La Columna del Consumidor - Adelco

Cuando un supuesto premio termina

siendo un verdadero dolor de cabeza

Dra. Natalia Rodríguez

Ing. Luis Lombó

José y Alicia salieron a disfrutar de una mañana de esparcimiento por la Peatonal. Caminaban plácidamente, cuando una promotora se les acercó, ¡buenos días como están! ¿me permite hacerle algunas preguntas para una encuesta? La pareja responde preguntas que le parecen inocentes, ¿son casados?, ¿tienen hijos?, ¿dónde trabajan?, ¿tienen tarjeta de crédito o de débito?

Al finalizar las preguntas la promotora les informa que por haber accedido a esta breve encuesta “van a participar de un juego por un importante premio, a ver, elijan un número del 1 al 44. ¡Felicitaciones! Ganaron una semana de estadía en un complejo turístico en Córdoba, que la empresa organizadora se encuentra promocionando. Los voy a llevar al local donde está mi supervisor para que les detalle con mayor precisión los beneficios obtenidos”.

De esta manera un día pensado para olvidarse de los problemas de la semana laboral puede trasformarse en la peor pesadilla de cualquier familia.

Cuento del tío

En Santa Fe y zona de influencia, un número indeterminado de parejas fueron embaucadas con esta variante de cuento del tío, que una supuesta empresa de turismo realiza, haciendo creer a las personas que ganan una estadía en uno de sus nuevos complejos que promociona de esta forma. En realidad el objetivo es vender un sistema de tiempo compartido que el premio no contiene, únicamente financiados con tarjetas y al que al parecer nunca podrán acceder, igual que al supuesto premio.

Este método, que es utilizado con distintas variantes en las principales ciudades del país, consistiría en captar a las víctimas a través de una encuesta que realizan en la peatonal, en la plaza o en las cercanías de un gran complejo comercial, en la que determinan el perfil que necesitan para que sea exitoso el ardid. Sólo pueden participar las parejas casadas o que lleven más de ocho meses de convivencia, empleados públicos o privados con ingreso fijo mensual, titulares de tarjetas de crédito, Visa, MasterCard, American Express o Diners, por último, deben tener entre 25 a 65 años.

Esta información se obtiene indirectamente en la encuesta donde se realizan siete preguntas. Una vez que los encuestadores dan con el perfil que buscan se los invita a participar de un juego donde tienen que elegir un número del 1 al 44. Las familias siempre ganan ya que cumplen con los requisitos, de lo contrario no participan del juego. “¡Felicidades, ha ganado una semana de estadía para seis personas! Mi supervisor les explicará el premio”, comunican los encuestadores el resultado del infalible juego. Para acceder al mismo el ganador debe asistir a un evento publicitario de 60 minutos donde se detalla acerca del premio, como así también los servicios no incluidos y de los demás complejos que posee la empresa en todo el país.

Protección especial

Los ganadores son acompañados por el encuestador hasta un local de la empresa ubicado siempre en una calle cercana donde un vendedor durante una hora les informa sobre los servicios y financiamientos. La habilidad de éste, que cuenta con una formación especial para este tipo de ventas, lo muestran como una persona altamente confiable, que está ofreciendo a las familias la oportunidad de acceder a servicios impensados para su realidad económica, mostrándoles un sistema vacacional que luego nada tiene que ver con la realidad. De este modo, logra seducir a un número importante de incautos que terminan suscribiendo un contrato que los compromete económicamente y firmando cupones de tarjetas de créditos en muchos casos sin monto.

Las familias que no compran ningún servicio se retiran de la empresa con un certificado que los avala como ganadores, con un número telefónico donde deben realizar las reservas, número que obviamente nunca contesta o bien que informa que no tiene ningún registro del premio.

Ahora bien, todas las personas que han sido damnificadas deben saber que, de acuerdo a la Ley de Defensa del Consumidor, las ventas de esta naturaleza que se denominan genéricamente ventas domiciliarias, así como también las ventas por correspondencia y otras, donde la propuesta se efectúa por medio postal, telecomunicaciones, electrónico o similar y la respuesta a la misma se realiza por iguales medios, tienen una protección especial.

De tal suerte que, el consumidor tiene derecho a revocar la aceptación durante el plazo de 10 días corridos contados a partir de la fecha en que se entregue el bien o se celebre el contrato, lo último que ocurra, sin responsabilidad alguna. Esta facultad no puede ser dispensada ni renunciada. El vendedor además debe informar por escrito en forma clara y notoria al consumidor de esta facultad de revocación en todo documento que con motivo de venta le sea presentado al consumidor. El consumidor debe poner el bien a disposición del vendedor y los gastos de devolución son por cuenta de este último.

Cuando un supuesto premio termina  siendo un verdadero dolor de cabeza

Las promesas de un descanso paradisíaco devienen en un complejo contrato. Pero el consumidor tiene 10 días para revocar la aceptación de lo contratado o comprado.

Foto: Archivo El Litoral

/// LA CLAVE

Sospechoso

Vale la pena señalar -sostiene Adelco- que un 99,99 % de las veces las propuestas donde se obtiene un premio sin haber participado de un concurso formal, debidamente publicitado y con bases conocidas, son un engaño, y ocultan detrás en el mejor de los casos una venta encubierta de un producto o servicio que no es necesario y en el peor de los casos directamente una estafa, por eso recomendamos a los consumidores para no ser burlados en su buena fe seguir una máxima basada en el sentido común y que postula que “nadie regala nada” o como lo indica un sabio dicho popular “cuando la limosna es grande, hasta el Santo desconfía”.

/// EL DATO

Adónde acudir

Ante cualquier problema de estas características efectúe la denuncia ante la Dirección de Comercio Interior, organismo de aplicación de la Ley de Defensa del Consumidor en la Provincia de Santa Fe, pudiendo recabar asesoramiento en nuestra pagina web, www.adelcosantafe.com.ar , o en la oficina Municipal del Consumidor de la ciudad de Santo Tomé, 25 de Mayo 1948 Te: 0342 4753370, y 0800 7772335 los lunes y miércoles de 17 a 21y los martes y jueves, de 9 a 13, o en la Municipalidad de Esperanza calle A. Castellanos Nº 1543 Te: 03496 420009, los martes de 9 a 13 horas.