Coyuntura

El horizonte industrial en duda

En su último reporte sobre el sector, la UIA muestra un progresivo amesetamiento de la caída. Pese a ello, advierte que se empieza a comparar contra aquellos meses de 2008 en los que comenzó a acentuarse la crisis.

Félix Canale

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De acuerdo con el último informe del Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina, la actividad fabril morigeró su caída durante el mes de junio, mostrando un retroceso de 3,5 por ciento, inferior al anotado en mayo (-10,9 %) y abril (-9,6 %). La curva en rojo también se suaviza al comparar el primer trimestre del año (-9,4 %) con el segundo, que registró una caída de 8,1 por ciento.

En términos absolutos -dice el documento-, el nivel de producción se ubica levemente por encima del de marzo, abril y mayo. En este sentido, se confirma una tendencia a la estabilización de la producción, a niveles inferiores a los del año pasado, pero algo superiores al piso de febrero del corriente. En términos desestacionalizados, se observó un crecimiento de 2,1 % con respecto a mayo, acumulando así una recuperación de 5,7 % sobre febrero.

La entidad indica que no obstante este comportamiento, la mejora en los resultados de junio 2009 obedeció principalmente al bajo nivel relativo de actividad registrado en junio del año pasado, particularmente en la industria alimentaria, consecuencia del conflicto entre el gobierno y el sector agropecuario.

Alimentos

Según estimaciones de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios, la producción de alimentos y bebidas presentó una suba interanual de 22,5 % en junio, principalmente por la recuperación de molienda y carnes respecto de lo que fuera la caída un año atrás por el conflicto previamente mencionado. En el acumulado, se registró una suba de 3,9 % en el primer semestre del año.

Entre las principales subas, se destacaron las que hubo en la producción de aceites, carnes rojas y aviar y molienda de trigo. No obstante, según referentes del sector, esta dinámica se encuentra siempre relacionada con el conflicto agropecuario, que en junio de 2008 derivó en una caída interanual de la -11,3 %.

Las mejoras

Por otro lado, el documento de la UIA subraya que algunos sectores mostraron un mejor desempeño, entre ellos química, petroquímica y cemento con aumentos de producción con relación a los meses previos. Esto contribuyó a suavizar la caída.

Sin embargo, en el caso del cemento, el reporte correspondiente a junio del grupo Construya, dice: “En términos interanuales, los despachos de cemento portland, principal insumo de la construcción, crecieron 12,6 % interanual. Sin embargo, estas comparaciones no tienen sentido, debido a que en junio de 2008 la economía argentina sufrió una parálisis masiva, producto del conflicto “campo-gobierno’ y del paro que realizaron los transportistas a raíz del enfrentamiento señalado”.

Finalmente, según información aportada por la Cámara de la Industria Química y Petroquímica, dicha industria tuvo en junio un aumento interanual de su producción del orden del 26 %, fundamentalmente por el crecimiento de agroquímicos y fertilizantes y, en segunda instancia, de las materias primas plásticas.

Los problemas

Pese al freno en el proceso de deterioro, la central manufacturera advierte que, en líneas generales, la mayoría de los sectores de actividad industrial continúa presentando escaso dinamismo y marcados retrocesos. Menciona específicamente los casos de la metalmecánica, textiles, caucho y plástico, papel y cartón, autopartes, madera y muebles, y otros materiales de la construcción, entre otros.

Mientras tanto, los subrubros que mayor caída sufrieron en su nivel de utilización de capacidad instalada, en la comparación interanual, fueron Máquinas y Herramientas (-56 %), Maquinaria Agrícola (-53 %), Autopartes (-49 %), Metalurgia básica (-47 %), Acoplados y Semirremolques (-43 %) y Otras Máquinas y Equipos (-41 %). También menciona el deterioro generalizado en toda la industria electro-metalmecánica, “ya que en el mejor de los casos (Artículos para el Hogar, Artefactos Eléctricos y Electrónicos y Otros) las variaciones son de entre un 25 % y un 35 %”.

Frente externo

Durante el mes de junio se mantuvo el magro comportamiento de las exportaciones de Manufacturas de Origen Industrial, con una caída interanual del 5 %, aunque de menor magnitud que la observada en meses previos. La mejora relativa, analiza la UIA, está vinculada, en parte, al mejor desempeño de las exportaciones de vehículos automotores.

