Con optimismo
Boudou pidió “parar un poco la mano” con la inflación
Desde Londres, donde participa de la reunión del G 20, consideró que se agita demasiado permanente el tema del alza de precios.
De la redacción de El Litoral
El ministro de Economía, Amado Boudou, lamentó hoy que “se agita demasiado permanentemente el tema” de la inflación, y pidió “parar un poco la mano” con eso y “ver cómo Argentina sorteó la crisis” económica mundial.
“Pareciera que siempre miramos el vaso medio vacío”, se quejó Boudou, quien recomendó a los consumidores “caminar y buscar” porque aseguró que hay “mucha variación de precios para el mismo producto”.
El ministro, en diálogo con radio La Red desde Londres, donde participa de la reunión del G 20, afirmó sin embargo que “en este momento no hay ningún motivo que pueda explicar” un aumento de precios como el que se habría registrado en agosto pasado. “No hay que agitar. La economía es la ciencia de la escasez, y hay que ir cuidando siempre todos los detalles y viendo qué medidas hay que ir tomando”, indicó Boudou, quien sostuvo que “hay que parar un poco la mano; siempre (están) agitando el tema y no ver el sorteo de la crisis”.
Reconoció que “se viene una etapa con mayor nivel de demanda y seguramente habrá que poner eje en otro lado. Estamos haciendo un seguimiento permanentemente, pero me parece que se agitan demasiado permanentemente este tema” de la inflación, añadió Boudou.
El ministro sostuvo, interrogado sobre el aumento de precios registrado en el último mes, que “creo que son temas que no hay que agitarlos”.
Financiamiento
Más adelante, el ministro de Economía destacó la solidez del país y aseguró que las perspectivas para el año próximo son “inmejorables”.
Además, elogió vivamente el modelo económico actual al sostener que “sirvió de amortiguador de la crisis” internacional.
Boudou, quien se encuentra en Londres participando de la reunión del Grupo de los 20, señaló que “no” tiene previsto mantener ninguna reunión con referentes de organismos financieros internacionales en la capital británica, aunque advirtió que siempre en ese tipo de cumbres hay “charlas en los pasillos”.
