Polémica por la banca en el Senado
Reutemann le pidió a Latorre que no asuma y cruzaron imputaciones
De la redacción de El Litoral
La polémica entre Carlos Reutemann y Roxana Latorre, motivada por la firma de ella que habilitó la aprobación de las facultades delegadas en el Senado, adquirió en las últimas horas una inusitada virulencia, luego de que ella denunciara que la amenazó para que renunciara a su banca.
La preservación de la figura de Reutemann y de su relación con él que, pese al público enojo del ex gobernador, Latorre sostuvo durante los últimos días, se trocó en acusaciones directas e incluso imputaciones personales, aún cuando luego intentó bajarles el tono.
Si ayer ya lo había acusado de “mirar al sudeste” mientras ella era defenestrada, en declaraciones publicadas hoy por Página 12 directamente le imputó estar al frente de la operación en su contra y denunció que la llamó para pedirle la renuncia y amenazarla. “El sábado (Reutemann) me llamó por teléfono para pedirme que renuncie a la banca y me amenazó. Me dijo que la iba a pasar muy mal en la provincia si no renunciaba”, relató la legisladora. Y avisó: “Yo no voy a renunciar. La única manera de que deje la banca es si me destituye el mismo Senado. Si Reutemann quiere, que renuncie él”, deslizó.
Contrato roto
El pedido de renuncia fue confirmado a El Litoral por colaboradores del senador, aunque matizaron la afirmación. “La llamó para sugerirle que no asuma, porque rompió el contrato con el electorado y la gente se siente muy defraudada”.
El propio Reutemann raficó ese criterio esta mañana, en declaraciones a LT9: “Corresponde que no asuma, porque ha defraudado a la gente que ha confiado en ella”. Pero la sugerencia sobre los pasos a seguir no fue sólo para la senadora, ya que recordó que, al recorrer los pueblos de la provincia durante la campaña, siempre recomendó a los santafesinos que recuerden las caras de los legisladores a quienes votan, de modo que “si a alguno se le ocurriera traicionar a la gente que los eligió, lo tomaran en cuenta y le fueran a reclamar”.
El senador tampoco tomó en cuenta la explicación de su ex compañera de bancada sobre la controvertida firma del dictamen oficial, puesta “en disidencia total”, pero con aptitud para habilitar el tratamiento. “Cuesta creer que con la experiencia legislativa que tiene no haya sabido que la octava firma sea la que permitía que se habilitara el tema”, espetó.
Operación
“Hay algunos observadores que sostienen que ésta puede haber sido una operación preparada en el gobierno nacional, pero la verdad es que, más allá de pensar en eso, juego más a lo que a mí me tocó pasar en la campaña que es mi compromiso con la provincia de Santa Fe”, sostuvo Reutemann. “Si fue un operativo para tirar un (misil) Exocet, para que se tire a la “miércole’ todas las ambiciones o la lucha a futuro, eso me importa tres pitos” (audio en Ellitoral.com).
La senadora, por su parte, tras negar esta mañana que sea kirchnerista, se desentendió de los reclamos del Partido Justicialista santafesino para que ceda su banca y centralizó los embates en el Lole.
“A mí, el PJ de la provincia no me quiere, nunca me quiso. Y aun así, Reutemann me puso en la lista. Si bien es cierto que hice mi carrera de la mano de él, que no se crea que todos los votos de junio son suyos. Si él me puso ahí es porque para algo le servía. Y no soy una más de los que tiró en la banquina, a lo largo de su trayectoria hizo una carrera unipersonal tirando gente a la banquina”, remató.