U$S 2.500 millones

Viene plata del FMI pero esta vez no hay condiciones

El Fondo Monetario Internacional (FMI) distribuirá a fines de agosto, entre sus países miembros, una asignación general de derechos especiales de giro (DEG) por 250.000 millones de dólares, de los cuales Argentina percibirá alrededor de 2.500 millones de dólares.

El giro de divisas forma parte del paquete de medidas impulsado por los presidentes del Grupo de los 20 (G-20) para enfrentar la crisis financiera internacional, con el objetivo de proporcionar liquidez al sistema económico mundial, complementando las reservas de los países miembros.

Los 2.500 millones -por ser derechos de giro- se realizarán a través del Banco Central, pero como el Estado argentino es el accionista será finalmente el gobierno quien decida el destino que se le dará a esos fondos: el pago de obligaciones, el incremento de las reservas o un mix.

El FMI detalló que “los mercados emergentes y los países en desarrollo obtendrán el equivalente a casi U$S 100.000 millones de la asignación general, destinándose más de U$S 18.000 millones de dicha cantidad a países de bajos ingresos”.

El DEG es un activo de reserva internacional creado en 1969 por el FMI para complementar los activos de reserva existentes de los países miembros, y son asignados en proporción a las cuotas de éstos dentro del organismo. Además el DEG sirve como unidad de cuenta del FMI y su valor está basado en una cesta de monedas internacionales.