, había señalado el religioso a El Litoral.
“En estos momentos tenemos una deuda acumulada de aproximadamente 4.500 pesos en distintos negocios de la comunidad, comercios que generosamente nunca nos exigieron plazos de pago. Es muy triste pensar que así no podremos seguir con este servicio. Sería lo último que haría, dejar sin el plato de comida o leche a los más necesitados. Pero es más triste ver el abandono que el Estado provincial hace de los más pobres”, insistió el cura que cumple misiones pastorales en San Javier.