Por el lado de las importaciones, en junio hubo fuertes caídas en la mayor parte de los rubros, destacándose la retracción en piezas y partes para bienes de capital (-37 %) y bienes intermedios (-43,5 %). Las importaciones de bienes de capital aumentaron en junio 2,4 % modificando la tendencia observada desde principio de año (-44 % promedio). Pese a eso, los bienes de capital continúan mostrando una caída interanual de 23 %.

Empleo

Por último, y con relación al mercado de trabajo, los datos para el segundo trimestre de 2009 muestran el impacto de la caída en la producción sobre el nivel de empleo. El Índice de Obreros Ocupados se contrajo un 5,3 % con respecto a igual período de 2008, en tanto que Horas Trabajadas presentó una caída interanual de 8,8 %.

A pesar de este comportamiento, concluye la entidad empresaria, los salarios en la industria continúan presentando subas importantes. En este sentido, durante el segundo trimestre del año 2009 el índice de salario por obrero (ISO) presentó el nivel más alto de la serie, incrementándose para dicho período un 18,2 % respecto al mismo trimestre del año anterior, y un 4 % en comparación al primer trimestre del año.

Más información

Una copia del informe completo de la UIA puede leerse en El Litoral.com/ Blogs/ Empresarios & Empresas/.

/// EN RELACIÓN

El pulso de los empresarios

En su informe la UIA no lo señala, pero es obvio que a medida que avance el segundo semestre, las comparaciones se harán contra las cifras progresivamente negativas de 2008. Esto llevará a que la curva de caída entre en una meseta, e indicaría que el retroceso tocó un piso.

Pero si perduran factores como la falta de recuperación en el uso de la capacidad instalada, la carencia de financiamiento y la rentabilidad comprometida por la relación de costos con los precios de venta, el piso se mantendrá por largo tiempo, lo que es igual estancamiento.

El pulso empresario se refleja con nitidez en la encuesta realizada en junio por la consultora Deloitte, (Barómetro de Empresas), que compara sus resultados con una encuesta similar realizada en febrero. Es cierto que existe un mejor clima, pero no es definitivo.

La visión empresaria sobre la macroeconomía continúa siendo desfavorable. Ninguno de los consultados cree que la economía está hoy en mejor posición que un año atrás. Un 7,3 % sostuvo que no hubo cambios y un 92,7 % que empeoró.

En cuanto a las perspectivas sobre el futuro de la situación económica, la percepción general sigue siendo mala, pero se produjo una mejora en relación con la encuesta de febrero. Hoy, un 30,4 % cree que la situación mejorará de aquí a un año (hace cuatro meses dicha proporción era del 10,9 %).

En contraposición, el 45,9 % de los encuestados estimó que la situación económica empeorará en los siguientes 12 meses vs. el 69 % que se inclinó por esta opción en la encuesta de febrero.

Los resultados completos de la encuesta Barómetro de Empresas, de Deloitte, pueden leerse en El Litoral. com / Blogs/ Empresarios & Empresas / Clipping - 7 de agosto.

La metalmecánica no se recupera

Según datos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Admira), el nivel de actividad en junio se mantuvo en torno a los niveles de los cinco primeros meses del año, con una caída cercana al 30 % respecto al mismo mes del año anterior.

Los rubros más afectados fueron los ligados a la inversión productiva (Bienes de capital, maquinaria agrícola, acoplados y remolques), junto con la metalurgia básica. La capacidad instalada se redujo en torno al 40 % hasta alcanzar un nivel promedio de 48 % en el segundo trimestre, comparado con igual lapso de 2008.

Se destacó nuevamente la menor demanda tanto interna como externa, y la menor competitividad por precio del sector. En las exportaciones, la caída interanual más fuerte del semestre fue en Maquinaria e implementos agrícolas, con más del 30 %.

En el mercado doméstico, la menor demanda del sector agropecuario (cosechadoras, tractores, sembradoras y pulverizadoras, entre otros), junto a la pérdida de competitividad, siguen afectando la producción local. Según Admira, el tipo de cambio real de la industria metalmecánica se encuentra, en promedio, un 6 % por debajo de 2007, un 20 % de 2006 y más de un 30 % respecto de 2003.

Esto significa un incremento de los costos relativos, superiores al aumento que tuvo lugar en los precios en los últimos años. En este sentido, las variaciones locales de precios y costos fueron mayores a las verificadas en los países de la región y en las principales economías del Mundo.